Nueve Lazos De Magia

Hola a tod@s 👋👋👋.

De antemano, una disculpa por no haber actualizado el día de ayer 🙇‍♀️🙇‍♀️, aquí les dejo otro capítulo a modo de compensación.

Gracias a por leer mis historias, son los mejores 😽😽.

🍎🍏🍎

La operación comenzó desde muy temprano el día anterior, en donde, poco a poco, las personas involucradas fueron abandonando la sede de los Defensores, para dirigirse hacia Moru, el lugar estaba a tres días en auto de Mesto, por lo que para no llamar la atención, se formaron grupos pequeños y cada grupo tomaría un camino distinto hacia Moru, y aquellos que tomarían el mismo camino, lo hacían con horas de diferencia, de esa manera no llamarían la atención del enemigo ni de nadie más, era por eso que un viaje de tres días se convertiría en uno de cuatro, ya que se calculaba que para ese tiempo, ya todos los involucrados estarían en su posición.

- ¿Nerviosa? – le pregunto Adrián a Tana, ambos jóvenes, por sus características tan llamativas, tenían prohibido bajar del auto, y si bien ambos usaban un disfraz, por seguridad, aun así, solo podían dejar el vehículo si era muy necesario, por lo que en la mayoría de las paradas se la pasaban dentro del vehículo.

Adrián también pertenecía al grupo de Alejandro, e iba con este, Tana y otro hombre más en el auto, Donovan por pertenecer a otro escuadrón, viajaba en otro vehículo, el cual había salido mucho antes que el de Tana.

- Un poco, sabes, nunca creí que algo así podría pasarme, pero bueno, ya sabes lo que dicen, nunca digas nunca – dice Tana, quien se sentía ansiosa, ansiosa por salvar a su familia.

- Hay cosas que nunca creemos que puedan pasarnos hasta que pasan, está en nosotros cómo reaccionar ante estas, y déjame decirte que, en mi opinión, lo estás haciendo muy bien – le dice Adrián a Tana.

- Gracias – le dice Tana, ya que sus palabras la hicieron sentir un poco mejor – y ¿cómo se tomó tu prometido el hecho de que vas a una misión peligrosa? – le preguntó Tana, al peliblanco después de un rato.

- Lo mejor que puede, sé que Charles hubiera deseado estar aquí conmigo, pero sus deberes se lo impidieron, por lo que me pidió que me cuidara, Charles sabe de lo que soy capaz, pero aun así prefiere estar cerca de mí en situaciones como esta – le dice André a Tana.

Y es que Adrián y Charles comúnmente hacían equipo en las misiones y se cuidaban la espalda mutuamente, por lo que cuando eso no sucedía, ambos no podían respirar tranquilos hasta veían a su pareja regresar sana y salva, y aunque Charles había intentado adelantar trabajo para volver antes, no lo había logrado.

- ¿Es difícil? – le preguntó Tana a André.

- ¿Qué? – le preguntó el peliblanco, al no entender a qué se refería la chica.

- Mantener una relación dentro de los Defensores, ya sabes, con todos los riesgos que hay.

- Sí, es difícil, pero no creo que sea más difícil que tener una relación en cualquier otro ámbito, al fin y al cabo la base de cualquier relación es la confianza y el compromiso, y sin eso, aún tengas una vida tranquila, una relación no es posible, si bien lo que hacemos como Defensores nos pone a prueba de muchas maneras, también nos fortalece, y de alguna manera eso fortalece las relaciones que tenemos, por ejemplo, la mayoría de los Defensores, estén o ya no activos, han tenido relaciones duraderas, de esas que son para siempre, no digo que sea igual con todos, pero muchas veces, lo que parece ser un inconveniente, se convierte en una gran oportunidad – le responde André a Tana.

Ambos jóvenes ya no pudieron hablar más, puesto que Alejandro y su acompañante, regresaron al auto y el viaje continuo, en el cual, Tana no dejo de pensar en las palabras de André, y en su corazón nació la esperanza y el deseo de lograr entablar una relación duradera con Donovan, algo que con cada día veía más viable, puesto que, a pesar de los entrenamientos, y de la presión que había sobre ellos, su relación había mejorado bastante.

Tal y como se había previsto, les tomó tres días llegar al punto acordado, y allí ya los esperaban la mayoría de los involucrados.

- Solo falta un par de grupos más, por lo que podremos atacar mañana por la noche – le dijo Beth a su padre.

El grupo de la joven fue de los primeros en llegar, por lo que Beth se encargó de llevar el registro de quienes iban llegando.

El grupo de Alejandro había llegado alrededor de la media noche, por lo que los últimos grupos llegarían ya muy entrada la madrugada, o incluso hasta el amanecer, por lo que lo más sensato era espera hasta la noche para entrar al complejo de Dief, ya que el manto de la noche les daría una pequeña ventaja, y en misiones como esta, cualquier ventaja, por mínima que sea, era mejor aprovecharla.

- En ese caso, a partir de este momento estaremos divididos en los equipos asignados, familiarícense con sus compañeros y repasen el plan, pero más que nada, descansen, mañana nos espera una noche muy larga.

Fortalecer lazos antes de una misión, era algo que Alejandro promovía y alentaba, al fin y al cabo, la confianza era lo que los llevaría a lograr su objetivo y esta solo se ganaba a través de la convivencia.

Debido a las palabras de Alejandro, Donovan no pudo ver a Tana, algo que lo molesto un poco, pero, a pesar de eso, siguió al pie de la letra las órdenes de Alejandro, ya que concordaba con el mayor, la confianza era fundamental y él al ser nuevo, debía demostrarle a su equipo que podían confiar en él, o eso sería un problema en el momento más crucial.

Otra que no estaba muy contenta con las indicaciones de Alejandro, era Tana, quien deseaba ver a Donovan, pero comprendiendo las razones del hombre, decidió integrarse con sus compañeros.

Tal y como se habían previsto, el último grupo llegó al amanecer, por lo que la mayor parte de ese día, los cuatro equipos lo dedicaron a descansar, cuando llego la tarde y el sol estaba a punto de ocultarse, los líderes de los equipos se reunieron con su gente, en donde repasaron una vez más los detalles del plan, una vez terminaron, las estrellas ya iluminaban en cielo, lo que significaba que el momento había llegado.