Carla

7:00 am. Ruido de viento en la ventana, despierto sobresaltada, que me paso?. Estoy sudada, siento que entre mis piernas hay una humedad terrible, no entiendo nada y empiezo a recordar algunas cosas de mi

sueño, hay una cara que no puedo ver. Estoy muy aturdida, necesito una ducha urgente.

Mientras me baño recuerdo algunos fragmentos más, pero no logro ver su cara y siento que conozco a esa persona. La ducha hace que me relaje y cuando termino de secarme me dispongo a desayunar tranquila. Observo por la ventana el día es gris y aunque no llueve más, hay mucho viento, así que reviso el clima desde la app, mmm.. Parece que en la tarde sale el sol y la temperatura sube un poco, eso me da una idea de que ponerme hoy. Me dispongo a ver en mi placar y encontré una camisa sin mangas ajustada al cuerpo, acuadrille pequeños en blanco y negro, eso quería bien con mis pantalones chupín negros de bengalina, me pongo unas sandalias negras de dos tiras y un pañuelo negro fino en el cuello haciendo un moño, me seco bien el pelo y me lo recojo en una cola alta. Uff estas para matar Carla, hoy es de esos días que la autoestima sube como por arte de magia y tengo esa actitud de ganadora, esto pasa una vez cada varios meses y recordemos que hoy es viernes.

Llego muy tranquila a la oficina, esta vez entro más temprano de lo normal, pero algo peculiar pasa por delante de mis ojos, un hermoso Aston Martin DB11 color bordo oscuro medio tornasolado con vidrios

polarizados, entra en la cochera de nuestra empresa. Quien será el dueño de esa nave?, seguro que son parte de los inversionistas.

Llego a mi piso y me hago un rico capuchino y luego veo como mis compañeros empiezan a llegar, no saludamos y hablamos un poco, veo que Ana no llega así que decido mandarle un mensaje.

Texto carla:

Anita, querida que te pasó, que aún no llegas, tenía ganas de

hablar con vos

Texto Ana:

Amiga ya avisé a Recursos Humanos que no voy a asistir, la

lluvia me sentó mal y estoy volando de fiebre, fui al médico en la madrugada y

me dijo que haga reposo, mi hermana cuida de mí.

Texto Carla:

Ani espero que te mejores, en la tarde te llamo para saber

cómo sigues. Te mando besos

Pobre amiga, va a pasar todo el fin de semana en la cama.

Antes de comenzar con mis cosas mi compañera me encarga que baje al área de legales para llevar unas carpetas, solo espero que Iván esté ocupado y que no me vea.

Al llegar Iván no estaba por suerte, así que dejo mis carpetas y espero que me entreguen otras cosas, cuando estoy esperando el ascensor siento una respiración en mi espalda y eso me trae a la mente lo que

soñé en la noche, pero esta vez puedo moverme. Doy vueltas y detrás está Iván, con un traje gris, corbata del mismo color, pero con algunos detalles en azul oscuro, estaba perfectamente sexy y yo muero por dentro.

-Iván me asustaste

-tan feo estoy? (mientras hacia una media sonrisa)

Yo no digo ninguna cosa al respecto y él se acerca más a mí

y su mirada pasa desde arriba abajo.

-hoy viniste a matarme del todo?

-basta, Iván. Vine a entregar unas carpetas

-y cuando será la próxima salida que me prometiste?

Su forma de mirar me hacía poner incómoda y cada vez se acercaba más a mí y la respiración se me cortaba, no hacía mucho que estuve con un hombre, se supone que podía aguantar un par de meses, no sé qué me pasa, pero Iván me está encendiendo y necesito salir de ahí ya!!!.

Me alejo y justo en ese momento pasa una compañera y antes de seguir su recorrido lo mira a nuestro adonis y le pregunta

-y lo viste al Jefe?

-sí, obvio

-entonces contame como es

-no, se debe pagar por ese dato

-ahhh Iván, nunca te sale nada de corazón. Después paso con

un gran café

Nuestra compañera se reía y siguió con su rumbo y yo me vi tentada a preguntar también.

-tuviste reunión con el Sr. Alexander?

-sí, no es muy simpático

-y….., que más?

- Carla\, como dije para ese dato hay un precio

- y cuál sería ese precio?

Iván se acerca nuevamente dejándome sin respiración y acorralada con la pared, me dice en el oído en un tono suave

-si fueses otra mujer pediría que aplaquen mis deseos oscuros que tengo en este momento, pero sos vos Carla y tu reputación gana mis respetos, aunque por esa información te pediría un beso en tu boca.

Una vez dicho esto se aleja de mi oreja y pone su cara a centímetros de la mía y solo me mira a los ojos esperando mi respuesta. Por favor esto es una tortura, me hice a un lado y me alejé

-gracias Iván, espero que puedas satisfacer tu deseo momentario con la palma de tu mano, ya sabes movimiento de arriba abajo. (Me sonrío victoriosa y lo saludo desde lejos).

Iván queda atónito y no me dice más nada. Yo quedo echa agua, uff que día por favor.

Así que nuestro gran Jefe está aquí, entonces esa terrible nave será de él?

Cuando llego a mi área les comento a las chicas que por cierto se vuelven locas, me preguntan si lo vi, pero lo cierto es que nadie lo vio excepto nuestro adonis. Nuestro departamento es una revolución, pero Juan al ver tanto alboroto hace acto de presencia y las fieras se calman y siguen con su trabajo. La hora del almuerzo llega y mi estómago me lo hace saber, así que bajo para ir a comer unas fabulosas pastas en lo de Pierino que está a un par de cuadras de acá, muero por comer unos malfatti de espinaca con salsa rosa. Mi teléfono empieza a sonar y sonrío al ver mi pantalla. Era Mauro, mi mejor amigo y lo mejor es Gay, es decir, no hay nada que él no sepa y yo no dude en contarle, sabe todo de mi vida y es mi gran confidente, su opinión vale oro y más en temas de relaciones amorosas.

-Hola amor de mi vida, cómo estás?

-Hola nena, te haces rogar querida, veo que por tu actitud de

gatita contenta podríamos salir hoy por unos tragos y ver hombres sexys por

todos lados.

-uuff Mau tengo tanto que contar y obvio que si me prendo.

- entonces no hablemos más y esperemos en la noche\, te paso a buscar tipo 22. Besitos en cada teta amiga (soltaba una carcajada mientras lo

decía)

Contenta regreso a mi trabajo, y cuento los minutos para que cenicienta al fin pueda ser libre….