Seguro Que Sería Solo Temporal?

dedicó los siguientes días a prepararse para la recesión. mientras Carlos trabajaba afuera con los hombres, ella preparaba numerosos platos. algunos los había encontrado en, otros los había aprendido de su madre.

antes de que llegaran los invitados, el sábado por la noche estaba nerviosa. Carlos entró a la casa y le dio un beso en la boca de camino al cuarto de baño para darse una ducha. al captar toda su fragancia masculina se sintió tentada a unirse a él debajo del agua.

suspiró. vivir con Carlos era tan agradable... pero no permanente. El contacto físico que compartían en la cama casi cada noche era maravilloso. sabía que no se estaba enamorando, porque ya había perdido la cabeza por él.

y sabía que a él le encantaba besarla, hacerle el amor, pero también que era escéptico acerca de la palabra amor. simplemente, no creía en el amor romántico, ese que dura para toda la vida. deseo...

comprendió que el tiempo pasaba y regresó a la cocina. Carlos estuvo a su lado en un tiempo récord.

cómo va todo? te puedo ayudar en algo?

bien y no dijo ella removiendo la aromática y deliciosa salsa de barbacoa una de las secretas de su madre.

cielos eso huele bien y estoy hambriento, la tomó por el mentón para que lo mirara y también famélico dijo haciéndole perder el sentido a besos.

después de unos minutos celestiales lo apartó.

debo de acabar con esto dijo respirando después de finalizar cada palabra. echa una mano amor.

Carlos fingió un escalofrío.

Oh, Luisa, oír que me llamas amor mi cita.

ella le sonrió ahora mismo creo que han llegado nuestros invitados.

te lo recordaré dijo apartándose de ella

desde luego espero que lo haga dijo ante una sonrisa perversa que le dedicó a él.

la recepción fue maravillosa. todo el mundo charló rió e incluso cantó. Carol le cayó bien de inmediato. era joven pero madura y con gran sentido de humor.

después de Karol, Carlos la llevó junto a Juan para presentarle a su hija. Brenda era una joven bonita que en cuanto Carlos se marchó para ocuparse de otras cosas le ofreció un apretón de manos que quiso ser demoledor acompañado de una expresión centellante.

de inmediato ella apretó también hasta que la otra se dio y retiró la mano.

a pesar del hormigueo de dolor en los dedos recibió la mirada furiosa de la adolescente con gran serenidad.

si me disculpas, he de comprobar la comida que hay en el horno

"Santo cielo pensó Luisa*de camino a la cocina. había algo taimado y petulante en la joven que despertó su alarma mental en el acto. pero, por qué había elegido de blanco a ella? la risa suave de Carlos le llegó desde el otro extremo de la sala.

""claro"Luisa suspiro. Brenda estaba encaprichada con Carlos punto no pudo culparla. Carlos representaba todas las cosas de los sueños de las mujeres, pero se hallaba muy lejos de los de la joven.

experimentó una sensación que no le gustó, una advertencia de cosas desagradables, de escenas por llegar.

la fiesta duró hasta la bien entrada la noche. al final y a regañadientes se rompió. Luisa permaneció junto a Carlos en el porche agradecida de que su brazo la protegieran del frío aún hablando con los demás mientras se dirigían a los vehículos.

ha organizado una velada magnífica dijo él alabando su esfuerzos una vez que se marcharon todos punto gracias

de nada dijo ella y gracias por el cumplido poniéndose de puntilla le dio un beso en el costado de la mandíbula como cincelada en roca. ahora puedes ayudarme a recoger todos los desorden.

cielo Luisa se quejó él como un crío. no podemos dejarlo hasta mañana?. tengo que trabajar. sabes?

pero se puso a ayudarla soltando suspiro profundo cada poco segundo punto cuando terminaron ella no paraba de reír. un rato más tarde cuando se metieron en la cama ya nos reía jadeaba con un placer delicioso.

Luisa tenía la cena lista para él cuando bajó al siguiente día, con el sol prácticamente oculto a medida que Carlos se lanzaba sobre los platos como un hombre hambriento. comentaron sobre la recesión de anoche anterior.

me gustan tus amigos dijo ella le entregó la bandeja de puré de papas para que se sirviera una segunda vez. y en el acto pude ver que son tantos amigos como empleado junto

Carlos asintió y tragó antes de responder.

lo son continuó él lo que es bueno es particular durante los meses del invierno punto nos reunimos a menudo sonrió y tomó otro bollo de la cesta del pan. si no lo hiciéramos seguro que todos sufriríamos la ansiedad de estar encerrados.

Luisa sonrió

y pensar que todo este tiempo te consideré un solitario.

no me molesta la soledad dijo él. bebió un sorbo de café de hecho en ocasiones la prefiero.

como cuando quieres leer?

sí y cuando veo el fútbol dijo él

Ummm ella la dio la cabeza. es tu modo de recordarme que hay un partido esta noche y que quiere que no te molesten?

no, porque no me molesta y se levantó y recogió los platos de ambos los llevó al fregadero y regresó a la mesa con la cafetera. te gusta el fútbol?

lo puedo tolerar dijo ella pero prefiero leer..

puedo ir a ver el partido al dormitorio ofreció él

Luisa negó con la cabeza antes de que terminara.

eso no es necesario si me concentro en la lectura ni siquiera oigo el televisor a menos que esté al máximo de volumen.

no lo estará le sonrió el despacio puedo ver el partido en el salón y tú podrás leer en el dormitorio sugirió.

Luisa sonrió

no tuve el partido en la cama yo no consigo sentirme cómoda leyendo en la cama.

el suspiro

te sentará a leer a mi lado si miro el partido en el sofá?

lo haré si me rellenas las tazas dijo ella. le recordó que seguía ahí de pie con la cafetera en la mano junto porque debemos volver a nuestra charla sobre la recepción ahora que han quedado confirmados los arreglos de los asientos para esta noche? sonrió.

desde luego le devolvió La sonrisa derritiéndole todas las extrañas sin embargo. luego frunció el el seño. tienes algo en la cabeza preguntó él?

bueno es sobre Brenda dijo ella

Carlos gruño

qué pasa con ella? fue grosera contigo? te insultó de alguna manera?

no exactamente buscó la palabra adecuada. intenté entablar una conversación con ella y pareció súbitamente ósca suspiró no se mostró muy amistosa.

él respiró hondo.

te iba a hablar sobre Brenda debería haberlo hecho antes de la fiesta es y lleva cierto tiempo siendo un dolor en el cuello y en algunas otras partes más al sur . se pasó los dedos por su pelo largo soltándolo de la cinta del cuero punto hace tiempo que Brenda viene al rancho al ser más joven era una niña muy alegre y activa Juan y yo le enseñamos a montar hizo una mueca punto al llegar el verano pasado después de graduarse en el instituto era distinta.

en qué sentido?

Luisa el único modo de describirlo es que empezó a revoltear demasiado a mi alrededor movió la cabeza. comprendes que siempre lo había hecho pero ese verano fue distinto punto al principio pensé que me usaba para practicar sus actividades y ejecutarlas con los chicos de su edad pero no fue eso accidentalmente empezó a rozarme con los pechos a tocarme abrazarme sonrío con ironía. no soy estúpido sus actos no eran iguales que cuando era una joven se me estaba insinuando. hablé con Juan al respeto antes de irme a las Vegas y él me aseguró que se ocuparía del asunto parece que la reprimenda que le dio le entró por una oreja y le salió por la otra .

y ahora dijo Luisa sospecho que Brenda la conquistadora en potencia está resentida por la mujer que trajiste a casa contigo de las Vegas.

con otro suspiro Carlo acabó el café y comenzó a recoger la mesa junto Luisa se levantó para ayudarlo

es lo que creo confirmó él supongo que tendré que hablar con ella decirle algunas verdades de las cosas

ah no Carlos yo lo haré en el momento adecuado dijo Luisa seré gentil pero firme

el momento adecuado se presentó a la semana siguiente. Luisa se hallaba al teléfono había recibido una llamada de su padre la cuarta desde que había contado que se había casado y trasladado con Carlos al rancho de este en colorado. seguía intentando convencerlo de que se encontraba a salvo y radiante de felicidad

nada más colgar el teléfono suspiró de alivio. el aparato volvió a sonar era Víctor desde las Vegas después de charlar un rato y preguntar por lisa y bella y todo lo demás en el restaurante le pidió que guardara un momento mientras iba a buscar a Carlos quien por fortuna ese día trabajaba en los establos.

fui a buscarlo casi a las carreras y se detuvo en seco al oír la voz y supuestamente sexy de Brenda.

sabes Carlo? sería divertido dar un paseo a caballo cuando termine aquí dijo ella moviéndose de tal modo que el costado de su pecho izquierdo estableciera contacto con el brazo de Carlo mientras que este se pillaba la yegua solo tú y yo qué te parece.

Brenda comentó con las voz tensa.

no lo creo se adelantó Luisa para situarse entre él y la joven. Víctor está el teléfono Carlos le anunció quitándole el cepillo de la mano Yo acá habré aquí.

él frunció el seño preocupado

lisa?

no, no Luis se movió la cabeza no es más que una llamada de amigos.

bien se dirigió hacia la casa.

Luisa comenzó a cepillar el animal. pensé que ibas a salir a dar un paseo Brenda . no dejo de cepillar me temo que ahora vas a tener que hacerlo sola punto se movió para dedicarle una mirada de advertencia a la joven y en el futuro si es que entiendo lo que digo. con un bufido casi tan sonoro como el que podía al lanzar Brenda se largó de los establos

unos minutos después Carlos sobresaltó a Luisa al acercarse a ella en silencio

cómo diablos puede un hombre caminar en silencio con esas botas vaqueras? dijo ella

él sonrió

práctica bajó la voz preguntó punto la conquistadora en potencia se ha ido?

Luisa asintió con un suspiro.

quiere tu cuerpo.

y quién no? dijo él

ella puso los ojos en blanco y cambió de tema.

te dijo algo en particular Víctor?

no, la miró con ironía. dijo que sonabas bien y me soltó sin rodeo que más me valía asegurarme de que siempre siguieras bien.

o que? Luisa tuvo que reír punto él está en las Vegas y nosotros aquí qué pensaba hacer al respecto.

venir a rescatarte de mí dijo él

claro veo a Víctor de camino a las montañas para rescatarme dejando a su adorada y embarazada lisa en casa y sola punto moviendo la cabeza en esto de que los hombres eran bobo regresó a la casa.