UNA NUEVA OPORTUNIDAD

HOLA A TODOS, NO SE SI SE HABRÁN DADO CUENTA PERO ME GUSTAN LAS NOVELAS CON POCOS PERSONAJES, TAMBIÉN ME GUSTA LEER Y ME DESESPERA TANTOS PERSONAJES.

GRACIAS Y APOYEN MI TRABAJO ♥

Felipe Sandoval un multimillonario que a pesar de su dinero no tenía felicidad completa, desafotunadamente no podía tener hijos; nunca iba a tener una familia y por eso se sumergio en su trabajo y se dedico a salir con mujeres pero si repetir con ninguna, sabia que no se podia encariñar con ninguna por su infertilidad, eso lo hacia sentir menos hombre.

A la edad de 35 Felipe sentía un vacío en su vida, sabia que nunca iba a tener descendencia, a las 5 de la tarde salió de su empresa para su casa, iba pensando en la soledad que sentía día tras día al llegar a su casa sin nadie que lo resiviera, el auto paró en el semaforo, a lo lejos vio a una niña sentada en el piso llorando desconsoladamente, el pidió a su chófer estacionar el auto, bajo y llegó hasta donde estaba la niña y le preguntó ¿porque estaba sola y llorando? la niña lo miró asustada y le dijo.

— No me haga daño por favor, no voy a mestar a nadie.

Felipe se sorprendió por la respuesta de la niña, quería saber lo que estaba sucediendo y estaba dispuesto a ayudarla en lo que pudiera, se acercó un poco a ella y se sentó a su lado y le dijo.

FELIPE: no te voy a hacer daño, quiero ayudarte, cuéntame ¿qué te pasó?

— Voy a confiar en usted, estoy aquí porque no tengo familia, vivía en una casa hogar y me escape porque me trataban muy mal, ahora no tengo a donde ir y me da miedo dormir en la calle.

FELIPE: Te voy a llevar a mi casa, allí estarás muy bien, dime como te llamas.

— Dainis, gracias por ayudarme, me voy a portar muy bien.

FELIPE: Lo sé pequeña, yo soy Felipe Sandoval.

Felipe se llevó a la niña a su mansión, mientras llegaban a su casa él comenzó a escribir a sus trabajadores para qué organizarán una habitación para Dainis, y con su abogado que se encargará de la casa hogar donde estaba Dainis, el no quería que otros niños pasaran por esa situación, también le dijo que organizará todo para adoptar a Dainis para que sea legalmente su hija.

Al llegar a casa Dainis se sorprendió por lo inmensa que era, nunca había visto una casa tan grande, Felipe le dijo que esa iba a ser su casa, también le comento la idea de adopción, la niña no sabía de lo que él le hablaba y le explicó, Dainis al saber que podía tener un padre se puso feliz, le dijo que no lo iba a decepcionar porque iba a ser la mejor hija.

Después de unos días todo se dio como Felipe quería, la casa hogar recibió su merecido y Dainis era legalmente DAINIS SANDOVAL, comenzó a estudiar en la mejor escuela de la ciudad, a Felipe le cambió la vida ya tenía una hija por la cual llegar a casa temprano y ser bien recibido, no era de su sangre, pero lo importante era el amor que sentía, era su hija legalmente y por ella era capaz de todo, porque él sabía que padre no es él que engendra, sino el que cría.

Pasaron 5 años y con ellos llegaron los 15 años de Dainis, Felipe le hizo una gran fiesta e invitaron a unos cuantos allegados Dainis, compañeros de escuela, Dainis estaba feliz porque Dios puso en su camino a un excelente ser humano que se convirtió en su padre.

FELIPE: Mi hija hermosa, disfrutade tu fiesta mi reina porque te mereces esto y más.

DAINIS: Gracias papá, eres lo mejor que me ha pasado en la vida.

Padre e hija se dieron un tierno abrazo, la fiesta continuó con Dainis feliz y Felipe orgulloso de su hija, ella era una niña de buen corazón, a pesar de tener un padre con mucho dinero no cambió, era una niña muy humilde que ayudaba a todo el que podía ayudar siempre con la ayuda de su padre, Dainis no se dejó deslumbrar por el dinero.

Pasó el tiempo y Dainis se estaba graduando de administradora de empresa con 21 años, Felipe orgulloso del logro de su hija le dijo que era su mayor tesoro.

FELIPE: Eres todo para mí, hija, sabes que te voy a apoyar en tus decisiones, así no esté de acuerdo en algunas de ellas.

DAINIS: Papá por favor, ya hablamos de eso.

FELIPE: Lo sé mi reina, por eso te digo que te apoyo aunque no esté de acuerdo, sabes que siempre voy a estar para ti.

Felipe apoyaba a su hija en todo, ella nunca tomaba malas decisiones, pero hubo una de la cual Felipe no podía hacer nada a pesar de no estar de acuerdo.

Dainis tenía 6 meses de ser la novia del hijo de un accionista de una de las empresas de Felipe, él no estaba de acuerdo porque sabía lo avaricioso que era él padre del joven y su hijo podía estar influenciado por él, de igual manera Felipe apoyo a su hija pero vivía pendiente de lo que hacía su yerno y su padre, aunque veía a su hija feliz y parecía que el novio era un buen chico.

Con el pasar de los meses Dainis se casó, su padre la entregó en el altar recordando cuando era niña que lo esperaba todos los días para jugar, iba a quedar viviendo solo porque la pareja tenia ya su casa donde vivir.

Dainis era feliz viviendo con su esposo Ever, pero con el pasar de los días él fue cambiado con ella; Dainis creyó tenerlo todo, un matrimonio maravilloso, un padre incondicional, pero no sabía lo que sucedería más adelante.

Dainis quería atender a su marido, dejo de trabar en la empresa de su padre para dedicarse a su hogar, aunque ayudaba a su padre con algunos trabajos desde casa.

Ella se dio cuenta que eran las 7 de la noche, era la hora de llegada de Ever, fue a la cocina a calentar la cena que habia preparado para celebrar su aniversario, mientras calentaba miró su celular y sonrió al ver la foto de su boda, se acordó cuando conoció a Ever en una reunión en la empresa de su padre, el era muy hermoso, además de su físico, era un hombre dulce y tierno; no pudo evitarlo, se enamoró a primera vista, también se acordó de su padre, no estaba de acuerdo a su relación al igual que su amiga Ainoa.