Leila:
Abrí mis ojos, viendo el techo de un lugar, pasé mi mirada hacia alrededor viendo que estaba completamente sola, me levanté quedando sentada en la cama…
Leila: Ayyy….
Me llevé la mano al cuello sintiendo que estaba con una gasa. Baje mis pies, sintiendo que me los sujetaron con fuerza.
Leila: AAAAHHHHH….
Los soltaron subiéndolos toda prisa. Tragué saliva acercándome poco a poco hacia la orilla de la cama…
Mariam: Miiiiiaauuuu…
Leila: AHHHHHH…. INCHE GATA….
Me removí asustada pegando mi cuerpo en la pared, me cubrí el cuerpo con la sabana que estaba cubriendo mi cuerpo.
Mariam: No soy una gata. Soy una Minow…
Abrí y cerré mis ojos, ella se subió a la cama lentamente acercándose a mi. No apartaba mi mirada de esa niña rara, su mirada era buscándome pleito, pero ni sabía como actuaría. Se sentó sobre sus dos piernas lamiendo su mano. Tragué saliva al verla, mientras lo hacía no apartaba la mirada de mi.
Leila: ¿Don… donde estoy?
Mariam: En el planeta Estiles.
Leila: ¿Planeta?
Mariam: ¿Cómo si no lo conocieras? Eres una bruja.
Negué con la cabeza, miré hacia la ventana que estaba a mi lado, podía ver desde aquí el planeta tierra, mis ojos empezaron a llenarse de lagrimas… jalé la sabana con fuerza, no la quería cerca de mí.
Mariam: Miiiauuuuu…
Me causó bastante gracia al ver como caía al piso nuevamente, se puso a gatas erizando sus pelos…
Mariam: Vas a ver maldita bruja.
La gata se me abalanzó con todas sus fuerzas, empezando a rasguñas mis antebrazos, mientras los levantaba para cubrirme de sus garras.
Leila: Oye… cálmate… estas loca.
Las dos nos removíamos sintiendo un fuerte rasguño en mi cuello haciendo que se cayera la gasa que tenía… Sostuvo mi dije apretándolo con fuerza. Solo vi como su cuerpo se elevó aventándose hacia la pared.
Me quedé con la mirada puesta en ella.
Mariam: ERES UNA MALDITA BRUJA.
Leila: No sé de que hablas… estas loca gata inmunda.
Mariam: MIIIIAAAAAAAUUUU…
De nuevo se abalanza, removí la sabana poniendo mis pies enfrente de ella, la impulsé con mis dos pies juntos pero ella sacó más sus garras pasándolas por mis leggins… Me sujetó del cabello donde mis manos se fueron a las de ellas.
LA puerta se abrió donde las dos nos quedamos completamente quietas. Ella me soltó apresurándose a llegar hacia el hombre que me había salvado…
Entrecerré mis ojos al ver como se untaba en sus pies, metiéndose entre ellos.
Mariam: Amo Bann.
Rodé los ojos al escucharla referirse a ese hombre como si fuera quien la gobernara. Ella se puso de pie abrazándolo, él solo rodeó su brazo en sus hombres. Se puso de cuclillas, pasando sus dedos suavemente por su mejilla.
Mariam: Mi amo ella es mala, muy mala, me jaló del cabello.
Leila: Miente, eso es mentira.
Él levantó su mirada hacia mi, tragué saliva al ver tanta seriedad en una sola persona. Levanté un poco la sabana cubriendo un poco mi rostro.
Bann: Mariam, déjame con Laila.
Rodé los ojos al escuchar que me llamaba por el nombre de mi hermana. La gata me miró sonriendo..
Mariam: Lo que ordene mi señor.
Que actitud de esa niña tonta, se dio la media vuelta sacándome la lengua. Intenté buscar algo para lanzarle pero no había nada en este cuarto más que una cama, una mesa y una silla, hasta un mueble donde había muchas pinturas algo extrañas.
La gata cerró la puerta. Él caminó lentamente hacia mí, lo miraba sin apartar mi mirada, me daba un poco de miedo este muchacho, no sabía muy bien quien era, ni que quería de mi. Solo sé que evitó que el hombre de alas negras me llevara.
Se sentó en la cama, tragué saliva mirándolo fijamente, no sabía que esperar de él. Tomó la gasa me hizo gesto haciendo referencia de ponerlo en la herida.
Bajé la sabana lentamente, miré por la ventana… mis ojos se llenaron de lagrimas. Sentí una presión en mi cuello viendo que él me estaba poniendo la gasa.
Bann: Me llamo Bann Scaflow del reino Scaflow.
Leila: ¿El reino de que?
Bann: Laila, sé que esto te parece muy extraño.
Leila: No me llamo Laila, mi nombre es Leila Novachek, mi hermana es la que se llama Laila.
Bann: ¿Hermana?
Asentí con la cabeza, él se levantó tomando una de las sillas, la puso en sentido contrario montando la silla.
Leila: Mi hermana Laila, falleció hace unos días, es mi gemela idéntica.
Bann: ¿Por qué Falcon entonces te seguía sino eres la que tenía que ser?
Cerré los ojos, me acerqué a la orilla de la cama quedándome sentada frente a este hombre que me estaba rompiendo la cabeza.
Leila: No sé. En verdad que ni siquiera sé como llegué aquí. Tampoco sé como ese hombre de ojos rojos me seguía. Bueno si lo sé. Él algo le hizo al doctor que atendía a mi hermana…
Bann: ¿De que hablas?
Solté un gran respiro rodeando los ojos, me acomodé en la cama…
Leila: En las grabaciones del hospital se ve que él le pone una sombra que va entrando hacia el doctor, después el doctor desconectó el respirador que mantenía con vida a mi hermana. Lo vi, luego ese hombre el tal Falcon metió su mano hacia el corazón del doctor dejándolo sin vida. Lo raro es que otro doctor en ese momento veía otra cosa que no era lo que estaba viendo. Luego pasó otras cosas como viendo que mi hermana estaba viva, me pedía a gritos que la salvara…
Me llevé mis manos a mi cabeza sintiendo como mis lagrimas empezaban a caer… Negué con la cabeza…
Leila: Luego estoy en la pista de patinaje y llegan ustedes dos hablando extraño, diciéndose cosas que en verdad no entiendo. Luego despierto aquí donde otro loco me sigue, suelta una maldita flecha hacia mí sin saber que ocurre, luego me doy cuenta que mi planeta esta allí (señalando hacia la ventana)
Pasé mis manos hacia mis mejillas apartando mis lagrimas.
Leila: Luego una niña en forma de gata me ataca llamándome bruja. ¿QUEE ES LO QUE REALMENTE SUCEDE? ¿ES UN SEUÑO? DIME COMO DESPIERTO, QUIERO IRME A MI CASA. QUIERO ESTAR CON LOS MÍOS.
Bajé mi mirada, negaba con la cabeza, solo quería despertar de esta pesadilla que me estaba complicando hacerlo, esta no era mi vida, quiero regresar donde pertenezco.
Levanté mi mirada hacia el hombre que solo estaba serio mirándome como una loca.
Bann: Te encuentras en el planeta Estiles, tienes el poder de la magia, posees algo que todos los hechiceros están buscando.
Empecé a reírme, negué con la cabeza, este si que estaba peor de loco que la gata loca.
Bann: Leila, realmente a la que estábamos buscando es a tu hermana, si dices que Falcon estaba con tu hermana es por que entonces tiene atrapada su alma en algún lugar.
Me puse de pie caminando con algo de trabajo, me dolía mi pierna… me pasé de un lado y del otro negando con la cabeza.
Leila: ¿Poder? ¿De que me hablas? ¿Qué es eso que tienen el alma de mi hermana?
Él se puso de pie dando pasos, me sostuvo de los brazos con algo de fuerza…
Bann: Te dije que esto te parecería muy raro. Te entiendo. No perteneces a nuestro mundo, pero tus propios poderes te han hecho ver lo que nosotros somos. ME dices que el doctor miraba una cosa y tú otra. Bueno, tú estabas viendo lo que realmente pasó, si tu hermana te la imaginaste que estaba viva, es por que la tienen atrapada por el mismo Falcon.
Me soltó dejando libres mis brazos, pasé mis manos por mi rostro, esto sonaba una completa locura.
Bann: Posees poderes, te lo estoy diciendo. Tu bisabuela Leika, durante años vivió aquí.
Me llevé mis manos a la cintura mirando las locuras que me decía.
Bann: Tu abuela también poseía poderes de magia, tanto que fue la ultima humana del planeta Tierra que vio Olimpia, la ciudad de la vida, por eso le forjaron ese dije que tienes, ese dije es La Vid, es la pura energía de vida…. Vida que todo mundo quiere tener.
Leila: Lo siento, en verdad no entiendo nada. Me hablas de cosas que no entiendo.
Me tomó de la mano suavemente atrayéndome hacia la cama, hizo que me sentara, él giró la silla sentándose frente a mí.
Bann: Este es el planeta Estiles, soy Bann Scaflow, pertenezco al reino de Scaflow, donde tuvimos una gran batalla en contra de Aponte, un hechicero que asesinó a muchos de mi reino, así como el reino de los Midow, de los Orcis, de los Faunos, de las mandrágoras. Muchos dimos la vida protegiendo lo más que podía, existen en este mundo los humanos como Allen, la princesa Mirlena, los del reino de Asturias son humanos de este planeta, hemos estado bajo la protección de los caballeros y de este mismo reino. Leila, tu hermana Laila tenía sus poderes activos, ella los podía usar entrar y salir de este mundo por su derecho de la Vid, justamente ese dije que llevas en el cuello, también ella lo tenía. Es de la misma piedra que fue forjado en la ciudad de Olimpia, que no sabemos donde se encuentra. Lo que habita en ese lugar se les conoce como Eujin… son hombres como yo… Que poseemos igual poderes, tenemos alas en nuestra espalda. Luchamos por la paz y tratar de derrotar a Aponte que es el hechicero que quiere destruir nuestro planeta.
Entreabrí mis labios a cada palabra que este hombre loco, pero eran palabras con mucho dolor cada que me iba explicando cada situación, me decía lo que había sucedido en su ciudad que lo conocían como su reino, sentía como mi corazón me dolía al escuchar como tuvo que escapar de su reino para no ser asesinados.
Bann: Los únicos Eujin que quedamos en esta parte soy yo y Falcon.
Leila: ¿Pero él tiene alas negras?
Bann: POR QUE EL TRAICIONÓ A LOS NUESTROS ROMPIENDO LA BARRERA DE PROTECCION Y DEJAR ENTRAR A LOS NACROS EN MI CIUDAD. Leila, no es casualidad que tú y tu hermana sean gemelas idénticas, las brujas poderosas del bien van vinculadas, pero al ser de la misma sangre hacen de su fuerza algo incontrolable. Falcon fue por tu hermana, de esa manera te atraería hacia ellos. Por eso te digo que el cuerpo de tu hermana esta sin vida, pero su alma está penando y con los Nacros.
Abrí y cerré mis ojos, esto era algo que nunca me hubiera esperado.
Leila: Yo, solo soy una patinadora sobre hielo, estudio, cumplo con mis obligaciones, mis metas, mis objetivos. Dejé a un hombre que me ama. De seguro debe estar buscándome.
Me miró fijamente. Se puso de pie tratando de entender también que habían muchas cosas que no me quedarían claro, me hablaba de cosas que en mi mundo no existe, cosas de brujería, hechiceros, de hombres con alas. Todo esto no era fácil de procesa.
Caminó hacia la puerta mirándome por ultima vez, abrió la puerta saliendo del cuarto. Me acomodé hacia la pared levantando mis piernas para abrazarlas con tanta fuerza. Mis lagrimas caían en solo pensar que sea lo que le haya dicho se molestó. Cerré mis ojos respirando profundamente, ni siquiera pude estar en el sepelio de Laila. Empecé a llorar como una niña sin ser comprendida. Solo quería regresar a casa.
Les espero en mi instagram: lucymomhistorias
Su apoyo es muy importante, dejen su me gusta 👍,sus regalitos 🎁, comenten mucho 📝. No se les olvide seguirnos en el perfil de Novel Toon: Lucy Mom, así les llegará las notificaciones de los nuevos capítulos.
Leila
Bann
Mariam
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 45 Episodes
Comments
Anonymous Carmen diaz
Tu dije tiene poder por eso las buscan sin descendientes de brujas pero seguro Laila se volvía bruja maligna
2025-02-01
0
Anonymous Carmen diaz
Bravo si entendiste todo pero porque no sabían que eran gemelas ocultaron a Leila
2025-02-01
0
Joana Boran
como lo dijiste otra manera de ver las cosas. Me gusta esta idea, me gusta la manera que vas llegando el clímax. quiero más de esta historia
2023-09-06
1