Mi Vida Después De Tí
Ella una chica sencilla que vivía sus días
sola, haciendo trabajos informales, sobreviviendo de lo que lograba conseguir con sus ventas de productos, o haciendo algunas tareas escolares, era bastante tímida, alejada de las personas.
No le gustaba relacionarse, ni contar sus cosas bastante solitaria, sin amigas.
Así creció, creyendo que en esta vida ella no había venido a ser feliz, muchas veces se preguntó que propósito tenía ella en este mundo.
Abigail Méndez se esforzó mucho por estudiar y salir adelante era todo lo que podía hacer por ella misma, crearse un futuro, para por lo menos liberarse de la carga de no tener para los gastos.
Vivía sola, desde que cumplió su mayoría de edad, ella creció en un hogar disfuncional, con un padre que bebía mucho y una madre que no se preocupaba por ella. En cuanto pudo se salió de su casa y ha estado luchando por superar su situación.
Lleva 3 años desde que se salió de sus casa y a pesar de no tener solvencia económica por lo menos estaba relajada, ya no tiene que ver como sus padres se destruyen entre ellos, desde que salió de casa no volvió pues se lo dejaron en claro, al momento de irse le dijeron que ella estaba muerta para ellos.
Hoy como todos los días se levantó muy temprano para empezar con sus labores y sus ventas, salió algo distraída de su pequeño cuarto, era todo lo que se podía permitir.
Tenía una pequeña sala y cocina, su habitación y un baño.
Iba por la calle pensando en los gastos que tenía que cancelar, no había podido completar el dinero exacto que necesitaba
No se fijo antes de cruzar la calle, un auto se acercaba a gran velocidad, parecía que venía huyendo de alguien, Abbie solo escucho los chirridos de las llantas y el fuerte dolor que sintió cuando su cuerpo salió volando por el aire.
Al despertar estaba mareada y bastante desorientada, cuando logró concentrarse se encontró en un lugar que nunca había visto, no era un hospital, no tenía el tipico olor a cloro y medicinas.
Era una habitación bastante lujosa a comparación con su diminuto cuarto, pintada de gris, con un armario enorme, una puerta que parecía ser el baño, estaba acostada en una enorme cama, cubierta de sábanas negras de seda.
Observó a su alrededor y le pareció estar en la habitación de un hombre, se sorprendió y se sintió asustada sin saber cómo había llegado allí.
Intentó levantarse, pero su cuerpo protesto del dolor, no tuvo más remedio que esperar a que alguien viniera y le dijera lo que estaba pasando.
Paso mucho tiempo, y mientras los segundos pasabas más miedo sentía Abigail se preguntaba, sí tuvo un accidente porque estaba en esa habitación y no en el hospital, quien la había llevado hay, de quien era esa habitación, no podía evitar pensar en todas estas cosas y el temor se hacía más fuerte.
Hasta que escucho que la puerta se abría, vio cuando un figura masculina se acercaba a la cama donde ella estaba, al verlo sintio miedo, pero al mismo tiempo se sintio atraída por el hombre que estaba parado frente a ella.
Era lo que se podría decir el hombre más hermoso que alguna vez ella pensó ver en su vida, alto con ojos azules claros en los que podías verte reflejada y si te enfocas solo en su mirada podias perderte en ese abismo azulado, cabellos castaño, piel clara, labios carnosos, la hicieron perder el aliento y no sabia porque no podía quitarle los ojos de encima.
Hasta que él le habló y ella volvió en sí, su voz era seductora bastante dominante, era como si después de que él te hablara no pudieras negarte a nada de lo que te pidiera.
Le preguntó cómo estaba y le dijo que debía tener muchas dudas y que él le respondería cada una de ellas.
Abbie trago en seco no sabía que responder, lo único que logró salir de sus labios fue preguntar quién era él.
Cole le respondió él, está es mi casa, lamentó el accidente, te vi muy encima trate de esquivarte me fue imposible. Abbie solo podía mirarle sin saber que decir, hasta que Cole le dijo si había algo mal con su garganta o si el golpe le había vuelto muda… sonrió al ver que ella no respondía, Abby se sintió bastante apenada y agacho la mirada él se acercó más y se sentó a su lado en la cama.
Con sus manos le tomó el rostro y la hizo mirarlo a los ojos, él le regaló un sonrisa y ella solo pudo sonrojarse ante lo hermoso que se veía Cole ante sus ojos.
Abby recuperó la cordura y al fin fue capaz de formular preguntas…
-¿Que hago aquí?, ¿porque no me llevaron al hospital?, ¿quién eres tú?,¿porque traerme a tu casa?, no es correcto, ni siquiera nos conocemos.
Cole cambió su mirada, se volvió serio y la miró de manera molesta, le habló de manera que Abbie se sintió asustada.
-Tu te cruzas por la calle, sin mirar a donde vas, te ayudó, te consigo un médico, te traigo a mi casa para que descanses y poder cumplir con mi parte después del accidente y tu en vez de agradecerme, me hablas como si yo te estuviera secuestrando, eres libre de irte en el momento que quieras, no estoy para lidiar con niñas con delirio de persecución. Cole camino hacia su armario y sacó ropa y zapatos y las puso sobre la cama
Abigail después de escuchar a Cole trató de levantarse de la cama, pero en el momento en que sus pies tocaron el suelo perdió el equilibrio y cayó, como pudo trató de ponerse de pie.
Tomó la ropa y como pudo llegó al baño, entró y cerró la puerta y cuando logró verse estaba sangrando y un dolor insoportable le recorría la pierna.
En medio del dolor, el susto y la humillación que sintió, solo le dio por llorar, no sabía porque su vida era así, siempre pasándole cosas, ensañándose con ella, el día de hoy solo estaba tratando de ver como resolvía su situación y lograba como poder pagar la renta.
Fue atropellada y traída a un lugar que no conocía y tratada como una lunática solo por querer saber el porqué estaba ahí.
Cole afuera escuchó sus sollozos , se sintió tan culpable por haberla tratado así, era normal que ella desconfiara y preguntará cómo llegó ahí. Pero desde muy joven siempre había tenido mal carácter y a pesar de ser caballeroso y cariñoso, había situaciones que lo sacaban de sus zona de tranquilidad odiaba que las personas desconfiara de él y lo vieran como si fuera un criminal
Tenía su cuerpo tatuado, vivía de una manera bastante ostentosa pero eso no era indicativo de que tenía que ser un delincuente, y al sentir que aquella chica tenía miedo y lo miraba con desconfianza no puedo controlarse y le dijo esas cosas, que en el fondo sabía que no debía decir.
Espero paciente a que ella estuviera lista y se calmara para disculparse no quería que ella se quedara con esa impresión, en el fondo ella también lo impresiono, era bastante linda, pero en su mirada había una tristeza que lo hizo querer saber el motivo, no entendía porque una chica tan joven, tenía en su alma la tristeza que reflejaban sus ojos.
Pasaron los minutos y ella no salía, se acercó a la puerta y la llamó por su nombre, mientras tanto Abbie ya se había logrado cambiar y curar su herida, revisó los gabinetes y se encontro algunas vendas, trato de limpiar lo mejor que pudo el cuarto de baño, para luego salir no quería seguir incomodando.
Al escuchar que Cole la llamó por su nombre se sorprendió, ella no se lo había dicho, fue entonces cuando abrió la puerta y lo vio directo a los ojos, en su mirada ya no había miedo o desconfianza sino un total enojo, esto sorprendió a Cole, no pensó que ella pudiera cambiar tan rápido de actitud.
-Como sabes mi nombre, Preguntó Abbie con un tono de voz firme, a lo que Cole respondió con una risa, eso la enojó más.
-Te pregunte de dónde sacaste mi nombre
-Calma, revise tu identificación, había que atenderte, aparte también estaba buscando algún contacto a quien localizar para que viniera por ti.
Por eso te traje aquí no pude encontrar a quien llamar, y tampoco podía dejarte tirada en medio de la calle.
-Pudiste llevarme a un hospital, no entiendo porque me trajiste aquí.
-No podía llevarte al hospital, me metería en un escándalo que en este momento no me puedo permitir….
No me preguntes más no puedo decirte.
-Bueno ya no importa, podrías mostrarme la salida, necesito volver a mi casa.
-Vas a irte así, con la pierna lastimada, el doctor dijo que debías estar en cama por lo menos tres días.
-Pues si mal no recuerdo me dijiste que podía irme, y no voy a quedarme donde no soy bien recibida.
-Vaya donde quedó la chica tímida que entró en mi baño, ahora pareces otra. Y bueno respecto a eso, lo siento no debí decir esas cosas, es solo que no me agrada que me miren de la forma en que lo estabas haciendo, prefiero esta mirada, no me agrada cuando me temen.
Puedes quedarte aquí el tiempo que el doctor dijo, me sentiré más tranquilo y así también pagaré mi deuda después de golpearte con mi auto.
-No es necesario, aparte debo volver a casa, tengo compromisos que cumplir y pedidos por entregar.
-bueno voy a llevarte, no puedes andar así sola por la calle, me cambio y te llevo, y no acepto que me digas que no Abigail.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 74 Episodes
Comments
Graciela Saiz
más pobre que una laucha y soberbia 😏
2024-11-09
0
Yasmina Correa
listo la sufrida y el altanero
2023-09-20
1
Maris Benitez
Muy interesante 😊😊😃😃😊😊😃😃😃😃😃😊
2023-07-29
0