La Princesa Abandonada Por Su Manada

Estaba consciente de la ayuda que recibimos en estos momentos, y de que debíamos huir, pero por alguna razón mi odio y mi deseo de vengarme me hizo acercarme a Bruce para darle muerte en ese mismo instante. Estaba a pasos de él, sentía las piedras bajo mis patas, su respiración agitada después de que él fue derribado por Dash...

- Pagarás todo lo que has causado_ dije mostrando mis dientes para cortar su cuello en un instante

- Espera por favor, Aga. Antes quiero que me perdones_ dijo con la cabeza agacha

Soy un estúpido, deje que mi ambición me dominará por completo, nunca debí lastimarte de esta manera, querida Aga. Pero me enamore realmente de Esmeralda y permití que me usará_ agregó con los ojos llenos de dolor

Por un momento quedé tan perpleja ante sus palabras de arrepentimiento, me suplicaba perdón. Aceptaba lo que haría, mientras quede meditando en ello, Bruce salto sobre mí y fue en ese preciso instante, que Brayan... Mi querido amigo, hermano... quedó herido de gravedad.

- ¡¡¡Brayan!!!_ grite

- Salgamos de aquí_ dijo cojeando Bruce

Dash había acabado con 3 de ellos cuando los otros huyeron junto a Bruce.

Yo tomé tomó mi forma humana, sujete a Brayan de su cabeza porque sabía que no había nada más que hacer por él, podía seguir a Bruce y matarlo ahora que estaba débil o quedarme está vez y despedirme de Brayan como antes no logré hacerlo cuando me salvó. Fue esto último lo que hice:

- Por favor no me dejes de nuevo_ dije con lágrimas

- No llore princesa, estoy feliz de haberla salvado. Ese maldito de Bruce estaba dispuesto a matarla cuando se veía acorralado_ dijo en un suspiro

- No pude salvarte_ lloraba sin parar

- No hermano mío, debemos buscar que alguien te ayude_ llegó Dash a mi lado para acompañar también a Brayan

- Tienes que cuidarla, ese es tu trabajo ahora_ mencionó Brayan

Siempre amaré a su majestad. Por favor salvé a su reino y sea feliz... Suspiro y sus ojos comenzaron a cerrarse.

- No cierres los ojos_ decía Dash asustado

- Aguanta, te vas a sacar de aquí_ dije

- Gracias hermanos_ susurró Brayan con dificultad

Luego sonrió con dulzura y cerró sus ojos para siempre. Estaba tan bloqueada que no sabía cómo actuar, Dash y Brayan me habían protegido de mi misma, si hubiéramos huido como me dijeron no habría perdido a la persona que realmente me amaba.

Aún seguía siendo tan imprudente y orgullosa, llore con rabia y amargura. Dash se quedó a mi lado en silencio y luego me abrazó cuando descargue mi llanto.

Llevamos el cuerpo de Brayan y lo enterramos cerca de la primera cabaña que vivimos junto a mi padre. Quedó bajo un Sauce, el lugar nos pareció el más adecuado para él.

- Ven Agatha, debemos buscar algo para que comas_ comentó Dash o mejor dicho Edric

- Debería llamarte príncipe Edric ¿no?_ dije cortante

¿Por qué debería seguirte si nunca nos decías la verdad?_ lo mire molesta

- Por favor Agatha, tenía razones importantes porque no podía decirte quién... ¿Cómo es que lo sabes?_ dijo de pronto

- Lo deducimos junto con Brayan, además mi hermana buscaba a alguien también, ella siempre estuvo enamorada de ti y todo apunta a que se trataba del principe_ agregué

- Entiendo. Será mejor que nos vayamos de aquí y conversemos, puede que tú hermana tenga informantes_ agregó Dash o Edric

Llegamos hasta un risco que no conocía, y en ese lugar remoto había una casita muy linda escondida.

- En esta casa venía con mi hermano y mi padre a Cazar_ mencionó para explicar

Agatha te voy a revelar todo, solo te pido que me escuches_ argumentó y nos sentamos mirando hacia una hermosa quebrada que daba a bosques, ríos y a un amanecer extraordinario. Recordé lo sucedido con Brayan y mis ojos se llenaron de lágrimas nuevamente. Cuántas veces vimos amaneceres los tres mientras estábamos escapando.

- Le habría encantado sin duda ver este_ dijo Edric como pensando lo mismo

- Bueno, vinimos porque me dirás todo_ dije limpiando mis ojos

Quería demostrar que era fuerte sobre todo porque ya no estaba mi otro hermano.

- Mi nombre es Edric Rees soy del clan Fuego, príncipe del reino Rocoso del Este. Mi hermano es el actual rey ahora y no sabía si él también deseaba lo mismo que tú hermana, y mi lobo se llama Dash_ mencionó el serio

Quedé sorprendida por lo que me iba diciendo, de partida su nombre no era falso, sino el de su lobo. Además, era lógico por qué no podía confiar en nosotros aún, su vida también estaba en riesgo. No estaba siendo justa con él.

- Fue nuestro padre el rey de Artica quien me pidió que no les dijera la verdad_ agregó

- ¿Papá sabía quién eras?_dije

- Así es. No fue fácil esconderles esto, pero no quería que te preocuparas de más cosas. Ya tenías mucho en que pensar ¿o no?_ me observo

- ¿Y qué sucederá contigo ahora?_ dije

- Bueno en el tiempo en que salía a escondidas, descubrí que mi familia no planeaba mi muerte. Mamá está devastada y mi hermano también_ mencionó meditando

Por cierto, creo que es momento de que hable con ellos y busque su apoyo si deseo ayudarte_ argumentó

Me tomo la mano y me ayudó a levantarme de dónde nos sentamos.

- Ven, descansemos por hoy. A primera hora acudiré dónde el rey_ comentó Edric

- ¿Me ayudarás a salvar a mi padre?_ dije con la voz gastada

- Así es Agatha_ dijo mi nombre con cierto encanto que me erizo la piel de forma misteriosa.

Estabas tan agotada en muchos sentidos que cuando puse la cabeza en la almohada, mis ojos se cerraron al instante. En mis sueños veía a todos los que amaba: Zafiro y mamá, incluso con ellos estaba Brayan... Me dije que por ellos haría que Esmeralda se hiciera responsable. No sé en qué momento sentí que algo me quemaba, un fuego que se extendía por mis labios y bajaba hasta mi pecho, se sentía extraño porque era agradable. Después vino una sensación muy fría, que me sacó de eso confortable.

Suspiré y abrí los ojos de pronto.

- ¿Estás bien?_ dijo Edric con suavidad

Te dio fiebre, y te puse un paño frío.

Lo observé como si nunca lo hubiera visto en mi vida, el hombre que estaba enfrente tenía el cabello rojo, los ojos dorados más hermosos que había recordado y unas manos grandes.

- Si, fue la compresa fría lo que me despertó_ dije tocando mis labios que se sentían húmedos, sus ojos se fueron a estos y eso me hizo sentir muy tímida.

Note que mi cabello recuperó mi color natural, entonces el efecto de la fórmula se había desvanecido. Esta era la forma real de Dash, quiero decir el príncipe... Era chica para recordar que tanto se parece el niño pelirrojo, al atractivo hombre que tenía enfrente.

- Notaste que ya recupere mi aspecto real_ dijo mirando mis ojos

Debo reconocer que siempre me gustaron tus ojos_ argumentó y me acomodó uno de mis cabellos plateados

- Si, me di cuenta_ dije nerviosa por su tacto

Bueno creo que debo levantarme, tenemos que hacer un viaje para ver a tú hermano_ argumente porque su cercanía me estaba afectando.

Albina parecía muy tranquila con todo y eso me irritaba. Dash siempre fue muy molesto y ahora actuaba con demasiada cercanía que me incomoda.

- Agatha, debes descansar un poquito_ alegó

Has pasado por muchas emociones fuertes, tuve que cuidarte mientras dormías, porque no dejabas de llorar y... _ se ruborizó

Note que tenía la blusa abierta y se veía la curva de mis senos. Y Edric tenía una marca en su cuello...

- ¿Qué me hiciste?_ dije molesta y ruborizada

- ¿Qué dices? Fuiste tú quien se descubrió y cuando me acerqué a tomar tu temperatura me mordiste en el cuello_ dijo él cruzando los brazos

Deberías hacerte responsable de tus actos, yo era inocente y tú me quitaste eso_ aclaró

Lo mire con vergüenza

- Sal de acá mejor, quiero descansar un poquito como me recomiendas_ dije y me tape por completo ruborizada.

Escuché sus carcajadas, y cuando creí que se había marchado, me destape con lentitud, pero vi que se había sentado a mi lado.

Iba a abrir nuevamente la boca para maldecirlo; sin embargo, el sujetó mi rostro con sus manos y me robó mi primer beso con mis labios semi abiertos.