CATRIEL.

Luego de recuperar el aliento y que Kay pagara sus compras vamos por un helado.

_ Oye y por qué tanta dedicación a encontrar el vestido perfecto.

_ Ah cierto no te lo he contado todavía. El sábado tengo una cita.

_ Disculpa una qué ..

_ Cita una cita. Estoy nerviosa, pero quiero intentarlo. Se ve buen chico, su nombre es Saúl.

La observo con desconfianza. ¿Cuándo ocurrió esto?

¿Por qué me lo cuenta hasta ahora?

¿Quién es ese sujeto Y dónde lo conoció?

Tengo muchas preguntas, pero se le ve tan feliz que no quiero arruinar el ánimo siendo demasiado desconfiado.

_ Mira qué bien. Te felicito Kay.

Finjo que estoy alegre por ella.

_ Lo sé. Estoy que me muero de los nervios.

_ Bueno querida espero que todo salga bien.

Ya no puedo seguir en ese lugar. Así que volvemos a nuestra casa sin decir una sola palabra más.

Los días siguientes estoy que me lleva el diablo.

No me lo puedo creer. Mi Kayra en una cita.

Que está sucediendo conmigo.

No entiendo por qué estoy tan enojado, acaso será porque pasamos demasiado tiempo juntos o es porque temo que le ocurra otra vez lo mismo que con maurilio.

Definitivamente estoy enloqueciendo.

Ella es libre de salir y conocer a quien quiera. Yo sólo tengo que apoyarla y estar para ella como el mejor amigo que soy.

Esa noche la veo tan radiante, tan hermosa que quiero encerrarla para que nadie la vea.

Ella me regala esa encantadora sonrisa que últimamente me ha quitado el sueño.

_ Tranquilo estaré bien. Cualquier cosa llamo a mi héroe de capa azul.

_ No juegues conmigo. Pero sí, cualquier cosa llámame de inmediato.

_ Es por esto que las personas a nuestro alrededor creen que somos pareja.

_ ¿Como dices?

_ Luego te lo explico bobo.

Se marcha solo dejándome un dulce beso en la mejilla.

No puedo dormir. En mi cabeza aparecen varios escenarios de kayra con ese sujeto misterioso.

Hasta que por fin la escucho llegar, salgo apresurado sin darme cuenta de que no llevo la playera puesta.

Nuestros ojos se encuentran y noto que los de ella están tristes.

Corre a mis brazos y comienza a llorar yo le devuelvo el abrazo con más fuerza mientras intento consolarla.

¿Acaso ese imbécil trató de propasarse?

Después de un buen rato Kayra por fin se tranquiliza.

La invito a pasar a mi casa, ella se queda mirándome fijo asombrada.

_ ¿Sucede algo?

_ Nada en particular solo no me imaginaba que estuvieras en tan buena forma.

Kayra sonríe al ver que me pongo rojo al darme cuenta de que estoy casi desnudo.

Corro por una playera. Que vergüenza más grande pase.

_ Ahora me contarás que sucedió. ¿Acaso quiso pasarse de listo ese mal nacido?

_ No. Tenía novia Y esa mujer armó un escándalo en el lugar.

No me bajó de zorra roba maridos. Catriel yo no lo sabía.

_ Tranquila a mí no me debes explicaciones, yo sé qué clase de mujer eres.

_ Soy tan desdichada en el amor. Ni siquiera sé porque lo sigo intentando.

_ Basta de eso. Mirame Kayra eres una buena mujer y te mereces ser feliz.

_ ¿Pero de verdad vale la pena el esfuerzo?

_ Mira no fuiste tú quién me dijo que no cerrara mi corazón y todas esas bonitas palabras.

_ Tienes razón.

Dice entre risas mi querida amiga. Esa noche la sentí más cercana que nunca.

Su calor en mi cuerpo era una sensación indescriptible.

Antes de marcharse me invita a disfrutar del domingo y ahogar nuestras penas amorosas.

Acepto de inmediato aunque ya dejé la bebida quiero estar presente para Kayra y cuidarla.