En un mundo de poder y corrupción, Bernardo Thompson, conocido como el Príncipe Thompson, es un hombre con un destino marcado. Criado por su padre adoptivo, Oliver Thompson, el demonio inglés, Bernardo ha aprendido a navegar en las aguas turbulentas de la mafia.
Su vida cambia drásticamente cuando conoce a María Ángel, una rubia con un pasado tormentoso y un poderoso jefe de la mafia que la persigue. Bernardo se enamora perdidamente de María Ángel, lo que desata una guerra entre mafias por el amor de la bella mujer. Además, su novia española, Ana, se siente traicionada y busca venganza.
En este triángulo amoroso, Bernardo tendrá que demostrar por qué es digno de continuar con el legado de su padre adoptivo y su madre, la princesa rusa. Con su inteligencia, astucia y coraje, Bernardo deberá enfrentar a sus enemigos y proteger a la mujer que ama.
NovelToon tiene autorización de JHOHANNA PEREZ para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Soy el príncipe de la mafia...
...
Bernardo bajó y le ordenó a uno de sus hombres que comprara los medicamentos para María Ángel y los trajera de prisa. Luego, le hizo una seria advertencia a su hermano mayor, Aiden....
...— Aiden, que sea la última vez que ofendes a mi invitada y a su pequeño hermano. Ella estaba dispuesta a marcharse en el estado tan delicado en el que está, y por si fuera poco, el pequeño cree que también somos sus enemigos — espetó Bernardo....
...— Bueno, lo de si somos o no sus enemigos aún no lo sabemos, Berni. Yo no quería ofender al pequeño. Es solo que debes ser cuidadoso. No sabemos de dónde salieron ellos ni de quién están huyendo. Has pensado en que si esa chica es la mujer de algunos de nuestros socios, debes entregarla — dijo Aiden....
...— No creo que haya huido por nada. No sé nada de ella, pero el pequeño dijo que sus padres y un tal Stuart están en el cielo, lo que indica que murieron. Intuyo que quien los tenía secuestrados mató a esas personas. Lo que sí te diré es que aunque sea la mujer de alguno de nuestros socios, si ella no quiere regresar con él, no seré yo quien la entregue — dijo Bernardo....
...— No la estoy acusando de nada. Solo te digo que tengas cuidado. Investígala. Es más, dile quién eres y observa su reacción. Así sabrás si miente — dijo Aiden....
...— Me iré a casa — dijo Aiden, y se marchó....
...Bernardo vio marcharse a su hermano mientras pensaba en sus palabras....
...— Dorothy, prepara algo nutritivo para María Ángel y llévalo a su habitación. Espera a que se alimente — ordenó Bernardo....
...Y se dirigió al despacho. Se puso a revisar algunos documentos, pero no pudo concentrarse. Decidió que le diría quién era él....
...Salió del despacho justo cuando Dorothy iba con la charola subiendo la escalera....
...— Ven, dame eso. Yo sé lo llevaré — le dijo Bernardo....
...— Hazme un favor, saca de mi closet dos de mis camisas y llévalas a la habitación donde está María Ángel — ordenó Bernardo....
...Dorothy se quedó mirando a Bernardo sin entender para qué las camisas. Pero se limitó a obedecer....
...Bernardo abrió la puerta e ingresó....
...— María Ángel, siéntate. Debes comer. Mientras llegan tus medicinas — dijo Bernardo....
...María Ángel se sentó y empezó a comer. En realidad, moría de hambre. Le pareció exquisita la comida....
...Bernardo la observó con atención mientras ella comía. La mirada penetrante e inquisitiva de Bernardo la incomodó....
...— Así que dejo la charola sobre el buró. Termina de comer. Aún te falta probar el resto — le dijo al notar su acción....
...— Señor Bernardo, ¿desea decirme algo? Si es así, solo dígame — preguntó ella de manera seria....
...— Sí, tengo muchas cosas que decirte, pero no lo haré hasta que termines de comer — dijo él en tono demandante....
...— Y yo no comeré hasta que usted me diga lo que tiene que decirme — dijo ella con determinación....
...— No cabe duda de que eres muy testaruda — dijo Bernardo, negando con la cabeza....
...— Y usted es un hombre acostumbrado a que se haga su voluntad por lo que he visto — le refutó ella....
...Bernardo suspiró resignado....
...— Está bien, te lo diré, pero es una conversación de adultos — dijo Bernardo....
...— Entiendo — dijo María Ángel....
...— Theo, mi amor, ¿crees que podrías salir un momento? El señor Bernardo y yo debemos hablar — dijo María Ángel....
...Theo miró a María Ángel y luego a Bernardo con recelo. Aún no salían de su cabeza las palabras de Aiden....
...Bernardo comprendía perfectamente esa mirada. Le recordaba al niño que fue él cuando huyó con Shofía....
...— Theo, sé que es difícil confiar en alguien desconocido, pero te prometo que no lastimaré a tu hermana y mucho menos a ti. Ella estará bien, yo no le haré daño. ¿Puedes darme una oportunidad? — preguntó Bernardo....
...Theo se bajó de la cama y se paró frente a Bernardo, quien se agachó para quedar a su altura....
...— Sí, mi hermanita te da una oportunidad, yo también lo haré. Te dejaré a solas con ella solo porque la ayudaste y trajiste a la doctora para que curara su pie. Yo sé agradecer. Pero si la lastimas, te patearé el trasero — dijo el pequeño, frunciendo el ceño....
...— ¡Theo! — lo reprendió María Ángel....
...— Tranquila, eso es lo que hace un buen hermano: cuidar del bienestar de su hermana. Si por error la llego a lastimar, tú podrás darme una paliza — respondió Bernardo en tono serio....
...— Muy bien, entonces tenemos un trato, señor Bernardo — dijo Theo, estirando su manita....
...— Tenemos un trato — dijo Bernardo, estrechando su mano....
...María Ángel miraba atentamente a Bernardo....
...— El pequeño Theo salió de la habitación y caminó admirado por los pasillos de la majestuosa mansión....
...— Y bien, lo escucho — dijo María Ángel....
...— María Ángel, quisiera preguntarte si quieres hablar de lo que pasó y puedo saber de quién huyes — dijo Bernardo, tomando asiento frente a ella....
...María Ángel tomó aire y dijo:...
...— Señor Bernardo, al igual que mi hermano, me cuesta confiar en la gente desconocida. Así que, si tengo la posibilidad de elegir, preferiría no hablar de ello, no solo porque no confío, sino porque además no quiero ponerlo en peligro — dijo María Ángel....
...Bernardo sonrió....
...— Lo imaginé. Entonces, seré yo quien te dirá quién soy y por qué no será tan fácil que tú me pongas en peligro — dijo Bernardo....
...María Ángel se tensó, imaginando que lo que él diría no le gustaría nada....
...— Ok, lo escucho — dijo María Ángel....
...— María Ángel, soy un príncipe, pero no de la realeza de Inglaterra. Soy un príncipe de la mafia — dijo Bernardo....
...María Ángel abrió sus ojos como si se fueran a salir de sus órbitas....
...— Ma... ma... mafioso — dijo ella, temblando....
...— No puedo tener tan mala suerte — dijo María Ángel....
...Bernardo oscureció su mirada y se quedó analizando las reacciones de María Ángel....
...— ¿Entonces estás huyendo de un mafioso? — preguntó Bernardo....
...— Sí, y me temo que usted no tendrá reparo en entregarnos. En sus códigos está no traicionar a un socio — dijo María Ángel....
...El miedo en la voz de María Ángel era evidente....
...— María Ángel, no te diré que soy un mafioso bueno porque te mentiría. Soy cruel, frío y despiadado cuando es necesario. No tolero la traición, pero también soy un hombre de palabra y te reitero lo que le dije a tu hermano: no les haré daño, no los entregaré a nadie y menos en contra de su voluntad — dijo Bernardo....
...María Ángel guardó silencio....
...Bernardo continuó:...
...— María Ángel, no insistiré para que me digas por qué huyes, pero necesito que me digas de quién huyes para poder protegerte, y eso no es negociable — dijo Bernardo....
...— Está bien, es Adrik Santino — dijo ella con un brillo de odio en su mirada....
...— "El torbellino" — rio Bernardo —. No te preocupes, no dejaré que les toque un solo cabello — dijo Bernardo.
...
...(Bernardo Thompson "El príncipe" 30 años) ...
...María Ángel sintió calor en su corazón y una profunda admiración por ese príncipe mafioso. ...
...— Gracias, prometo que en cuanto me recupere, nos iremos. Ya le hemos dado muchas molestias — dijo ella rompiendo el silencio....
...— No tengo prisa en que tú y tu hermano se vayan. Es más, por tu seguridad, es mejor que se queden aquí por un tiempo. Conozco muy bien al torbellino y sé que eres importante para él. Te aseguro que arrasará con todo lo que haya a su paso para encontrarte. Así que mejor no te expongas. Mientras estés bajo mi protección, él no podrá tocarte — explicó Bernardo....
...— ¿Por qué estás tan seguro de que no podrá hacernos daño? — preguntó ella, al ver la seguridad con la que él hablaba....
...— María Ángel, el torbellino tiene pocos aliados y poco territorio. Mis aliados ocupan la mitad de Londres y el mundo. Por eso, nadie se atreverá a tocar a uno de los míos, ni siquiera el "temido torbellino" — dijo Bernardo....
...— Pero yo no soy uno de los tuyos. Soy simplemente una desconocida — dijo María Ángel....
...— Desde que decidí traerte a mi casa, eres de los míos. Así que confía en mí. Termina de comer — dijo Bernardo....
...Dorothy tocó la puerta, interrumpiendo lo que ella deseaba decir....
...— Mi niño, aquí está lo que me pediste — dijo Dorothy....
...— Mira, creo que te servirá mientras te traen ropa para ti y para tu hermano — dijo Bernardo, entregándole las camisas....
...— Gracias — dijo ella, recibiendo las camisas....
...Dorothy salió de la habitación, y ellos quedaron nuevamente solos....
...Bernardo esperó pacientemente a que María Ángel terminara de comer, y en cuanto llegó la medicina, él mismo se la dio....
...— Si necesitas algo, no dudes en pedirlo. Puedes usar ese teléfono para llamar a la cocina o a mi despacho, usando la extensión 5 para la cocina y 6 para mi despacho — dijo Bernardo....
...El rubio tenía un timbre de voz tan encantador que, por momentos, María Ángel quedaba embobada escuchándolo....
...— Muchas gracias. Llamaré a Theo. Descansa, preciosa. Lo necesitas — dijo Bernardo, despidiéndose y marchándose....
...Minutos después, ingresó el pequeño Theo. Por su mirada, María Ángel comprendió que quería saber si se quedarían o se irían de la mansión Thompson....
...— Theo, nos quedaremos y le daremos una oportunidad a ese encantador príncipe — dijo sonriendo de manera involuntaria....
...— Haremos lo que tú digas, hermanita — expreso el pequeño desplegando una sonrisa....
...María Ángel mandó a bañar a Theo, y él obedeció. Debido a las circunstancias en las que Theo había vivido en la mansión de Santino, tuvo que aprender a hacer varias cosas por sí solo, así que era un niño muy independiente....
...Mientras Theo se bañaba, María Ángel se puso la camisa de Bernardo. Cuando Theo salió, ella ya estaba lista....
...— Mi amor, no tenemos ropa por el momento, así que tendrás que ponerte esta camisa — dijo María Ángel....
...El pequeño asintió y tomó la camisa, volvió al baño y se la puso....
...— Hermanita, sé que estás cansada y necesitas descansar, pero ¿podrías contarme un cuento? — pidió con ojitos suplicantes....
...María Ángel le sonrió....
...— Está bien, aunque aún no es de noche — dijo María Ángel......
