Cuando las personas en la cuales más confías te traicionan, ¿En quién más confiarías?, ¿Es verdad que el enemigo de mi enemigo es mi amigo?, Keyza Bagirova y Rafael Reyes deberán descubrirlo, y a lo largo de sus aventuras en su búsqueda de venganza deberán darse cuenta de que en ocasiones perder es ganar.
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CAPÍTULO XII: Los términos de nuestro acuerdo parte 2
Kenya observaba las redes y desde el día de ayer solo recibía insultos y malos comentarios.
-¡!! Mamá mira lo que están diciendo sobre mí!!!, esto es un desastre – Se quejó Kenya
-Ya hablé con el experto en contenido y me dijo que el ataque es desde varias cuentas, está trabajando para minimizar el efecto
-Esto es obra de Keyza - Aseguró Kenya
-Cuando encuentre a esa resentida mocosa me va a escuchar - Dijo Ivana
-¿Cómo piensas encontrarla mamá?
-Olvidaste que mañana va a ir a la universidad.
Ivana sabía que su hija jamás faltaba a su trabajo, y al día siguiente la buscaría en ese lugar y la obligaría a regresar.
Susie y Fausto se encontraban almorzando, la pareja era muy cercana entre ellos y conversaban animadamente sobre lo que debían hacer para ayudar a Keyza, los Bagirova habían intentado contactarlos desde diferentes números a pesar de que sabían que ellos no iban a proporcionar la información sobre el paradero de Keyza.
-Fausto sé que le dije a Keyza que podía quedarse en nuestra casa, pero no quiero a la loca de su madre molestando en nuestra puerta – Dijo Susie
-Estoy de acuerdo contigo Susie.
-¿Entonces que podemos hacer para ayudarla? - Preguntó Susie con preocupación.
Fausto pensaba en que podría hacer para ayudar a su amiga cuando recibió una llamada del investigador privado del bufete de Antonio
-¿Así que te pidió que hicieras eso? – Preguntó Fausto en un tono de voz muy frío
-Si Fausto y sabes que no me puedo negar a hacerlo así que únicamente quería mantenerte informado
-Comprendo y gracias por avisar – Dijo Fausto.
Susie observaba a su esposo y se preguntaba que le dijeron para que estuviera tan enojado
-Antonio envió al investigador privado del bufete a buscar el paradero de Keyza.
-Si ya termino con ella y se va a casar con Kenya, ¿Por qué no la deja en paz?
-Porque Antonio tiene un ego enorme y si la busca es porque quiere convertirla en su amante.
-Ese poco hombre me va a escuchar – Dijo Susie enfurecida
-Susie en el futuro quiero que evites a toda costa a esas personas – Le dijo Fausto tomándola de la mano.
-Fausto me estás asustando
-No hay nada que temer mi amor es solo que ahora que Keyza salió de su control van a ser muy molestos.
Fausto no quería contarle que se acercaban tiempos muy complicados y que se enfrentarían a los padres de Keyza y a la familia de Antonio, se escuchó una notificación de correo y Fausto quiso leerlo de inmediato.
-Cariño prometiste no ibas a trabajar el día de hoy – Se quejó Susie.
Fausto leía el correo que le envió Rafael y no lo podía creer, así que supuso que le estaba jugando una broma su cuñado, decidió llamarlo para preguntarle por qué le escribió ese correo.
-¿Qué es esto? – Preguntó Fausto con asombro.
-¿De qué se trata Fausto? - Preguntó Susie con curiosidad.
-Rafael me envió un correo.
Rafael estaba sentado en la orilla de la playa observando cómo Keyza jugaba con la arena mientras intentaba construir un castillo.
-¿Rafael aún estás ebrio?, porque no hay manera que tú me pidas redactar este documento – Dijo Fausto
-Si lo dices por lo del correo, estoy sobrio y es cierto todo lo que allí está escrito
-Esto no es nada gracioso Rafael
-Si no me crees habla con Keyza para que te confirme mis palabras
Fausto escuchó como Rafael llamaba a Keyza con amabilidad y no podía creer que su cuñado necesitara un prenupcial porque se iba a casar con Keyza, una mujer con la cual se llevaba hasta hace poco muy mal.
-Rafael no tomes una decisión de forma tan impulsiva
Keyza escuchó la conversación y sabía que su amigo se opondría, ya que siempre la protegía como un hermano mayor
-Fausto por favor eres mi persona de más confianza - Dijo Keyza en un tono de voz muy infantil
Rafael estaba asombrado de lo manipuladora que podía ser Keyza con Fausto.
-Keyza eso que me están pidiendo ustedes dos es una locura
-Está bien Fausto yo lo comprendo, no lo hagas si te sientes incómodo, pero de igual manera nos vamos a casar - Dijo Keyza con decisión.
-No hagas ninguna locura Keyza y permíteme hablar con Rafael.
Keyza comprendió a lo que se refería y camino en dirección a la playa para darle privacidad.
-Cariño necesito hablar algo con tu hermano – Le dijo dándole un beso en la frente.
Fausto se levantó de la mesa y se fue a la otra habitación porque no quería que Susie escuchara la conversación que iba a sostener con Rafael.
-Rafael estuve de acuerdo en ayudarte a vengarte de los Bagirova, y los García, pero no voy a permitir que uses a Keyza para hacerlo.
-Keyza sabe lo que vamos a hacer y ella está de acuerdo en ayudarme.
-Te advierto que si lastimas a Keyza jamás te lo voy a perdonar y no me importa que seas mi cuñado.
-Tienes mi palabra de que no va a salir lastimada
Fausto no estaba de acuerdo, pero luego recordó que Antonio estaba buscando a Keyza y seguramente era para convertirla en su amante y eso no podía permitirlo.
-Está bien voy a redactar el acuerdo para que lo firmen y puedan registrarlo el día de mañana.
-Excelente porque la boda es mañana
-¿Mañana?
-Si
Rafael se sonrió porque Antonio no sabía cuánto lo odiaba Fausto en ese momento y las ganas que tenía de hacerlo pagar la humillación que le hizo pasar a Keyza.
-Rafael no dejo de pensar que están actuando de forma impulsiva, pero si es lo que quieren no hay nada que pueda hacer.
-Sé que estás muy preocupado, pero esto es lo mejor para ambos
-Antonio la está buscando
Rafael frunció el ceño porque nunca permitiría que Antonio volviera a lastimarla
-Voy a llamar a alguien para que traiga mi auto
-Tienes razón Rafael, si voy a buscarte van a encontrar la ubicación de tu casa
-Necesito otro favor de tu parte
-¿Otro favor?
-Por favor cuéntaselo a Susie – Dijo Rafael colgando la llamada
Fausto negó con la cabeza porque su cuñado le temía a su hermana y siempre le dejaba esa parte para enfrentar la ira de su esposa.
-¿Qué pasó con Rafael?
Fausto movió su cuello de un lado al otro ya que no había forma de que a su esposa le agradara esta noticia.
-Rafael me dijo que se va a casar con Keyza mañana.
-¿Estás de broma Fausto?
Fausto negó con la cabeza y esperó la explosiva reacción de Susie, pero esta, por el contrario, sonrió ampliamente
-Sabía que si se daban la oportunidad se iban a gustar, porque ellos son muy compatibles
-¿No estás enojada?
-Para nada cariño esta es la mejor noticia que me has podido dar
Susie estuvo pensando por un momento y fue a su habitación y buscó un vestido
(Foto de Lauren Richmond en Unsplash)
-Es perfecto Fausto y estoy tan feliz de que Keyza va a ser mi cuñada – Dijo Susie con emoción
-No te emociones tanto Susie porque se trata de algo temporal
Susie le sonrió a Fausto y este no comprendía por qué estaba tan alegre, aunque sentía alivio de que no se enojara
-Te garantizo que esos dos no se van a divorciar – Le aseguró Susie
Keyza y Rafael estuvieron en la playa toda la tarde luego prepararon la cena entre
los dos mientras seguían conversando.
-¿Ya notificaste al decano que no vas a asistir el día de mañana?
-Creí que nos casaríamos en la tarde
-Keyza vamos a estar muy ocupados y por un día que faltes no hay problema, además tus alumnos van a estar felices
-Mis alumnos me quieren mucho – Dijo Keyza con orgullo
-Si Keyza Tepes – Le dijo en tono burlón
-Rafael tú eres el profesor más odiado de tu facultad
-Mentira mis alumnas me quieren, y nunca faltan a mis clases
-Porque todas solo están pendientes de tu trasero, te voy a hacer una sugerencia deberías usar ropa más holgada – Le dijo Keyza en tono de broma
Rafael no podía creer las palabras de Keyza sobre que sus alumnas lo consideraban un sex symbol.
-Eso solo lo dices para molestarme.
-Esta bien voy a reportarme enferma – Dijo Keyza
El decano estaba sorprendido porque dos de sus mejores profesores se reportaron enfermos, pero debido a las recientes noticias fue muy comprensivo al respecto
-No te miento Rafael me siento muy ansiosa en este momento
Rafael se acercó, la tomó de las manos y la observó intensamente porque ella lucía muy nerviosa y le sonrió con amabilidad
-Keyza pueda que no esté enamorado de ti, pero prometo protegerte y ser leal a ti en todo momento
