Elizabeth es una enfermera que es contratada para cuidar a un empresario arrogante y de mal carácter.
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Segundo día de trabajo
Elizabeth se despertó antes que la alarma sonara sin saber que hacer, se quedó en la cama un momento pensando y los minutos fueron pasando. Ya habían pasado por algo similar y se prometió que eso nunca le volvería a pasar, pero necesitaba el dinero, el despertador sonó pero Elizabeth no se levantó, lo había decidido dejaría ese trabajo y buscaría otro de camarera, limpieza o lo que fuera. convencida de esto se levantó, desayuno, se alistó y guardo algunos currículum en su bolso y salió de su casa en busca de un nuevo empleo. Llamo al ascensor y su celular comenzó a sonar, el identificador mostraba Doctor Ramírez. Elizabeth se puso nerviosa, él la había ayudado a conseguir este trabajo, ¿para que me llamara? pensó mientras contestaba.
- hola Doctor, cómo está?
- hola Elizabeth, estoy bien pero tú ¿cómo estás? supe lo que pasó, Claudia me llamo y lo lamento mucho pero tengo que hablar contigo ¿estás en tu departamento?
- estoy saliendo en busca de un nuevo trabajo.
- espera Elizabeth estoy cerca paso por ti.
y cortó la llamada, Elizabeth se quedó confundida ¿porque iría por ella? Elizabeth bajo en el ascensor y al salir del edificio el auto paro delante de el, la puerta del auto se abrió y pudo ver al doctor dentro.
-Elizabeth entra al auto por favor.
ella no entendía muy bien que pasaba pero el Doctor era el único que la había ayudado en el momento más difícil de su vida, él le había conseguido el trabajo con Danilo y seguramente se sentía culpable.
- Dr Ramírez cómo está? que sucede? dijo la mujer mientras se sentaba en el asiento del acompañante.
- Elizabeth siento mucho lo que sucedió pero lo arreglaré. y ya te dije que me hables por mi nombre.
- lo siento Gabriel, pero ¿de qué hablas? que cosa vas a arreglar?
- hablé con Claudia...
- hay no Gabriel, por favor no quiero saber nada sobre eso.
- Elizabeth debes enfrentarlo no puedes seguir así, confía en mí, hablé con Claudia, Danilo quiere hablar contigo.
- por favor Gabriel, no quiero ir a esa casa, no quiero volver a verlo.
Gabriel estacionó el auto y tomo la mano de Elizabeth.
- escúchame, eres una mujer inteligente y una buena persona, mereces una explicación más allá de la decisión que tomes, eres fuerte lo sé y tú también lo sabes.-
Elizabeth asintió sus palabras le dieron fuerza.
- además sabes una cosa, nadie quiere cuidarlo y yo me encargaré de que nadie más lo haga así que pide lo que quieras, más dinero, horarios fijos de trabajo, alguien que te ayude, ellos lo aceptaran, no tienen de otra.-
Elizabeth se quedó pensativa analizando la situación, pero dudaba ya que todos habían hablado mal de Danilo. El auto siguió el camino y llegó a la mansión, Gabriel bajo y Elizabeth se quedó dudando dentro del auto, Gabriel abrió su puerta y ofreció su mano para que Elizabeth bajará luego hizo que tomara su brazo y así entraron en la mansión dónde Claudia la esperaba.
- Querida me alegra tanto que estés aquí, ven siéntate.- dijo indicado el sillón de la sala- Gracias Gabriel por haberla traído.- Hablaba Claudia algo intranquila.
- solo la traje para que reciba las disculpas que merece, el resto es solo decisión de ella- dijo Gabriel tomando asiento
-y así será Gabriel, así será - dijo Claudia muy seria. - Elizabeth nuevamente me disculpó por lo que pasó ayer, pero debo pedirte que me acompañes, Danilo quiere hablar contigo y debido a su condición no puede salir de su cuarto, ahora está totalmente consiente y como te había dicho lo que sucedió debió ser efecto del sedante.-
Elizabeth dudo un momento ella lo vio sonreír luego de besarla pero no dijo nada.
- vamos Elizabeth, debes enfrentar la situación, luego tomarás tu decisión- susurro Gabriel quien sabía lo difícil que fue para ella trabajar en la clínica, el acoso diario que sufría en manos de uno de los médicos en jefe, Gabriel había presenciado uno de los tantos ataques de pánico que Elizabeth había comenzado a tener debido a esa situación en la que vivía.
Elizabeth asintió y junto a Claudia y Gabriel se dirigieron a la habitación de Danilo.
- hijo la Señorita Brown está aquí-.
- está bien madre hazla pasar-.
- Señor Miller..- dijo Elizabeth al cruzar la puerta
- buenos días Señorita Brown, le agradezco que esté aquí, lamento hacerla venir de esta forma, debido a las circunstancias me sería imposible buscarla y pedirle disculpas, se que no tengo escusas pero en mi defensa déjeme decirle que creo haber estado bajo los efectos de algún medicamento ya que nunca me había pasado algo así, le ofrezco mis más sinceras disculpas-.dijo Danilo y parecía muy sincero pero lo que nunca le había pasado es que una mujer se ofendiera al ser besada por él.
Elizabeth se quedó sorprendida no esperaba una disculpa semejante y a decir verdad luego de estar sedado podría despertar algo confundido.
- de ser así, acepto sus disculpas- contesta Elizabeth parada a mitad de camino entre la puerta y la cama.
- me alegro Señorita Brown, entonces podría comenzar a trabajar- Elizabeth frunció el seño y al ver su reacción Danilo agrego - ¿o quizás puede comenzar mañana?
- señor Miller yo dije que acepto sus disculpas no que volvería a trabajar para usted-. dijo de manera firme
Danilo sabía muy bien que nadie quería cuidarlo, nadie quería pasar tantas horas junto a él y su carácter fuerte, desde que ella se fue su asistente se encargó de buscarle un remplazo pero no hubo caso, por lo que tenía que convencer a Elizabeth para que se quedara.
- Señorita Brown, puede usted pedir lo que quiera para sentirse más cómoda, incluso le duplicaré su sueldo.- dirigiéndose a Gabriel y a su madre dijo - por favor ¿pueden dejarnos solos un momento?-
Gabriel tocó el hombro de Elizabeth y ella asintió. Claudia y Gabriel salieron de la habitación.
- Señorita Brown, cómo le dije lo que pasó fue totalmente involuntario, además usted golpeó a un hombre recién operado e indefenso,
- Señor Miller claramente usted de indefenso no tiene nada y no me disculparé por el golpe que le di, bien merecido lo tenía-. contesto Elizabeth algo ofuscada mientras arrojaba su bolso a el sillón
- podría denunciarla por maltrato-
Elizabeth no podía creer lo que escuchaba.
- maldito bastardo, yo lo denunciaré por acoso y este seguro que muchos enfermeros me apoyarán ya que usted, según dicen, es un ogro infumable, ahora sí me disculpa debo marcharme-
Danilo no podía creer que alguien le hablara de ese modo. Pero Elizabeth no se dejaría intimidar y aunque se encontraba muy nerviosa e insegura tomo su bolso, al acomodarlo Danilo pudo ver unas hojas de vida que sobresalían de este y entendió que ella ya estaba en busca de un nuevo empleo, todo se le estaba saliendo de las manos por lo que tendría que dar vuelta el asunto.
- espere Señorita Brown, lo siento, disculpeme soy un imbéciles, realmente necesito de sus cuidados, le triplicare su sueldo, puede pedir lo que quiera-
Danilo realmente necesitaba de los cuidados de Elizabeth pero además quería evitar una denuncia por acoso que mancharía su imagen, aunque esa idea en realidad nunca cruzó por la cabeza de Elizabeth solo lo dijo para que el supiera que ella también podía denunciarlo y que además era una mujer fuerte que no se dejaría doblegar. Por otro lado Elizabeth necesitaba mucho este empleo.
-usted es un hombre insoportable ¿lo sabe?- dijo Elizabeth fríamente
- pida lo quiera Señorita Brown, es su oportunidad.
- quiero que sea educado ¿puede hacerlo?- pregunto la enfermera con un tono acusador
- si claro que sí.- respondió Danilo rápidamente
- no quiero berrinche, los medicamentos, cambiarse la vía, curaciones, todo quiero que transcurra en total armonía.
No quiero que me falte el respeto en ninguna forma, usted es mi jefe pero yo soy una persona a la que se le debe respeto- dijo Elizabeth con firmeza
- está bien eso es fácil, algo más?-
- eso es fácil?- pregunto la mujer con ironía- deberá esforzarse mucho más, hasta ahora no lo a logrado y no lo toleraré- y mirándolo fijamente a los ojos espero su respuesta.
- le aseguro que no volverá a pasar, de ahora en más nos trataremos con respeto- contesto Danilo dejando satisfecha a su enfermera.
- quiero una habitación en la mansión.- Danilo abrió grande los ojos.- puede ser en el sector de empleados eso no importa.- aclaro Elizabeth para dejar en claro que no había malas intenciones ni trataba de aprovecharse de la situación
- ok hoy mismo lo arreglaré-.
- quiero un adelanto de mi paga, y un contrato por un año, se que seguramente usted no me necesite tanto tiempo pero luego de que se recupere podría encargarme de otras cosas, limpiar, ayudar en la cocina, lo que sea-. si bien a Danilo le pareció extraño no le disgusto la idea.
- ok, algo mas?- .
- si una cosa más, un enfermero que venga una hora al día-.
- porque contrataría a un enfermero si ya te tengo a ti? y porque debe de ser enfermero y no enfermera?- pregunto Danilo algo confundido.
- Señor Miller usted es un hombre muy grande para mi- Danilo puso una sonrisa pícara y Elizabeth frunció el seño y siguió hablando- por lo que necesitaría alguien que me ayude a moverlo para poder bañarlo-.
Danilo abrió los ojos grandes con sorpresa la idea de que Elizabeth lo bañara lo incomodaba, por lo que era buena idea contratar a un hombre para esa tarea.
- ok, le pediré a Gabriel que se ocupe, él podrá resolverlo. ¿ algo más?
- bien eso es todo-.
Danilo se sorprendió que no pidiera nada material por lo que agrego
- Señorita Brown dije que podía pedir lo que quisiera-.
- y ya lo hice-.
- y no desea algo material?-
- usted ofreció triplicar mí sueldo, con eso es suficiente-
- bien arreglaré todo lo antes posible. ¿ puedes comenzar ahora mismo?-
- es que no e traído nada, no esperaba todo esto-.
- has una lista de todo lo que necesites y déselo a Mariel, ella se encargara de mandarlo a comprar.-
- bien, iré a hablar con Mariel-
Elizabeth comenzó a caminar hacia la puerta.
- espere Señorita Brown, quisiera saber porque decidió venir a hablar conmigo?-
- a decir verdad no hubiera venido si no fuera por el Doctor Ramírez, él fue a buscarme cuando salía en búsqueda de un nuevo trabajo-
- entiendo.