capítulo 1

Soy Alexánder Anderson el mejor y más reconocido abogado de todo Nueva York, desde que la mujer ala que amaba me abandonó, me he vuelto un hombre frío dedicado únicamente al trabajo, asta ahora el bufete del cual soy dueño no a perdido un solo caso, me he asociado con varios bufetes en diferentes países del extranjero.

De vez en cuando visitó un club exclusivo donde hay las mejores mujeres para disfrutar un rato y saciar mis necesidades, pago muy bien por sus servicios, y por su exclusividad y discreción, Como abogado que soy no es recomendable verme envuelto en chismes, tengo que cuidar mi reputación.

Las Mujeres para mí solo son un objeto sexual, no acostumbro estar dos veces con la misma.

Me he vuelto frío y sin sentimientos, solo me importa el dinero, en esta vida todo se trata de dinero, ¿ cuánto tienes? ¿cuántos vales?.

El dinero es lo único que mueve alas personas.

A mi edad he tenido muchas mujeres, pero nunca nadie a vuelto a cautivar mi corazón, mi vida es tranquila, mi corazón se marchito y poco a poco se fue secando y cuando había pensado que nunca mas me enamoraría.

Llega esa chiquilla, esa loca y molesta niña, y pone todo mi mundo de cabeza, no la soporto y siento que la odio, pero cada momento que pasa me cuesta más estar lejos de ella, estoy completamente confundido me siento como un adolescente un adolescente a los 40.

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Todo empieza asi.

- Hola Rosy buenos días, me puedes traer un café y mi agenda para el día de hoy.

Rosy: buenos días, en un momento estoy con usted.

Tocan la puerta, toc, toc.

- Pasa!!!!.

Rosy: Le pone el café en el escritorio. Su agenda, señor Andersson, el día de hoy está relajado, solo tiene una cita en el café " Sabor a hogar" alas 10:00 un cliente desea verlo para un caso muy especial, me pidió que por favor no faltará que le urgía verlo.

Gracias, cancela todos los pendientes de la tarde, puedes retirarte, le ordenó Alexánder en un tono frío.

Alexánder Andersson: Que jaqueca, no debí haber tomado anoche( dijo dándose un ligero masaje en la cabeza). Solo espero que la comida de bienvenida de Óscar no se convierta en un campo de guerra.

Tengo que terminar con estos papeles, apenas tengo tiempo para llegar al café.

Rosy archiva estos documentos y termina lo que tengas pendiente y te puedes retirar, hoy no será necesario que te quedes. ( Le dijo Alexánder y se marchó).

Alexánder Andersson: llegó al café y me pongo cómodo. La clienta aún no llega, uuuff que gente tan impuntual.

- Buenos días, disculpe la tardanza, soy Elena Ruíz.( le dijo dándole la mano muy nerviosa).

Alexánder Andersson: usted!!!, usted otra vez, ¿no se cansa de molestar?,( le dijo furioso)

Elena Ruíz: Por favor!!!, por favor escuché, necesito que me ayudé.

Alexánder Andersson: ya le dije, que yo no soy beneficencia pública, mi trabajo cuesta y muy caro.

Elena Ruíz: Usted es el único abogado que puede ayudarme, se el poder que tiene, ayúdeme, no tengo con que pagarle, pero puedo trabajar para usted eternamente solo ayúdeme a recuperar a mi hijo.( le dijo llorando).

Alexánder Andersson: Mire señora el gobierno le puede ayudar con un abogado de oficio. Baya y pida ayuda donde la puedan ayudar y no insista, ( se levanta para abandonar el lugar).

Al momento de salir una joven se plantó frente a él y comenzó a insultarlo, por como trato ala señora.

Lissy Miller: Lo toma por la mano haciendo que se detenga, es usted un patán cretino, cómo puede ser tan insensible al dolor de esta pobre señora, que necesita de su ayuda.

Alexánder Andersson: Sueltame, Ivanov donde estás, saca está indigente de mi caminó.

Inmediatamente el guardaespaldas de Alexánder, se lanzó sobre la joven tomándola fuertemente de la mano.

Lissy Miller: Sueltame !!!!!, me lastimas.

Elena solo contemplaba la escena sin saber que decir o que hacer.

Lissy Miller: (mirándolo a lós ojos con mucho odió), personas como usted no deberían de tener un título, la señora le suplica que le ayude y a usted solo le importa él dinero, es un patán.

Alexánder Andersson: Suficiente de que una chiquilla indigente me este insultando. Sacala de aquí!!!.

En ese momento Lissy mordío muy fuerte al guardaespaldas, este la soltó de su agarre y Lissy aprovecho para darle un fuerte golpe, en sus partes bajas. Ivanov se dobló del dolor dejando desprotegido a el señor Alexánder.

Lissy Miller: tome el caso de la señora, yo estoy dispuesta a pagarle absolutamente todo.

Alexánder Andersson: jajaja, tú?, mírate pareces una indigente vestida así.

Lissy se molestó bastante y zas....., le soltó tremenda cachetada, no me vuelvas a llamar indigente!!!!, en el rostro de Alexander quedó pintada la mano de Lissy.

Alexánder quedó anonadado, nunca nadie se había atrevido a ponerle una mano encima.

Alexánder Andersson: Esto lo vas a pagar muy caro,chiquilla insolente,( le dijo gritando y tocándose el rostro adolorido).

Lissy Miller: No me importa. Y que esperas vamos a un banco para pagarte para que le ayudes ala señora a recuperar su hijo.

Alexánder Andersson:¡ Ahora me vas a decir que hacer!.

Lissy Miller:¿ Tu querías dinero, no?, pues ahora lo tendrás, ya no hay escusas para que lleves el caso de la señora.

Lissy se acercó a Elena para decirle que no se preocupara, que ella pagaría, el abogado.

Elena Ruíz: gracias, gracias prometo que algún día te pagaré todo lo que haces por mí.

Lissy Miller: sonriendo, no se preocupe no me debe nada.

Elena Ruíz: Supongo que ahora sí me ayudara a recuperar a mi hijo( mirando a Alexánder aún con lágrimas en los ojos).

Alexánder Andersson: Supongo que no tengo elección. ( en un tono poco amable). Esta es mi tarjeta valla al bufete, yo me comunico para que la atiendan y le tomen los datos, yo personalmente me encargaré de llevar su casó.

Elena le dio las gracias al abogado y nuevamente agradeció a Lissy antes de salir.

Alexánder Andersson: ¿En verdad tienes el dinero para pagarme?, ¡ o solo me quieres estafar!.

Lissy Miller: Claro que lo tengo en este momento vamos al banco para pagarle.

Alexánder Andersson: Jaja no piensas que voy a ir contigo.

Lissy Miller: como quiera, dime dónde le llevo el dinero.

Alexánder Andersson: Ivanov acompaña, a la indi..... acompañala para que te entregué el dinero.

Lissy Miller: Y como se que, no vas a ser tú quien me robe mi dinero.

Alexánder Andersson: jajaja, no sabes con quién estás tratando, ¿y si ya te arrepentirte así la dejamos?. Busca otro abogado!!!.

Lissy Miller: No, no...... Está bien le entregaré el dinero a este hombre.

Lissy e Ivanov, se dirigieron al banco donde le entrego el dinero y ella volvió ala cafetería.

Capítulo 2

Unas horas antes.

Óscar Andersson y su prometida Lissy Miller, llegan, a nueva York.

Óscar Andersson: Liz el departamento va a estar sucio, pues a estado todos estos años sin habitar, que te parece si mientras yo llevo las maletas al departamento y mando a ordenarlo tu te vas y me esperas en esta cafetería es un lugar agradable. Y yo te alcanzó en un momento.( le dijo dándole un papel con la dirección).

Lissy Miller: si tu crees que es mejor así, no tengo nada que decir tomaré un taxi y te espero en la cafetería, ¡no tardes!.

Óscar Andersson: prometo llegar cuanto antes, de allí nos iremos a casa de mi madre.( le dijo dándole un beso ).

Liz asintió y fue en busca de un taxi.

En la cafetería todo era muy agradable, Lissy disfrutaba de una exquisita taza de café, mientras esperaba pacientemente a su prometido, Lissy escucho entrar a una persona solo le dio una simple mirada pero se pudo percatar de que era un hombre guapo y muy elegante.

Lissy Miller: Que hombre tan más guapo!!!!!.(pensó), hay que cosas estoy diciendo, yo estoy comprometida.

En poco tiempo entro una mujer la cual llegó donde el hermoso galán. Las mesas estaban muy cerca, así que aunque es de mala educación escuchar conversaciones ajenas, me fue imposible no escuchar y en pocos instantes de ser un hermoso galán, paso a ser, un patán sentí tanta rabia al escuchar que no iba a ayudar a esa pobre mujer nomás por qué no tenía dinero para pagarle, que clase de persona es que no siente empatía por las desgracias ajenas.

No pude contenerme y cuando vi que estaba a punto de abandonar el lugar me plante frente a él para impedirle el paso y empecé a gritarle de cosas, no pude contener mi enojo a veces suelo ser muy impulsiva, y más si se trata de defender a alguien.

Aún me duele un poco la mano por tremenda cachetada que le acomode a ese patán, tuve que sacar de mis ahorros de toda la vida para ayudar a la señora Elena, no me arrepiento solo que ahora tengo que trabajar más duro para un día poder poner mi propio Spa, es con lo que siempre he soñado. Solo espero que ese arrogante abogado en verdad la ayude a recuperará a su hijo.

Ya con eso siento una enorme felicidad a ninguna madre se le debe de arrebatar sus hijos.

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