Melissa Foster es una joven dulce, tierna, sincera e independiente, pero con un pasado triste... Cuando regresa a su hogar tras terminar la universidad, vivirá grandes emociones...
Athos Miller, un empresario exitoso en el sector de la tecnología, es frío, serio y discreto, con un pasado lleno de traumas...
Dos vidas, una MIRADA... ven a descubrir lo que sucederá después de una MIRADA...
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Capítulo 10
Me despierto con el despertador sonando, me levanto, hago mi higiene, me ducho y me arreglo rápidamente, agarro mi bolso, salgo de la habitación y me encuentro con Athos y Vivian saliendo de su habitación, me sorprende porque no esperaba verlo aquí y menos saliendo de su habitación, ahí recuerdo que son novios y no sé por qué siento una tristeza al verlos juntos.
Paso junto a él y doy los buenos días, pero solo Athos me responde y tan bajo que casi no lo oigo.
Bajo las escaleras y voy a la cocina y tomo café con Bá. Mi teléfono suena, es Dylan avisando que ya está llegando para recogerme, unos minutos después oigo el timbre y voy a atender, abro la puerta y Dylan habla abrazándome.
Dylan- Buenos días princesa, ¿vamos?
Mel - vamos sí, Dy, Athos está aquí y no me ha parecido que estuviera muy bien.
Dylan- ¿en serio?, déjame ir a verlo.
Él va y poco tiempo después viene con Athos y realmente no me parece que esté bien, la noche fue muy buena o muy mala, pero por su cara, no fue muy buena.
Dy dice que va a llevar a Athos a casa, pues no se estaba sintiendo bien y me dijo que fuera en mi coche siguiéndoles. Asentí con la cabeza, Dy va en el coche de Athos y yo en el suyo, en el camino recibo una llamada de Dy avisando que va a tener que llevar a Athos al hospital pues creía que había sido drogado, Dios mío, será que fue la loca de Vivian, yo no lo dudo. Le digo que voy al edificio solo a dejar unos documentos para cerrar el alquiler del apartamento y que vuelvo para quedarme con ellos en el hospital.
Sigo en dirección al restaurante del padre de Aurora, cuando estoy cerca la llamo
llamada on
📱Mel - hola amiga, Rener está en el restaurante, no tengo su número, ya estoy aquí delante del restaurante.
📱Aurora- hola florecilla, ya está saliendo.
📱Mel- ok, besos.
llamada off
Salgo del coche para que Rener me vea, viene todo sonriente, me abraza y me besa en la cara y dice:
Rener- Buenos días princesa, guapa como siempre.
Mel- Buenos días, y tú bromista como siempre jajaja
entra, vamos.
Él entra y enseguida llegamos pues está muy cerca, bajamos del coche y Rener me conduce hasta el dueño, cerramos el pago y entrego los documentos necesarios, después de tener todo arreglado, vamos en dirección al coche y Rener me habla.
Rener - princesa, ¿qué quieres hacer ahora? estoy a tu disposición.
Mel - gracias Rener por estar siendo tan amable en acompañarme, pero voy a tener que ir a buscar a mi hermano ahora y voy a tener que resolver unas cosas con él. Vamos, te dejo en el restaurante.
Rener- ¿en serio?, pensé que íbamos a pasar el día juntos, (pone cara de tristeza) qué se le va a hacer, cuando me quieras ya sabes dónde encontrarme.
Mel- jajaja tú no cambias Rener.
Llego al restaurante, él me atrae y me abraza y me da un beso en la cara justo en la comisura de los labios y sale del coche rápido riéndose,
jajaja hijo de su madre, qué audacia, después voy a tener una conversación seria con él, que me espere.
Sigo para el hospital, llego, aparco y voy a la recepción, doy el nombre de Athos y la recepcionista me dice el número de habitación donde está, voy hasta allí, llamo a la puerta y entro, veo a Athos tumbado en la cama con un suero y a Dy sentado en una butaca al lado.
Me acerco a la cama y le pregunto cómo está y me dice que está mejor.
Dy- princesa ¿ha ido todo bien allí?
Mel- Sí Dy, todo bien.
Dy le dice a Athos que va a la cafetería a buscarle algo de comer pues aún no ha comido nada, sale y nos quedamos en silencio, me siento en la butaca y enseguida entra una enfermera y le quita el suero y dice que enseguida viene el médico para traer el resultado de los exámenes, ella sale, y veo a Athos sentándose en la cama colocando las piernas fuera de la cama, pero veo que no está bien, me levanto y le pregunto si está mareado y asiente con la cabeza, entonces hago lo primero que se me pasa por la cabeza, me encajo entre sus piernas y lo abrazo, él apoya la cabeza en mi hombro y siento su respiración en mi cuello y se me pone la piel de gallina, siento que estoy en casa, madre mía estoy perdida, hasta que oigo.
Dy- ¿pero qué está pasando aquí?
Menudo susto, ni lo oí llegar, digo que no estaba pasando nada y que Athos no se encontraba bien, seguidamente entra el médico y dice que realmente fue drogado, Dios mío, le dio el alta e hizo algunas recomendaciones.
Dylan ayudó a llevar a Athos hasta el coche y yo fui al coche de Dy, seguimos hacia casa de Athos.