10) Temor

(Han pasado tantas cosas después del dolor, ahora la cicatriz está curando, en esta nueva etapa llegan nuevas oportunidades y con ellas el temor. Sí temor de confiar, de no saber cómo enfrentar algo nuevo, temor de entregar todo para no recibir nada, temor de amar o tal vez de no volver a enamorarte, temor de que te amen y no corresponder y es que las pruebas de la vida te cambian a veces para bien otras para mal, te haces más fuerte pero también más duro de corazón)

Llegamos al parque donde nos conocimos, esta vez acompañados por el hermoso atardecer.

Salimos en silencio del auto. Caminamos juntos hasta llegar a unas bancas y nos sentamos juntos.

¡Que hermoso atardecer!, ¡que bello este momento!.

Hace un poco de frío, él lo notó. Suavemente me abraza el torso. Yo no me niego, se siente agradable y en paz al estar aquí.

Este momento me hace bien, me alivia, tan solo quiero permanecer aquí, que esta tarde no acabe dure eternamente.

-Sabes creo que debo irme seguro mi madre está preocupada. Dije de mala gana.

-¡Tranquila!, ella sabe que estas bien.

-Gracias por estar en este momento aquí conmigo.

-Solo quiero que estés bien, es que no me gusta verte triste, me gusta verte sonreír.

Me sonroje.

Tomó mi rostro y lo alzó.

-No mereces sufrir por un hombre que no te valora.

-Lo sé, sufro por boba porque mientras yo estoy triste él es feliz.

-¿Todavía lo amas?.

- ¡Claro que no!, lo único que siento es dolor por creer en algo falso, tristeza por haber entregado todo y odio por que por su culpa mi padre murió.

-Él te ha lastimado mucho.

-Él me ha robado mi felicidad.

Me levante, lo tome de la mano y lo lleve a caminar. Llegamos a una pequeña laguna en el parque, es un lugar hermoso alrededor hay flores hermosas, de varias clases, de varios colores y tamaños.

Alrededor hay un pequeño borde por el cual se puede caminar. Y dentro de la laguna hay millones de peces pequeños, medianos, grandes, de varias clases, de varios colores.

Es un lugar pequeño pero lleno de belleza y paz.

Nos sentamos en una orilla. Admirando, por varios minutos mirando este bello paisaje.

-Hay lugares tan hermosos que provocan no querer irte. Dijo Eduardo.

-Si, quisieras que se detenga el tiempo justo ahí.

-Sabes antes de que mis padres murieran, quería tomar un año sabático y viajar por todo el mundo, llevar lo necesario para vivir y conocer los lugares más hermosos.

-Es una buena idea, pero aún lo puedes hacer, que te lo impide digo tu hermana se va a casar tu empresa está mejor que nunca y además eres soltero, nada te lo impide.

-Pues hay días en que si lo quisiera hacer pero no es tan fácil, mi hermana ya es adulta pero sabes que siempre será mi hermanita, y si yo no estoy para dirigir el diario creo que les faltaría a mis padres. Además hay alguien que tal vez me guste y deje de ser soltero.

-¡Aaah!, ¡Así que alguien te gusta!,

-Sentí un poquito de enojo al oír eso.

-Si dijo y me regaló esa hermosa sonrisa que me encanta.

-¡Claro!, un chico tan simpático como tu debe tener muchas amiguitas dije enojada.

sonrió y dijo: -Así que te parezco simpático.

Me sonroje.

-No tengo tantas amiguitas en realidad.

-Eso dicen todos.

-Oye no todos somos iguales, además no me cambies el tema dijiste que te parezco simpático, seguro solo lo dices como todas solo por reírte de mí.

Sentí mucha rabia por lo que dijo, entonces me puse en frente de él y dije: - yo no soy como las demás ok!, no me gusta mentir y si me pareces un chico muy simpático, no soy como tus amiguitas.

No puedo creer que haya dicho eso qué vergüenza siento. Como puedo perder el control con este hombre cada rato.

-Lo sé tu eres diferente, y sabes que tu me pareces simpática también incluso puedo decir que me gustas.

Me reí, claro que de la vergüenza.

-Kiara sé que es muy prematuro, que a lo mejor te parezca un loco pero es que ya no puedo alejarme de ti, nos conocimos de manera tan extraña, te conosco hace poco pero siento como que fueran años. Creo que te va a sonar cursi pero es que me enamoré de ti esa noche. Fue amor a primera vista. Sufría cada día sin verte y cuando me resignaba a no volver a verte, apareciste gracias al destino y no quiero alejarme de ti.

Si no hubiera pasado por ese pasado tan doloroso creo que este sería un momento muy hermoso, con un chico tan guapo cualquier chica estaría muy contenta, pensé.

-Estoy loco verdad dijo con carita triste.

Tome su rostro y dije: -¡No!, claro que no, al contrario. Sabes tú me gustas también, pero.

Me tomo de la cintura y me apego a él y dijo: -pero qué?.

-Es que como puedes querer a alguien como yo, con un pasado tan horrible, yo no quisiera dañar tu vida.

-Pero qué dices, tú no podrías dañar mi vida, al contrario tu me alegras, me haces sentir vivo.

-¿seguro?

-Jamás he estado más seguro de algo en mi vida.

-¡Tengo miedo!.

-De que te amen, de que quieran hacerte feliz.

-De enamorarme y que me fallen, de enamorarte y faltarte.‎ Tu mereces, que te cuiden y que te quieran. Eres muy bueno, interesante, valiente y tienes los ojos más hermosos que he visto en mi vida, además de unos labios muy sexis.

Y tu la sonrisa más bella que he visto dijo muy cariñoso, y si hablamos de sexi... se quedó en silencio y me miró de arriba para abajo.

-Me encantan tus labios dije muy dulce, entonces él me se levanto me levanto me apretó de la cintura, yo lo abrace por el cuello y aunque estoy con tacos estoy de puntillas mi héroe es muy alto.

-Hay ocasiones en que arriesgarse por algo importante es necesario, ¿quieres arriesgarte conmigo? Preguntó con una voz muy dulce.

-Te advierto que soy un poquito enojona y a veces algo loquita dije sonriendo.

-Pues yo soy un poquito serio, estricto y algo enojón, pero también puedo hacer locuras contigo dijo con esa hermosa y pícara sonrisa que tanto me gusta.

Nos miramos fijamente a los ojos, yo acarició su cuello. Él se acercó más, mi corazón se aceleró, siento su respiración tan cerca, entonces cerramos los ojos sus labios rozan los míos tan cerca, ya no puedo más y lo beso, me aprieta fuerte contra él, siento todo su cuerpo, sus brazos, sus labios, que romántico y excitante este momento

Yo lo beso con tal pasión que su corazón late a mil por hora, creo que nunca me habían besado con tanta pasión tampoco. Otra vez la lluvia no se hizo esperar, vaya que parece una película.

-Ya no puedo estar lejos de ti dice mi héroe y me da un pequeño pero tierno beso en los labios.

suena su celular.

-Hola, contestó él, no te preocupes querida ya estamos en camino, tranquila que yo la llevo sana y salva, cuidate.

-Vaya ella te llama a ti y no a mi, se ve que le caes muy bien.

-Y como no tener una linda amistad con la mujer que le dio la vida a la chica que me roba la razón.

Sonreí. -Será mejor irnos, estamos empapados.

Corrimos a su auto, no dejaba de mirarme con dulzura, qué vergüenza siento estoy temblando no se si es por él o por el frío.

-Tranquila pronto llegaremos, y te voy a preparar un rico té.

-Gracias. Sonreí

-Te ves hermosa con el cabello así.

Me reí.

-Así despeinada y alborotada.

-Al contrario te ves sexi dijo con su sonrisa pícara que me encanta. -Creo que con sus palabras todo ese frío se fue, más bien ahora estoy toda colorada.

Por fin llegamos a mi casa y entramos en silencio.

-Creo que debo irme ya es muy tarde.

-Claro que no, estás todo mojado vamos a mi cuarto, te voy a prestar ropa.

-No creo que sea buena idea, tu madre puede molestarse.

-Claro que no, y ya no pongas excusas.

Lo tomé de la mano y subimos a mi cuarto, cerré la puerta.

-No creo que tu ropa me vaya a quedar dijo sonriendo.

-Claro que si no te preocupes respondí en un tono gracioso.

Fui a mi closet y tomé ropa para él. -Ten, vas a quedar muy guapo con esto le dije riendo.

-Muy graciosa.

-Pero si es tu ropa es la que me prestaste cuando fuimos a tu casa, la traje para lavarla y después entregártela pero lo habia pospuesto y fue lo mejor.

-Pues sí, dijo apenado.

-Anda entra al baño y cámbiate, es más deberías ducharte.Ahí hay todo lo necesario, ve tranquilo.

-Gracias dijo apenado.

Aproveche el momento y fui al cuarto de mi madre.

-¿Mamá?

-¿Qué pasa hija?, por fin llegas, ¿estás bien?.

-Si mami estoy bien, pero debo decirte que... es que llovió y nos mojamos.

-Eduardo, ¿está aquí, verdad?.

-¿Cómo lo supiste?. Si eso mismo pero no vayas a pensar mal, por favor.

-Claro que no hija tranquila, además no tiene nada de malo tu eres un chica soltera y él también tienen todo el derecho de hacer lo que crean conveniente, además el me agrada, solamente protejanse.

-¡Mamá!, ¿qué dices? me avergüenzas.

-Kiara por favor soy tu madre, se que Eduardo gusta de ti, y tu no lo disimulas.

-¡Mamá!, bueno no sé que sucedió hoy pero... nos besamos dos veces. Fueron momentos hermosos.

-Que alegría hija. ¿ya son novios?.

-¡Si y no!, en realidad no sé, es que es tan extraño esto para mi.

-¿Por qué?.

-Porque no quiero lastimarlo, él es muy lindo conmigo.

-No tiene porqué ser así, ¿no será que aún sientes algo por?.

-¡Claro que no!, dije enojada. Él no significa nada en mi vida.

-Entonces no hay motivo por el cual no puedas estar con Eduardo, hija tienes que seguir darte la oportunidad de amar y ser amada. Lo mereces, los dos lo merecen.

-Si, creo que tienes razón.

-Bueno, mejor ve con él, la cena está hecha, vayan a comer juntos.

-Gracias mami te amo mucho.

-Yo igual hija, voy dormir estoy cansada.

-Ok te amo, descansa.

Calenté la cena y la lleve al cuarto.

-Ves te dije que te quedaría muy bien la ropa. Te traje algo para comer.

-Gracias, eres muy amable.

-Pues no es nada tu lo hiciste por mi también, bueno come. Mientras yo me voy a duchar.

-Está bien.

Tome una ducha algo larga, cuando termine me di cuenta de que no traje mi pijama, o más bien un pijama decente solamente tengo uno muy corto de color negro que iba a usar en mi noche de bodas, es eso o salir en toalla a buscar algo más.

Prefiero el pijama negro. Me sequé el cabello y salí como si nada para no llamar su atención.

-Veo que terminaste de comer, te puedo traer más si quieres.

-No sabía que los ángeles vestían de negro dijo muy sorprendido de verme.

-Que gracioso, disculpa que me haya puesto esto es que olvide mi pijama y era esto o salir en toalla.

-Te queda muy bien ese pijama, aunque no me hubiera quejado si salías en toalla dijo sonriendo.

-No digas eso por favor me avergüenzas,

-¡tranquilo tranquilo! , tengo mi pijama y salgo en cinco minutos.

Me cambié muy rápido y salí.

-Bueno ya estoy más decente, disculpa.

-Que dices no debes disculparte, aunque sigues estando muy simpática.

-Pues gracias dije avergonzada.

-Bueno debes estar muy cansada será mejor que me vaya.

-Claro que no, ya es muy tarde y créeme que no voy a dejar que te vayas es peligroso.

-Tranquila no me pasara nada.

-Así que piensas salir en pijama. Tu ropa ya la lave y si antes estaba mojada ahora está más.

-Vaya creo que debo quedarme.

-Si, tranquilo no te haré daño dije sonriendo. Por suerte mi cama es grande así que tú dormirás del lado izquierdo y yo del derecho.

-No quiero incomodarte, puedo dormir en la sala.

-Mejor ya vamos a dormir si, anda acuéstate.

-Nos acostamos, apague la luz, ahora estamos a la luz de las estrellas.

-Que hermosa vista dijo él.

-Si... ,¿puedo preguntarte algo?.

-¡Dime!

-¿Cómo pudiste seguir después de lo de tus padres? Si no quieres no me respondas.

-No fue fácil, hubo veces en que simplemente quería dejar todo pero tuve a mi hermana, a Margot ellas me dieron fuerza y además siempre sentí cerca a mis padres.

-Definitivamente eres un hombre para admirar, no cualquier persona hace lo que tu haces.

-No es para tanto, soy igual a todos simplemente que tuve que madurar más rápido.

-Mi papá estaría muy contento de conocerte.

-Y yo a él.

-¿Hace frío verdad?

-Si un poco, si quieres puedo abrazarte.

Pero que acabo de decir y ahora qué le voy a contestar.

-No te preocupes estoy bien dije.

sonó su celular.

-¡Hola! Contestó Eduardo. Estoy bien tranquila mañana hablamos cuidate.

-¡Una de tus novias!. dije sarcástica.

-No te pongas así dijo sonriendo.