Derek Maximus el hombre de apraiciencia fría y despiadada, tiene el mundo a sus pies, esta atado a una maldición qué se hereda al primogénito de la familia Maximus, debe casarse con Alexia Romanet una joven de apariencia tierna e inocente el tipo de mujer que más detesta, a pesar de estar casados por un año cada quien tenia su propia vida y solo se ven cuando es necesario, hasta que cierta noche cuando la maldición de Derek se descontrola descubre que su tierna e inocente esposa no es lo que aparenta y será ella la única que pueda controlar su maldición con un beso.
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Confianza
Derek llegaba a su oficina después de aquel fin de semana en casa de su madre, miro que Liam estaba acostado en su costoso sofá, parecía distraído.
-¿Qué te pasa? - Pregunto mientras se sentaba en su silla y encendió su computadora.
-Ah, me usaron-Soltó con un suspiro pesado, recordó la mañana después de una larga noche con Mila Solei, aquella chica lo había abandonado después de lo que paso entre ellos.-Maldita mocosa-Soltó molesto mientras se sentaba.
-Largo, molestas-Soltó Derek no estaba de humor para soportar a su amigo.
-Oye, te ves más enojado de lo normal ¿Qué paso? - Pregunto, Derek lo miro siempre confiaba sus cosas a Liam así que no dudo en decirle lo sucedido aquel fin de semana.
-¿Solo con un beso? ¿Sin sangre? - Pregunto sorprendido - Espera... ¿Cómo es que las maldiciones atacaron aquel lugar? Es decir está protegido por la barrera Zaharie... - Dijo confuso.
-Ya lo hablé con Dominic, las barreras también dejaron de funcionar por unos momentos-Dijo, Liam frunció el ceño ya no parecía una casualidad aquellos sucesos.
-¿Un traidor? - Pregunto, Derek asintió.
-Es lo mismo que piensa Dominic-Miro a su amigo analizar las cosas, tenían demasiado trabajo atendiendo los negocios, pero sabía que Liam no se negaría a su propuesta -Tenemos que involucrarnos en la organización... - Dijo y Liam lo miro.
-Pienso lo mismo, si hay un traidor debemos investigar su motivo, no solo traicionas porque si, no podemos dejar a Dominic solo en esto-Sonrió - Sobre el asunto del beso... debes intentarlo nuevamente, sin sangre...-Dijo, Derek lo miro de mala gana.-¿Hay algo más? - Pregunto conocía muy bien a Derek sabía que algo le ocultaba.
-¿Tienes la información que te pedí? - Pregunto cambiando el tema.
-No hay nada en lo que encontré de los Romanet, eran normales... Pero iré a la organización a investigar en los archivos secretos puede que encuentre algo, ahora dime ¿Qué me ocultas? - Regreso al tema principal.
-Le dije que guardaría el secreto-Dijo mirando su computadora.
-Wow, un fin de semana juntos y ya se guardan secretos - Río divertido mientras tomaba su mochila y salía rápidamente de la oficina.
Derek solo suspiro recordó aquella herida de Alexia era muy profunda, pero desaprecio de la nada dejando solo rastros de sangre, también recordó el beso, era la misma sensación cuando ella le daba sangre solo que estaba vez no lo hubo, soltó un pesado suspiro las cosas comenzaban a complicarse.
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Alexia trataba de estudiar en la biblioteca, pero no podía concentrarse por lo sucedido el fin de semana, miro a Mila ella parecía estar peor que ella.
-¿Qué tienes? - La miro, Mila tenía el cabello desordenado y vestía similar a ella algo raro pues Mila siempre vestía a la moda.
-Ay maldita sea, es tu culpa por dejarme el fin de semana sola-Soltó molesto mientras revolvía su melena pelirroja, no recordaba nada de aquella noche, solo que empezó a tomar con Liam Demian y después despertó a lado de él, se odiaba así misma por lo sucedido.-Alexia... - La miro con los ojos llorosos, Mila comenzó a contarle lo poco que recordaba, la chica únicamente abrió sus ojos con sorpresa, cubriendo su boca con sus manos para no gritar.
-¿Te acostaste con Liam Demian? - Dijo en susurro sin creerlo
-No lo sé... Digo desperté en su cama desnuda... tenía el cuerpo lleno de marcas y me dolía todo... ay mierda, quiero morir-Se golpeó la cabeza contra la mesa.
-Ay mi amiga... ¿Qué dijo él? - Pregunto con una sonrisa.
-Nada, me fui de ese lugar antes de que despertara-Dijo mientras seguía ocultando su rostro sobre la mesa.
-¿Huiste? Por qué? Mila eso no se hace.. - Soltó Alexia tratando de no reír.
-Solo hice lo mismo que tu tiempo atrás - Soltó molesta, levanto su mirada y noto que su amiga bajó la mirada desanimada-Lo siento, no lo quise decir... Alexia-Susurró tomando de las manos a su amiga.
-Descuida, tienes razón con lo que dices-Trato de sonreír.
-Olvidemos eso, mejor cuéntame ¿Cómo te fue? - Pregunto con una sonrisa. Alexia le contó lo sucedió aquel fin de semana.
-¿Descubrió tu secreto? ¿Les dirá a los de la organización? ¿Te usarán como sujeto de prueba? - Dijo nerviosa.
-No... Prometió guardar el secreto, así que estaré bien-Dijo confiada de sus palabras.
-¿Alexia te gusta tu esposo?-Alexia la miro confundida-Es decir, parece que confías en él - Dijo, Alexia solo bajo la mirada- ¿Confías en él? - Pregunto al notar que su amiga no lo negaba.
-No parece un mal tipo, además es mi esposo ¿No? - Dijo con una sonrisa.
-Esas extrañas transfusiones de sangre sí que te han afectado, solo ten cuidado, no quiero que te hagan daño otra vez - Le tomo de las manos con ternura, Mila apreciaba mucho a Alexia era su mejor amiga.
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-¿Señor? - Pregunto confusa Dalia al recibir las nuevas órdenes de su jefe.
-Solo pueden ser reuniones de suma importancia, pero deberás consultarme antes, ¿Quedo claro? Después de las siete mi agenda debe estar libre-Ordenó, la mujer asintió ante sus palabras y después se dirigió a la puerta al abrirla ahí estaba aquella chica de ojos azules.
-Hola-Sonrió amablemente Alexia, Dalia solo asintió-Me citó - Agrego al notar que aquella mujer no le daba paso, suspiro Dalia e hizo a un lado para que pasara.
Dalia observó de pies a cabeza a aquella mujer vestía jeans y enormes sudaderas no era nada refinada, pero aun así era la señora Maximus, miro a su jefe estaba en una llamada, pero no perdía de vista a Alexia quien exploraba la oficina, sin más cerró la puerta y se sentó en su escritorio, tomo un lápiz y lo apretó con fuerza hasta partirlo a la mitad.
-Te veré esta noche-Dijo Derek y terminó la llamada.
-Hola - saludo la chica con una sonrisa. - Recibí tu mensaje ¿Qué necesitas? - Pregunto mientras se sentaba en el cómodo sofá.
Derek se acercó y se sentó en el otro sofá que estaba frente a ella la observó como siempre vestía aquellas ropas inusuales para una señora.
-Sobre lo que paso el fin de semana, ¿Desde cuándo tus heridas? - Preguntó, Alexia analizó aquella pregunta.
-No lo sé exactamente, creo que desde que era una niña-Respondió con una nerviosa sonrisa.
-Edad, es decir aún eres una niña-Soltó Derek, Alexia le lanzó una mirada asesina.
-Ya tengo 24 años, soy una mujer adulta - Soltó molesta.
-No lo aparentas-Le dijo, Alexia soltó un pesado suspiro y dijo una maldición qué Derek no logró escuchar.
-¿Me llamo para eso? - Pregunto mientras se ponía de pie molesta, Derek negó y le mostró un pequeño frasco ya familiar para Alexia - Ah, ¿Dici tiene hambre? - Pregunto mientras se acercó y tomo el frasco.
-¿Dici? - Pregunto confuso.
-Si, Dici, solo quite mal y ón quedando solo Dici, es un buen nombre-Río mientras destapaba el frasco.
-Le pusiste nombre a mi maldición... - Soltó con pesadez Derek miro que la chica estaba por tomar la sangre - Espera, quiero intentar algo-Dijo, Alexia tapó el frasco y espero.
Derek suspiro y puso de pie la chica estaba cerca de él era pequeña parecía una niña, pero no lo era, coloco sus manos en su rostro y beso sus labios sin pensarlo, aquel sabor recorrió su boca y paso por su garganta, igual que siempre aunque no había sangre el sabor era igual.
-¿Eso qué? - Pregunto Alexia cuando Derek termino el beso.
-Funciona igual sin sangre - Dijo, se alejó de ella quien lo miro confundido, Derek le explico la teoría de Liam.
-Ah, ya... Entonces ¿No necesita ya sangre? - Pregunto con una sonrisa.
-No lo sé, usaremos ambos métodos, ¿Te parece? - Pregunto, Alexia asintió.
-Derek es hora de irnos - Entro Liam, sonrió al ver a Alexia la chica aún tenía el frasco en sus manos, pero noto que no estaba vacío - ¿Funcionó? - Sonrió de oreja a oreja.
-Iremos a la organización ¿Vas? - Pregunto Derek ignorando aquella sonrisa de Liam.
-Claro, quede de verme con Mila-Sonrió con malicia Alexia sin dejar de mirar a Liam quien desapareció su sonrisa.
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Dominic trabajaba en su oficina trataba de descifrar como es que los portales y las barrera habían dejado de funcionar, tocaron la puerta y entró un guardia.
-Ha llegado nuestro señor-Dijo el hombre haciendo una reverencia.
Dominic salió a recibir a Derek y Liam, noto que no estaban solos también estaba Alexia con ellos.
-Señor Zaharie - Saludo con respeto Alexia.
-A mí no trates de engañarme mocosa - Dijo Dominic al saber que aquella apariencia de Alexia era solo eso, apariencia.
-¿Mocosa? - Pregunto Derek con cierta molestia por la forma en que Dominic se expresó con su esposa.
-Ah lo siento, bienvenida señora Maximus - Hizo una reverencia hacia la chica
-Ay mierda, eso asusta-Dijo Alexia abrazándose así misma por aquel saludo de Dominic.
-Cuida esa boca mocosa - La regaño, luego dirigió su mirada a Derek - Vamos es difícil tratarla de otra forma después de años de conocerla - Suspiro molesto.
-¡Alexia! - Grito Mila abrazando a su amiga - Hey, Dominic hoy te ves muy guapo-Le coqueteo al chico quien solo sonrió.
-Par de mocosas, no son mi tipo ninguna de las dos - Contesto Dominic.
-Con unas copas encimas dices todo lo contrario, cierto Alexia - Río Mila sin percatarse de la presencia de aquellos hombres, Liam soltó una maldición al ver que Mila ser muy directa con Dominic, Derek lo notó y se lo quedo mirando.
-Mila... Cierra la boca - Soltó Alexia dándole un codazo, Mila dirigió la mirada a Derek Maximus quien la miraba con aquella fría mirada.
-Ah, Señor Maximus - Dijo en forma de saludo, su mirada se desvió a Liam quien la miraba con cierta molestia - Ay carajo, vámonos Alexia... - La jalo, Alexia rio al notar que su amiga estaba temblando.
Mila se llevó casi a arrastras a Alexia, Derek solo las observó y dirigio su mirada a Liam.
-¿De que me perdí? - Pregunto al notar que su amigo le ocultaba algo.
-Es tu culpa por dejarme solo el fin de semana - Soltó molesto. - Luego te cuento, ahora Dominic-Miro al chico quien únicamente los observaba.
- Ah sí, vamos-Los llevo hasta la oficina de control de barreras, había un grupo de personas manteniendo monitoreada cada barrera y sus alrededores. - Fue momentáneo cuando la barrera dejó de funcionar, nos dimos cuenta de inmediato, pero no pudimos evitar los hechos-Dijo Dominic mostrando el ataque de las maldiciones.
-¿Los portales? - Pregunto pero Dominic negó.
Liam observó al equipo trabajar no parecían prestar atención a la conversación de aquellos tres, estaban enfocados en su trabajo monitorear las barreras.
Dominic los llevo a la oficina para platicar más en confianza.
-A partir de ahora recibirás nuestra ayuda... Debemos-Antes de terminar las alarmas comenzaron a sonar, estaban atacando.
-¿Dónde es?-Pregunto Dominic mientras agradaba las pantallas del ataque.
-El aeropuerto principal, Señor - Respondió una voz.-
-Envíen un dúo-Ordenó Dominic, la imagen del aeropuerto se mostraba estaba oscuro y cubierto con una espesa neblina-¿Por que enviaron a esas mocosas? - Pregunto dirigiendo su mirada a Derek quien mantenía su mirada fija en la imagen.
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Alexia y Mila aparecían en el aeropuerto, vestían ropas negras, ambas portaban sus espadas, notaron una maldición formarse por aquella neblina pero era enorme diferente a las demás.
-No te confíes-Susurraron las dos al mismo tiempo.
La maldición atacó ambas esquivaron dando un salto, sin perder oportunidad atacaron a la maldición, pero está con sus enormes garras las detuvo y las lanzó contra un avión atravesaron las ventanas y cayeron sobre los asientos vacíos.
-¡Eso dolió! - Grito Mila sentada en el suelo, miro a Alexia la chica había recibido más daño.-¿Estás bien? - Pregunto acercándose a ella.
-Si-Alexia se sacó unos cristales de su estómago hizo un gesto de dolor, pero sabía que pronto se curaría.
-Par de mocosas, escuchen mis órdenes deben salir de ahí ahora-Escucharon la voz de Dominic.
-¿Por qué? -Pregunto Mila, pero antes de que Dominic respondiera escucharon el rugido de la maldición después escucharon más.
Alexia se asomó por las ventanas miro que ahora no era una sola modificación había más de una decena, era la primera vez que veía tal cantidad de maldiciones reunidas.
-Dominic, jefecito, necesitamos refuerzos-Dijo Mila observando las maldiciones.
-Lo sé, pero... Mocosas, los portales dejaron de funcionar-Dijo Dominic.
Alexia y Mila se miraron a los ojos y tragaron en seco, en esos momentos estaban solas.
-Huyan, es una Orden-Dijo Dominic, pero conocía a ese par las había visto crecer en la organización y no obedecerían aquella orden.
Mila y Alexia se quitaron el transmisor de sus oídos y los tiraron.
-No mueras-Dijeron con una sonrisa, mientras saltaban fuera del avión.
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Derek observó la imagen Alexia empezaba a pelear contra las maldiciones las purificaba una tras otras, pero estas no parecían tener fin.
-¡Dense prisa, restauren los portales! - Grito Dominic furioso miraba preocupado a ese par de mujeres eran fuertes, pero incluso para ellas tantas maldiciones eran demasiado.
-Hey-Liam sostuvo del brazo a Derek noto que el hombre estaba tenso y sus ojos se tornaban rojos.
-Estoy bien-Dijo Derek sin dejar de mirar como Alexia peleaba.
-Dominic, de prisa, la señora Maximus está en peligro - Soltó Liam, Dominic dirigió su mirada a Liam, pero se desvió a Derek noto aquel hombre tenso con aquellos ojos rojos, soltó una maldición, empezó a hacer una llamada.
-¿Dime que sigues cerca del aeropuerto? - Fue lo primero que dijo cuando contestaron su llamada
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Un hombre pelirrojo miraba desde la Sala vip del aeropuerto a través de la ventana, caía una fuerte tormenta por lo que su chófer se había retrasado.
-Su bebida, Señor-Dijo una empleada dejando una taza de café en una pequeña mesa de centro.
El hombre no dijo nada, mantenía su mirada fija en aquella tormenta, pero no era solo lo que veía, lograba ver aquellas maldiciones era la primera vez que atacaban en tal número, noto a aquellas dos figuras femeninas peleando podía reconocerlas fácilmente, se quitó su saco y soltó una sonrisa.
Su teléfono sonó y contestó escucho a aquella voz preguntar algo.
-Si-Contesto a la pregunta con aquella sonrisa, abrió la ventana y salió de aquella acogedora habitación, sintió como la lluvia caía sobre él y comenzaba a mojarlo.
auuuuu