Porque Soy La Madre Del Hijo Del Diablo

Mientras Alma y Esteban despertaban, la reina y su hija platicaban sobre ellos, Mazikeen explicaba lo poco que sabía de sus vidas, lo que impresionó a su madre fue todo lo que había hecho Alma por buscar a su hijo adoptivo

- Realmente lo ama - dice Lilith viendo a Alma

- Eso parece -

- En parte la comprendo - Mazi la mira extrañada - eres mi única hija, si no te tuviera conmigo también te buscaría -

- Encerio? -

Con una sonrisa la mira - por supuesto, tal vez no lo demuestre, pero eres importante para mí - su hija estaba a punto de reclamar, pero los lamentos de Esteban la distrae

- Que dolor de cabeza - se queja mientras se esfuerza por levantarse y permanecer sentado - Alma? - la busca y mueve su cuerpo - Alma despierta - ella abre los ojos y un quejido sale de su boca

- Que demonios - Esteban le ayuda para que también se siente, sujetando su cabeza se sigue quejando - como duele -

- Traigan agua - la reina ordena sin dejar de verlos, de inmediato una sirviente llega con una jarra y vasos - beban, se sentirán mejor -

Ellos obedecen, les reconforta beber, sienten como su cuerpo vuelve a tomar energías

- Gracias - dice Esteban regresando el vaso a la sirviente, Alma hace lo mismo, pero sin pronunciar palabra

- Espero se sientan mejor, tenemos una charla pendiente - ambos miran a la reina quien señala un sillón frente a ella, Esteban se levanta y ayuda a su amiga, estando ya en el sillón, la reina prosigue - me disculpo por mi reacción -

- No hay problema - responden al unísono

- Como se nota que nos son de este reino - Mazi comenta divertida

- Déjalos Mazi - reprende su madre también con una sonrisa - espero entiendan, es raro que alguien se comporte tan educado, pero nos agrada - de nuevo ambos asienten al mismo tiempo - así que eres la madre adoptiva de ese tal César? -

- Así es su majestad -

- Por favor llámame Lilith - Alma voltea y mira a Esteban para pedir su autorización, no le parece llamar a la reina por su nombre, Esteban solo asiente

- Claro Lilith - responde algo apenada - el motivo de mi visita a su reino es para saber sobre mi hijo, en el cielo me dijeron que su alma fue traída aquí -

- Así fue - dice Lilith mirando a la nada - te contaré todo desde el principio -

Empezó explicando el acuerdo entre ella y su esposo, cómo él a roto ese acuerdo varias veces y lo que ella ha tenido que hacer para solucionarlo, la forma en que se dio cuenta de la existencia de César, su supuesta primera muerte y como lo descubrió diez años después

- Para tu mala fortuna estuviste en el lugar equivocado, en el momento equivocado, yo solo mandé por César, pero tu insistencia te hizo perder la vida, y aún después de ella lo sigues buscando - termino de hablar Lilith con una sonrisa - ahora - se inclina para observarla - lo que más te interesa - pausa dramática - cuando llegó aquí ya lo estaba esperando, no pude evitar que Mazi lo viera, aun así me lo lleve de inmediato, mi idea era dejarlo un tiempo con alguno de los príncipes, con la orden específica de hacer su estadía un verdadero infierno mientras encontraba la forma de volverlo un simple demonio que solo me obedeciera a mí - suspira - pero por alguna maldita razón Lucifer también sabía que ese mocoso había llegado aquí - su rostro cambia a molestia - lo arrebató de mis manos, peleamos fuertemente, siempre hemos demostrado que somos igual de fuertes y hábiles, esa vez no fue la excepción, después de un buen rato, el mocoso habló

 "Jamás se acabará esto, es mejor que lleguen a un acuerdo, puedo sugerir que me permitan regresar a la tierra con las condiciones que ustedes quieran, ya que tenerme aquí solo hará que se hagan daño por siempre"

- Y de esa forma mi esposo y yo llegamos al acuerdo de regresar al bastardo a la tierra, ninguno de los dos interferiría en su vida, era obvio que tarde o temprano volverá a llegar aquí, borramos su memoria, lo último que supe de él es que vagaba en busca de comida, esperando que alguien le dijera algo sobre él -

Alma estaba con los ojos abiertos, su respiración agitada y con un nudo en la garganta que le impedía decir palabra alguna

- Disculpe Lilith - hablo Esteban - puedo llamarla así? - la reina asiente - en la investigación que realizó el cielo reflejó que él había llegado aquí, si César estuviera en la tierra ellos lo sabrían, no cree? -

- No me importa en lo más mínimo el pésimo trabajo que haga el cielo - dice Lilith despreocupada - pero tal vez influyó que no regresó a su cuerpo, como saben, el tiempo fluye de manera diferente en cada reino, y el cuerpo que habitaba originalmente no pudo ser usado de nuevo, encontramos uno de su misma edad a varios kilómetros en donde murió -

- Qué!!! - gritó Alma al mismo tiempo en que se puso de pie - oh mi pobre César - lágrimas ya salían de sus ojos - debió ser horrible -

- Él no recordaba nada - dijo Mazi despreocupada - hubiera sido lo mismo en su cuerpo original o no -

Alma la fulmina con la mirada, con la mandíbula apretada dice - pero alguien lo hubiera reconocido como mi hijo y mi familia le daría el apoyo que necesita -

Mazi suelta una gran carcajada - tu hijo hubiera sido el primer muerto viviente, no hubiera caminado ni cinco minutos sin que alguien lo mandara de nuevo aquí -

- Basta - la voz de la reina retumbó en todo el lugar - lo hecho, hecho está, tu hijo sigue en la tierra, no sé quién es en la actualidad y la verdad no me importa, es lo que querías saber, es por lo que llegaste hasta aquí y es lo único que te puedo decir, arreglado el asunto no hay necesidad de que su estadía en mi castillo se prolongue - apuntó la puerta con su mano - Mazi los llevará de vuelta a su residencia -

- Gracias por su tiempo majestad - Esteban hace un a reverencia seguido por Alma

- Lilith? - le llama Alma - gracias por todo -

- No hay nada que agradecer, espero con ansias el día que ese bastardo regrese - responde con una sonrisa aterradora, Alma traga grueso y camina detrás de Mazikeen

El regreso fue mucho más rápido, en esta ocasión los tres caminaron en silencio, al llegar a la puerta de la mansión Mazi los observó, esbozo una sonrisa y dijo

- Tengo un trato que ofrecerles - ...

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Feliz día de San Valentín, no sé cuándo sea publicado este capítulo, pero se escribió un 14 de Febrero, día del Amor y la Amistad en México.

Les deseo de todo corazón que siempre exista amor en sus vidas y que sepamos apreciar el que recibimos. Les cuento, yo por mi parte esperé durante años recibir el cariño que doy y que merezco, esperé con mucho anhelo ser tratada como siempre soñé, y un día, alguien me trató así, alguien me miró como su todo, alguien me dijo un te amo observandome a los ojos con absoluta sinceridad, fueron mis hijos los que me regresaban cada atención, cada beso y abrazo y ahí me di cuenta que no necesitaba esperar a ese otro que nunca valorará lo mucho ( para él poco ) que hice para ser felices