Mi Adolescencia A Los 40

Alexánder y Lissy pasearon por la calles de España, al llegar a la plaza había un grupo de artistas que tocaban y bailaban flamenco Lissy le pidió a Alexánder que se acercarán a ver y así lo hicieron rápidamente estaba abarrotado de personas mirado disfrutando del bailé. Los artistas invitaron al público para que pasaran a bailar con ellos, un joven alto de buen ver se acercó a invitar a Lissy y ella acepto, paso al centro de la pista y empezaron a bailar.

Lissy se divertía al máximo, Alexánder solo la observaba un poco serio a su mente se vino como un huracán todo lo que le había dicho Nora.

Aunque Lissy a cada instante le demostraba lo mucho que lo amaba, en Alexánder empezó a crecer cierta inseguridad.

Trataba de no darle importancia pero le era imposible, no pensar en la diferencia de edad Lissy aún era muy joven, con tan solo 25 años aún tenía mucho por vivir y disfrutar.

Alexánder camino para a alejarse un poco y tratar de despejar su mente, Lissy se dio cuenta de que Alexánder se había retirado y dejó de bailar para ir tras él.

Le pregunto que le pasaba, si se había enfadado del baile, Alexánder sonrió y le dijo que.

- Nunca me cansaria de verte bailar.

- Jajaja, ¿esperas que te crea?, ¡Si es así por qué te retiraste!. (le pregunto Lissy un poco extrañada).

- Solo quería caminar un poco había muchas personas.( le dijo Alexánder cabizbajo).

Lissy se convenció y le pidió que siguieran caminando, ella estaba feliz, de padres al lado de Alexánder, se sentía como en un cuento de hadas.

Quería disfrutar al máximo los días con Alexánder, por qué no sabía que fuera a pasar a su regreso a Nueva York, cuando Óscar se entere de todo ésto.

Le abrumada un poco pensar en todo estos, ¿y si realmente Alexánder lucharía por su amor?.

Trataba de sacra todo eso de su mente y disfrutar el momento.

Alexánder por su parte sabía que amaba infinitamente a Lissy, pero aún así no podía dejar de pensar en su diferencia de edades.

Lissy era tan joven aún y el ya había vivido aunque nunca formó una familia y no quería dejar pasar esta oportunidad que la vida le daba.

Pero por otro lado Lissy tenía mucho que vivir aún, y sentía remordimiento al pensar atar a Lissy a su lado, y si tal vez algún día terminará arrepentida de estar con él, tal y como lo dijo Nora.

Cuando estaba con Lissy todas sus dudas se discipaban, cada que Lissy le demostraba su amor se sentía el hombre más afortunado del mundo.

Pero había momentos en que los pensamientos llegaban como un torrente de agua helado que congelaba su corazón.

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El resto de la tarde se pasó rápido, Lissy no paraba de hablar y contarle a Alexánder sobre cada lugar y lo típico de España.

Alexánder sonreía y la contemplaba atentamente.

Ambos llegaron a la casa y como niños buenos cada quien se fue a su recámara.

Lissy

Me dispongo a dormir, estoy cómodamente en mi cama que tanto había extrañado, pero no puedo evitar pensar en Alexánder.

me siento plena, completamente feliz de estar con él, en él he encontrado todo lo que había buscado en un hombre y cosas que en realidad nunca les di importancia ahora son importantes.

Realmente siento que él me escucha, se interesa por mis cosas por mis sueños y por lo que me gusta, cosa que nunca sentí con Óscar, pues cada que quería contarle algo solo me escuchaba un poco y terminaba olvidando todo lo que le decía.

Alexánder me vuelve loca estar, cerca de él, es maravilloso aunque también es una tortura el no poder estar libremente con él.

Quisiera contarle a mi padre, pero aún no es tiempo, me siento un poco mal por eso ya que nunca le había ocultado nada.

Y por otra parte, ¡Óscar que va a pensar de mí!, quizás me juzgue y crea que soy la peor de las mujeres, y no lo culpo si yo misma me siento mal por todo lo que a pasado con Alexánder.

Pero esto es más fuerte, que yo es algo que no puedo explicar solo lo siento.

Me enamoré perdidamente y aunque el mundo me juzgues voy a lucha por nuestro amor, yo sé que él me ama tanto cómo yo.

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Al día siguiente Lissy, Alexánder y Esteban desayunaron juntos y pasaron un rato agradable. Hasta que Lissy le dijo a su padre que debían volver a Nueva York.

Esteban se puso un poco triste pero lo entendió.

-Lissy voy a esperar con ansias que me hables para decirme la fecha de tu boda con Óscar, ¡ sabes ya he comprado un traje para la ocasión!, yo creí que iba a ser más pronto pero veo que se están demorando.( le dijo Esteban emocionado a Lissy).

Alexánder carraspeo un poco y se levantó saliendo hacia el pequeño jardín que tenía la casa, escuchar esas palabras fueron como dagas afiladas atravesando su corazón, Lissy se puso roja pues no savia ni que decir. Solo sonrió por nervios y compromiso y con la mirada seguía a Alexánder asta que se perdió.

En ese momento ella deseaba poder salir y abrazar a Alexánder y decirle que lo amaba a él y que no tuviera dudas de su amor.

Pero le fue imposible, si salía en ese momento su padre sospecharia y no era el momento para que se enterará.

Esteban observó la reacción de los dos, sabía que algo no estaba bien, conocía a Lissy como las palmas de su manos, y savia que le ocultaba algo, sin embargo no quiso entrometerse le daría tiempo para que ella sola fuera quien le hubiera confianza y le contara lo que le pasa.

Lissy estuvo un rato más con Esteban y después se dispuso a hacer sus maletas.

Alexánder entro solo para, toparse con la la mirada inquisidora de Esteban, quien no tardó en preguntarle qué pasaba, con Lissy pues la notaba un poco extraña.

Alexánder no supo que responder, solo le dijo que no savia nada, Esteban le pidió que por favor cuidara de ella y que si algo le pasaba no dudará en hablarle.

- Creo que eres una buena persona y muy sensato y creo que sabrás hacer lo correcto, cuida mucho de mi hija es lo único que tengo en la vida.( le dijo Esteban tocando el hombro de Alexánder y mirándolo a los ojos).

Esteban estaba apelando a la buena fe de Alexánder, por la forma en que miraba a Lissy no podía ser más que amor, aunque Lissy no le contó nada, para él no pasaban desapercibidos todos esos pequeños detalles que ambos tenían. No sabía a ciencia cierta que pasaba pero trato de pedirle de la manera más atenta que la cuidara.

Alexánder sintió que no ola de calor recorrer su cuerpo pues, aunque Esteban no le dijo claramente nada él pudo intuir que algo sospechaba. Por la manera en cómo le pidió que la cuidara.

Alexánder le prometió que cuidaría de ella y que trataría de ver por su bienestar.

Esteban se quedó más tranquilo y Alexánder, se retiró a hacer su maleta.

Ambos se despidieron de Esteban, y se marcharon rumbo al aeropuerto, Alexánder se mantuvo en silencio asta que decidió, platicarle a Lissy sobre lo de si papá,

- Mi papá es muy inteligente y creo que sospecha algo, me siento mal por no poder decirle. Pero tampoco me siento orgullosa de lo que estamos haciendo por eso es que primero tengo que hablar con Óscar, ( suspiro Lissy ), ¡ojalá y lo entienda!.

Alexánder solo la acerco a su pecho sin decir nada y la abrazo cálidamente.