EN LA CASA DEL JOVEN CEO

ELENA WHEELER

El señor David Montenegro me llevó a la dirección que le había indicado. Mi madre estaba en casa.

— Gracias señor David por traerme. Algún día le contaré lo que estoy viviendo.

— Un placer ayudarte. Entonces tenemos pendiente una plática— él me dio cálida sonrisa.

Se bajó del auto y bajó mis maletas. Mi madre quien veía por la ventana, porque pude notarla, salió inmediatamente.

— Hola señor David— mi dirigió su mirada hacia mí— ¿Qué pasó? ¿Por qué traes esa maleta? ¿Y Luis sabe que estás aquí? ¿Te golpeó?

— Madre, puedes dejarme entrar y ahí te explico.

Mi mamá tomó la maleta y la metió a la casa.

David me miró muy serio.

— Ahora entiendo por qué saliste por la ventana, pudiendo fracturarte algún hueso— subió su ceja— Ese día en el parque que de repente hubo un cambio de actitud, ¿fue por tu marido?

— Te prometo que algún día voy a contarte, ahorita con mi padre en las condiciones que está de salud, no sé si hice bien en venir, aunque sé que el primer lugar donde vendrá a buscarme es aquí.

— Quédate en mi casa —quedé pasmada— oferta de trabajo ya tienes, así que solo tienes que decir que sí.

— ¿Tu esposa no.— David interrumpió.

—No tengo esposa, no tengo ningún tipo de relación, solo tengo a Molly.

— Déjame hablar con mi madre yo tengo tu número y más tarde te escribo o te llamo.

— Esperaré tu llamada.

David subió a su auto y se marchó. Mientras tanto yo entré a casa, mi madre estaba sentada en el sofá.

— ¿Desde cuándo tienes una relación con mi CEO?

— ¿Relación? No tengo ninguna relación con él, ha sido oportuno nada más.

— Luis me llamó hace un minuto, preguntando si estabas aquí y yo le dije que sí.

Abrí mis ojos como un par de platos redondos, mi corazón empezó a palpitar con fuerza. Empecé a sentirme a ansiosa. Me puse pie.

— Mamá, no debiste decirle que estaba aquí. ¿Dónde están mis cosas?— Tomé mi maleta— Sí viene no le digas nada más, que me fui y no sabes donde.

— ¿Qué está pasando?

— Me voy a divorciar de él, me fue infiel en la luna de miel. Me voy, vendré en otra ocasión a contarte.

Mi mamá quedó como congelada. Salí inmediatamente de la casa con mi maleta medio desbaratado. Recordé que no traía dinero. Entré a casa rápido.

— Mamá, no traigo dinero.

Mi mamá sacó dinero de su cartera.

— Con eso pasas la noche en un hotel. Mañana llámame, quiero que lo hablemos.

Le asentí con la cabeza. Salí de la casa. Detuve un taxi y le indiqué que me llevara a un hotel algo económico.

— Señora, los hoteles económicos son los que usan las parejas para sus encuentros, está bien que la lleve ahí.

— No, no quiero ir a ese tipo de hotel. Llevé al hotel Monarca.

Le pagué la tarifa al taxista. Entré al hotel.

— Buenas tardes, señorita, ¿Qué cuesta las 24 horas o mejor dicho el día?

— Buenas tardes, el día cuesta $300.

— Tan caro. No me imaginé que fuese caro. Déjeme ver si puedo pagar.

Saqué el dinero que me había dado mi mamá, no era lo suficiente.

— Mil disculpas, no tengo dinero suficiente— Salí del hotel.

Sentía que mi pequeño mundo se venía encima, pero no voy a regresar con Luis. A dos cuadras del hotel Monarca había un parque, me senté durante un par de horas. Cuando vi ya había anochecido. A duras penas mi madre me dio un poco de dinero. Nunca había dormido en la calle, llamé a un par de amigas, pero no me contestaron.

Estaba con las lágrimas en mis ojos, Sin saber qué hacer. Una llamada de David entró.

— Hola Elena. Todo bien.

— Si— sentía que mi voz se iba a quebrar.

— Okay. Entonces piensa mi propuesta de trabajo. Buenas noches.

— Espera, no cuelgues.

— Está bien.

— Acepto tus ofertas, está en pie lo de tu casa.

— Sí. Voy a casa de tu mamá, entonces.

— No. Estoy en un parque que está a dos cuadras del hotel Monarca.

— Ya llego.

David llegó al parque.

— Perdón, dilaté mucho.

David tomamos maleta y la subió a su auto.

— Discúlpame por molestarte, llamé a mis amigas y no me contestaron, tal vez estaban ocupadas.

— ¿Y por qué no te quedaste en casa de tus padres?

— Luis iba ahí.

Terminé subiendo al auto de David.

— ¿Dónde me llevas? Esta no es la ruta de la casa.

— ¿Cómo se te ocurre que te voy a llevar al mismo lugar? Somos vecinos recuerdas, así que te llevo a otra propiedad, que es mi sitio de descanso cuando me siento estresado. Es como una pequeña quinta, en la mañana verás que hermosa es.

— ¿Fuera de la ciudad?

David detuvo el auto.

— No te voy a hacer daño. Jamás le haría daño a una mujer. Pero si quieres regresar al mismo lugar donde vivimos, hay una probabilidad que tu esposo te vea y no vas a pasar escondida toda tu vida. Aquí por lo menos Saldrás a caminar sin que puedas sentir miedo.

Sentí dudas y desconfianza. Aunque sea el jefe de mi madre, a penas he tenido un par de pláticas con él. No somos amigos ni nada, ¿Por qué él me ayuda?

— Está bien. Solo una pregunta, ¿Por qué me ayudas? Solo hemos platicado unas cuantas veces.

— Primera, soy un caballero. Tu madre es mi empleada, y tú eres mi vecina que sufre violencia por un desgraciado, es mi deber como persona. Pero si quieres más razones te la puedo dar, pero creo que por los momentos esas tres son suficientes.

Llegamos a una "pequeña quinta", realmente no era una pequeña quinta. Era una mansión. Los empleados salieron a recibirnos. Una señora me miró muy contenta.

— Joven CEO, es la primera vez que trae una chica a casa, ¿ella es su novia?

— María, por favor deja de decir cosas. Ella es una amiga y les pido de favor que la hagan sentir excelente. Lleva su maleta al cuarto de huéspedes. Y que nos sirvan algo para comer.

— Está bien Joven.

— Elena vamos al comedor y luego te indico cuál será tu habitación.

— Sí.

Estaba tan asombrada. Si la familia de Luis tenía dinero y su casa era muy lujosa y hermosa, David sobrepasaba todo.

Cenamos sin decir nada. David me indicó donde estaba mi cuarto.

— Descansa. Buenas noches, Elena. Cualquier cosa, estoy en el cuarto de a lado o me pones un mensajito.

— Gracias.

Al entrar en el cuarto, puse seguro. Era una costumbre. Llamé a mi madre y quedamos en vernos al día siguiente.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***