Flor Rojas y Eriks Ivanova
NovelToon tiene autorización de Ron Novel para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capítulo 7
Eriks Ivanova
Salgo del despacho, dejando a la Diosa de cabellos rojos, la quiero en mi cama deseo tener esos pechos en mi boca, siempre he tenido todo lo que quiero y ese maldito estimulante sexual no será la excepción.
Salgo del club David me esta esperando en el auto, subo a la parte trasera estoy como alma que se la lleva el diablo tengo que calmar estas ganas o no me quedare tranquilo, nunca nadie me había puesto de esta manera, solo bastó verla unos minutos para ya tener una maldita erección que quiere acabar conmigo.
Que te pasa — pregunta David — estás sudando.
Nada — respondo molesto — y ya deja de molestar.
No me digas — dice mirándome por el retrovisor — es por la pelirroja.
De que hablas — digo pasando mi atención al celular.
Sería un idiota — dice — si no me hubiese dado cuenta de como la estabas mirando, se que fuiste detrás de ella, dime que paso.
Deja de meterte en mis cosas — digo sin prestarle atención.
No, me digas que la pelirroja te mando por un tubo —dice en tono burlón
No le respondo no estoy de humor para sus estupideces.
Tomare ese silencio como un si — dice, y me provoca meterle un tiro
Llegamos a unos de los bares que tengo en esta ciudad, aún no entiendo por que entre dos mafias que se necesitan unas a otras sigue en pie una enemistad que surgió hace años y la protagonista de esa enemistad, es la Reina de la mafia Inglesa y dicha mujer reencarnó en la pelirroja que me tiene con dolor de cabeza.
Entro al bar y lo primero que hago es buscar una mujer para matar estas ganas, me encuentro con una rubia muy linda, no tiene ningún parecido con aquella mujer, pero no me queda de otra, la tomo llevándola a mi despacho, estoy al borde del colapso tengo mas de media hora en lo mismo y no logro derramar mi eyaculación, la embisto como me gusta y nada, me gusta que no ponga peros para nada, pero eso no alivia mi ereción me estoy desesperado, piensa en la pelirroja que me tiene mal como quisiera que fuese ella la que esté encima de mi escritorio gimiendo como lo está haciendo la rubia que está aquí, pienso en ella y en las miles de poses en que la quiero tener y es hay cuando por fin llega mi eyaculación
Creo que, nos tendremos que quedar en Inglaterra por unos días más — dice David entrando en mi despacho — Fabián Rojas quiere reunirse contigo.
Y para qué quiere ese tipo reunirse conmigo — digo
Mm, aún no lo sé pero dijo que te vería dentro de dos días en el mismo club — dice — espero y no sea para matarte por besar a su hermana
¿Ira la pelirroja también? — preguntó
Tal vez si — dice — no me digas que te enamoraste d la pelirroja.
Suelto una carcajada con lo que acaba de decir mi amigo.
Enamorado, acaso soy hombre de enamorarse — digo con sarcasmo — el hecho que la quiera tener en mi cama no quiere decir que me he enamorado.
Si tú lo dices — dice rodando los ojos.
Se va y yo me quedo en el despacho, atendiendo varias llamadas y salgo del club me dirijo a mi departamento estoy cansado y tengo que pensar en cómo conseguir a la pelirroja.