Anyel y Elisa, Dos jóvenes con una amistad de muchos años. Con sueños muy diferentes, metas que anhelan cumplir, promesas que no cumplieron y que pondrían a prueba su amistad y también el amor que recién empiezan a tener entre si.
Ambos estarán en un dilema por conservar su bonita amistad, batallando en contra de un inevitable Amor.
NovelToon tiene autorización de Celina González ♥️ para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo 23
Cinco días después, el día más esperado para Elisa, quien no sabía si sus nervios eran por el concierto o porque se encontraría con su familia después de dos años. Con sus amigos y su amor. Lo de Corina quedo atrás, Eve le hizo ver que eso no era tan importante, como escuchar la verdad claramente. Lo que decidiera Anyel, ella lo aceptaba, así le doliera.
El avión aterrizaba en el aeropuerto, Thiago y Elisa se cubrían para no ser vistos y que se conociera los dos acompañantes de la pianista. Mientras Eve era recibida con tanta emoción y llanto, su visita al país era la más esperada por esa cantidad de jóvenes y personas que amaban como los transportaba a otro mundo a través del piano. Faltaban cinco horas para que el concierto empezara, pero ya todos estaban de nervios, los tres amigos solo querían grabar un vídeo y así poder lograr que Elisa lea respondiera, sin imaginar la gran sorpresa que les esperaba.
—¡Eres el mejor, en la mejor zona VIP!— exclamó Noelia, haciendo que Anyel volteara los ojos, era lo menos que podía hacer por su abuela, quien era la más feliz en estar en ese concierto.
—Antes de morir, veré un concierto de mi niña— Habló Roberta, tocando nostálgica su piano.
—Extraño mucho sus melodías— continuo, haciendo casi llorar a todos.
—Tranquila abuela, serás la primera en verla tocar, ya lo verás— la consoló Anyel.
—Bueno, yo me voy, hay que estar listos muy temprano— anunció Paola.
Haciendo lo mismo todos, querían estar mucho antes, sus corazones estaban ya preparados para recibir tremenda noticia, sin saberlo aún.
Horas después
—Esto es más emocionante que antes, en todas las veces que acompañamos a Elisa, esta es la más emocionante y no entiendo por qué— declaró Noelia estando ya en su asiento.
—Sin duda, es como si su presencia estuviese cerca— acotó Julián, viendo a todos lados.
—Bueno, ya, siéntense tranquilos— los regalo Anyel, recibiendo mala cara de todos.
En el camerino de ambos chicos, Thiago veía como Elisa caminaba de un lado a otro.
—¿Cómo estás tan segura de que ellos estarán ahí?— pregunto Thiago.
—No lo sé, no sé por qué confío tanto en ellos, como para pensar que vendrán solo porque saben que soy fans de Eve— expresó Elisa, tranquilizándose un poco.
—¿Y él?— indagó Thiago.
—¿Él?, a quien te refieres—
—No te hagas, sé que estás enamorada y esperas que sea él quien esté ahí en primera fila— Se burló Thiago, eso, logro calmar los nervios de ambos.
—No estás equivocado, solo espero no esté con alguien más a su lado— Elisa ya tenía una imagen en su cabeza, que no le agradaba para nada. Le hacía sentir una opresión en su corazón.
—¿Están listos chicos?, Salimos en 20 minutos— los nervios de ambos aumentaron más. Elisa estaba a punto de mostrarle a todos lo lejos que había llegado en solo dos años. Unos retoques de maquillaje y vestuarios, mientras las luces se apagaron, ellos ya empezaban a tomar lugar en el escenario, nadie veía nada.
—Vamos con todos chicos, empecemos por la melodía de Elisa, ¡que viva el amor!— exclamó suave Eve, haciendo casi llorar a Elisa.
El sonido de una tecla llamo la atención de todo el público, un segundo sonido y seguido de muchos más los dejo más atentos, deseando ver las luces encendidas y poder apreciar a quien querían ver.
Para sorpresa de todos, la melodía de la canción que unía a Elisa y Anyel empezó a sonar, eso despertó curiosidad en Anyel.
—El destino está con ustedes, mi niño— susurró Roberta Feliz.
Pasaron veinte segundos y una luz se encendió mostrando a Thiago con el violín.
—¡Por Dios!, ¿ese no es el compañero de Elisa?— exclamó Noelia, antes que dijeran algo, otra luz se encendió mostrando a Eve, matando la ilusión que tuvieron por un momento.
Los gritos de euforia, de emoción, de alegría, no cabía en el corazón de todos, pero seguían con la pregunta de quién era en ese otro piano que se escuchaba.
Hasta que una luz se encendió mostrándola a ella, tan hermosa, radiante, con una concentración espectacular, en su mente solo estaban esos momentos donde compartió con su madre, sus amigos, en el piano de Roberta, lo feliz que podría estar su madre en ese momento. Lo que ella imaginaba en ese instante, era poco para lo que realmente sentían todos dé verla ahí.
Si su corazón latía de solo pensar que la melodía llegaba a lo más profundo del corazón de Anyel, lo mismo pasaba por el de Anyel.
felicidades autora .
Que hermosa amistad la de Elisa, Noelia, Julián y Anyel.