Tras descubrir que Roger, el alfa de la manada, era su mate y este la rechaza por ser omega, Thesaí acepta el rechazo, pero esto solo ofende a Roger, quien manda a mantenerla encerrada, sin imaginar que esto traería graves consecuencias para su manada, que sería castigada por la diosa luna.
Durante dos años, Thesaí fue sometida a terribles condiciones y torturas, y justo cuando Roger planeaba traerla de regreso para salvar a su manada de la maldición, Thesaí ya había desaparecido, ella fue salvada por otros lobos que se infiltraron en el territorio. Al despertar, Thesaí descubre que su nuevo mate es el mismísimo Rey Lycan, Anubís Triente.
¿Thesaí será aceptada o rechazada nuevamente?
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Cap. 14 Majestad, ¿Qué olor, no entiendo?
Mientras tanto en la manada Real la situación es totalmente diferente.
Anubis llega al palacio de la mano con Tess, la niña sonríe alegre mientras Anubis la mira con dulzura.
* Rey Anubis, Reina Thesaí, sean bienvenidos _ la servidumbre se apostó en la entrada para recibirlos.
Las lobas y las Lycan miran a Tess con dulzura, esa hermosa niña es una dulzura, ¿Quién podría tratarla mal? Se preguntan un poco molestas, como había llegado las dejó con el corazón roto.
Anubis llevó a Tess a la habitación que comparten, ellos duermen juntos, pero aún no han avanzado.
* Cachorrita, en 10 días será tu coronación, mi hermano llega para que te conozca, él llega con su Mate, es una humana, así que quiero que la ayudes, seguramente va a estar muy asustada, solo tú podrás ayudarla para que avance _ dijo Anubis mientras la abraza y Tess se refugia en sus brazos, la coronación la tiene un poco nerviosa, y esa humana podría ser una buena distracción.
* Mi Rey, ¿estás seguro que quieres hacer una gran coronación?, yo la verdad no me siento bien con eso, vendrán de otras manadas, no quiero que un acto tan puro como ese se manche con la presencia de ciertas escorias _ dijo Tess, molesta, quiere destruir a ese Alfa maldito, pero no quiere que nadie mas que él sufra por eso.
* Cachorrita, él no vendrá, no está invitado, solo sabrá de tu existencia cuando lleguemos a su territorio, la cantidad de criaturas viles que están en ese bosque solo muestra la corrupción de esa manada, no lo voy a permitir _ dijo Anubis mientras le da un beso en su frente.
Tess, sonrió alegre e inmediatamente se animó para dar un golpe bajo al fuerte Lycan que le cuesta cada vez más esas pruebas que le pone esa niña.
* Mi Rey, vamos a bañarnos, quiero arreglar todo mañana para mi cuñado y mi cuñada _ dijo ella jalándole al baño, en cambio Anubis tiene que hacer de todo para no comérsela viva, su autocontrol se está perdiendo y su Lycan pervertido ya está arañando las paredes de desesperación.
Mientras ambos estaban en la enorme tina, Anubis tenía a su amada Omega recostada en su pecho y ella sonrió un poco sonrojada, sabe que él está controlándome con ella de una forma monumental, ya una vez había visto lo monumental de su deseo por ella.
* Mi Rey, ¿me puedes contar cómo es que me encontraste?, quiero escucharlo _ dijo suavemente.
Anubis sonrió y se alegó, es la primera vez que ella pide escuchar esa parte, aunque él se lo había dicho a grandes rasgos.
Anubis Triente.
Hace tres meses me encontraba trabajando y con un tema que me tiene preocupado, la Manada Luna Azul, hay criaturas oscuras y viles en ese bosque, no era así, los lobos ancianos del concejo me dicen que es una clara señal de que la Diosa Luna está molesta.
Había enviado a varios espías para saber lo que pasaba, pero ese día hubo algo que me llamó la atención.
Uno de mis espías es un joven tritón, su trabajo es meterse en problemas como todo tritón, ese Sirenito es todo un caso de estudio.
Cuando vino a darme parte de lo que había visto algo me llamó la atención, él hablaba, pero había un olor que provenía de él que era lo más delicioso que había olido en la vida, era terriblemente atractivo pero suave, había pureza y dulzura, por un momento me preocupé, no era que el Sirenito sea feo, pero no es mi preferencia, era obvio que no era su olor ya que nos habíamos reunido incontables veces, estaba impregnado en su ropa.
* Nelson, ¿qué es ese olor en tu ropa? _ dije mientras él se callaba, todos me miraban como si fuera un loco, tal vez era por mi cara de sorpresa e impaciencia.
* Majestad, ¿Qué olor, no entiendo? _ dijo un poco asustado.
Lo miré impaciente, ese olor era de mí Mate y Daniel con Rafael parecían darse cuenta así que exigieron más información.
* Nelson, dinos exactamente dónde estuviste en esa manada y con quienes te has revolcado _ dijo Daniel y sentí hervir mi sangre, si hubiera estado con mi reina lo asesinaría de inmediato.
Veo a Nelson asustarse y debe ser por mi mirada asesina, lo voy a despellejar si ha hecho algo así, eso es seguro.
* Ma…, Majestad, le juro que no he estado con ninguna Loba o Lycan, en serio _ dice entre tartamudeos, pero Dani y Rafa ruedan los ojos, si, el pobre sirenito no tiene buena fama.
Lo veo que se arrodilla y empieza a explicar.
* Majestad, lo que digo es cierto, me interné en el bosque para ver cuáles eran las criaturas que habitaban ahí, efectivamente, hay demonios muy fuertes, hay renegados realmente despiadados, brujas oscuras, pero son los Navasis, y los Votuys, hay en gran cantidad, es un hecho que es una maldición, esa manada está condenada, bueno, hubo una bruja, no era tan mala y era muy guapa _ dijo un poco nervioso, sé que él espera que esa bruja no sea mi Mate.