CAP 17

¡Vaya! ¡Si son los tortolitos! - dijo sarcástica al acercarse a ellos. - ¿De dónde vienen?

- De la clínica - le respondió su padre con el ceño fruncido ligeramente - ¿De dónde llegas tú?

- ¿Porqué de la clínica? - evadía la pregunta del padre - ¿Quién enfermo?

- Yo, el estrés está cobrándose - sonrió fingidamente

- ¡Va! ¿Estresada tú? - se burló - ¡Si eres doña paciencia! ¡No creo que haya sido por estrés! - entrecerró un poco los ojos - ¿Qué ocultas?

Aunque era una pregunta retórica hizo sentir incomoda a Adele, aunque Michelle tenía apenas doce años, casi trece, era una jovencita muy perspicaz...

- Solo es estrés Michelle - afirmó

- Ya veremos - dijo sin importancia y siguió su camino

Edwin la miró un poco, como queriendo adivinar algo... ¿Sabría su hija algo más de lo que él vio?

- ¿Qué me ves así? - sonrió nerviosa

- Nada, solo que en algo Michelle tiene razón, tú tienes una gran paciencia.

Adele lo miró sin dejar de reír, su sonrisa casi parecía una mueca

- Mejor entremos, nadie es perfecto.

Y dejando a Edwin mirándola se adelantó en el camino al interior de la casa.

...****************...

- Tía deja de verte un par de días y creces un montón - le hablaba dulcemente a la bebé que sostenía en brazos - Sí que estás preciosa

- Si, también ensucia muchos pañales - le extendió un vaso con jugo a Adele - a ese paso gastaré todos mis ahorros antes de navidad.

Ambas amigas sonrieron, Carmen se sentó en la esquina de su cama mientras que Adele seguía en la mecedora con la bebé en brazos y un vaso en la otra mano...

Bebió un sorbo del jugo ofrecido por su amiga y luego dejó el vaso en una mesita cercana a la mecedora.

- Adele, te noto diferente, como que estás preocupada por algo - investigó un poco su amiga - ¿Puedo ayudarte en algo?

Adele entonces se puso de pie y llevó a la pequeña a su Moisés, luego volvió a la mecedora y tomo otra vez el vaso de jugo entre sus manos, pero lo sostuvo en su regazo.

- Volvió

- ¿Quién o qué? - preguntó un poco extrañada.

- Mi pasado

- ¡No me digas que Edwin se enteró de...- al ver a su amiga negando con la cabeza se calló la boca por un momento - ¿Entonces que fue?

- ¡Ese animal volvió! - había rabia y lágrimas en sus ojos - Me pide un millón de dólares

- ¿Queeé? ¿De dónde tú sacarás semejante cantidad de dinero? - se puso de pie enojada

- Sabe que me casé con Edwin, pero al parecer no sabe la razón y cree que tengo el dinero

Carmen se volvió a sentar en el mismo lugar de antes

- ¿Ese está fumado? ¿Y tu por qué no le dijiste que Edwin no es tu marido realmente?

- ¡Lo intenté! ¡Pero no lo cree! - volvió a soltar el vaso y entonces tomó las manos de su amiga ente las suyas - ¿Y si lo pierdo?

Las lágrimas no se hicieron esperar y rodaron por su mejilla

- ¿A esa escoria? - le preguntó asqueada y extrañada a la vez

-¡Nooo! - rectificó - ¡Ah Edwin! ¿Si él llega a enterarse y me deja?

- Amiga, ¿Te estás enamorando? - preguntó asombrada

- Ya lo estoy - suspiró profundamente

- Tengo mis ahorros, puedo darte los si quieres ahora mismo

-¡No, como crees! Ahora eres madre y necesitas ese dinero. Mejor vendo mi floristería, el señor Duvall me daba quinientos mil por ella, yo tengo doscientos mil más, solo faltarían trescientos... supongo que él pueda esperar a que los haga

- ¿Si vendes la floristería, de dónde sacarás lo restante? - le preguntó con tristeza - Además amiga, ¿Qué te hace pensar que luego no querrá más?

- Le pediré el divorcio a Edwin, así él verá que no tengo nada con él y entonces me dejará en paz...

- ¿Eso crees?

Adele asintió

- No hay otra solución.

- Sabes que cuentas conmigo, siempre - y la abrazo fuertemente

- lo sé - le correspondió el abrazo.

...****************...

Adele había acordado verlo en un reservado de algún apartado restaurante de la ciudad para entregarle el dinero y sin falta llegó a la cita.

- ¡Vaya, sí que te ves hermosa! - la elogió al verla y luego de intentar besar su mejilla fallidamente, se sentó en la silla cercana a ella - Espero que no me quieras engañar, sería una pena que tú respetado esposo, sepa tu pasado y te abandone.

- Mi matrimonio con Edwin, es una farsa, solo lo hace para tratar de corregir a su hija.

- Si como no - la interrumpió burlonamente - Lo sé todo gatica, y por cómo él te mira, tal vez seas tú quien juegues con él

- ¿Qué sabes tú de mí? - enojada - ¡Soy otra, cambié mucho!

-Ssss - puso un dedo sobre sus labios para que hiciera silencio - Sé más de lo que imaginas, recuerda que conozco hasta tus lunares...- paso la lengua por su propio labio humedeciéndolos lujuriosamente - Besé todo de ti muchas veces ¿Ya lo olvidaste?

- ¡No! ¡Por desgracia, recuerdo muchas cosas que quisiera haber olvidado! ¿Cómo me encontraste?

Él río a gusto

- Esa es una de las desventajas de casarse con un milloneta, sales en revistas de chisme y pueden reencontrarte

Adele recordó que el día de su boda con Edwin alguien tomó fotos de ellos, pero no había visto ninguna publicada en revistas o periódicos...no entendía como él si las vio.

- No tengo idea de que revista hablas... Edwin no quiso publicar nada de nosotros.

- Pues al parecer te mintió - se reclinó en el espaldar de la silla - ¿Podemos ordenar algo o será rápido nuestro encuentro?

Adele Entonces le dio un sobre grande

- ¿Qué es esto? - preguntó algo curioso al ver unos papeles

- Es mi solicitud de divorcio, como te decía, mi matrimonio es una farsa, no hay nada entre Edwin del Monte y yo. El otro documento es una constancia de que una vez que recibas el dinero, te alejaras de mí, para siempre - acentuó las dos últimas palabras para que su compañero entendiera bien - Solo si firmas, te daré el dinero

- Eres buena negociando, pero dime ¿Cómo hiciste para tener el dinero? ¡Digo! Si tu falso esposo no te lo dio - cruzó los brazos a la altura del pecho, desafiante y con una ceja levantada.

- Tú solo firma y te lo doy, no tienes que saber más - empujó un bolígrafo hacia él.

Entonces firmó para poder recibir esa suma deseada. Ella entonces le dio una bolsa oscura.

- ¿Es mi dinero verdad?

- ¡Compruébalo!

Abrió la bolsa y vio que era dinero

- ¿Está todo verdad?

- No, faltan trescientos mil

Él empezó a reírse

- ¿Quieres jugar conmigo? ¡Dije un millón!

- Solo tengo setecientos, vendí mi floristería y vacié mis ahorros...es todo

El susodicho se puso de pie y la tomó del brazo fuertemente

- ¿Quieres que te mate verdad? - le susurro al oído

- Hazlo - le retó - Ya no me queda más que perder, me lo quitaste todo.

Entonces él la soltó y ella se volvió a sentar.

- Tienes un mes, te doy un mes para que me des lo restante - hizo trozos el papel que había firmado antes - Si no me lo das, lamentaras hasta el día en que naciste, maldita perra.

Y sin demorarse más, tomó la bolsa y salió del lugar dejándola sola.

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Comments

esterlaveglia

esterlaveglia

ésta Adele es tonta 🙄🤦‍♀️

2024-05-04

3

Arcelia Medina jaime

Arcelia Medina jaime

Dile a tu esposo que te están estafando y cuéntale la verdad porque se va enterar de otras personas 👥

2024-04-20

6

Eret Lopez

Eret Lopez

pinchi VIEJO CABRON de plano es triste ver GENTE VIVIDORA nada más viendo a quien pueden estafar

2024-04-12

2

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