El Reflejo De Sol

Cuéntame de ti Eryndor eres de aquí del pueblo del corazón.

Eryndor sonríe y comienza a contar su historia:

Eryndor: "Sí, soy de aquí, del Pueblo del Corazón. Nací y crecí aquí, rodeado de la magia y la belleza de este lugar. Mi familia ha vivido aquí durante generaciones, y siempre hemos sido conocidos por nuestra habilidad para comunicarnos con los animales y entender la naturaleza".

Sol se inclina hacia adelante, interesada:

Sol: "Eso es fascinante. ¿Cuál es tu historia? ¿Cómo creciste aquí?"

Eryndor se ríe y continúa:

Eryndor: "Bueno, crecí jugando en los bosques y campos que rodean el pueblo. Mi padre era un gran cazador y me enseñó todo sobre la supervivencia y la caza. Mi madre era una curandera, y me enseñó sobre las plantas y la medicina natural. Siempre fui un poco diferente a los demás, ya que tenía una conexión especial con los animales. Podía entenderlos y hablar con ellos de alguna manera".

Sol se sorprende:

Sol: "Eso es increíble.

Después de una agradable velada, Eryndor acompaña a Sol de regreso a su posada. Al llegar, Sol se vuelve hacia Eryndor y le da un beso en la mejilla.

Sol: "Gracias por la linda noche, Eryndor. Me divertí mucho".

Eryndor se sonroja y sonríe:

Eryndor: "De nada, Sol. Me alegra que te hayas divertido. Nos vemos mañana, ¿de acuerdo?"

Sol también se sonroja y asiente:

Sol: "Sí, de acuerdo. Hasta mañana, Eryndor".

Eryndor se queda parado en la puerta de la posada, mirando a Sol mientras ella entra. Se siente emocionado y nervioso al mismo tiempo. No puede creer que Sol le haya dado un beso en la mejilla.

Sol, por su parte, se siente contenta y relajada después de la velada con Eryndor. Se siente atraída por él y disfruta de su compañía.

Sol al llegar a la posada se dirige a su habitación y se sienta en la cama de su habitación en la posada, mirando por la ventana hacia el cielo estrellado. Se pregunta a sí misma:

"¿Para qué vine a este mundo? La verdad, no lo sé. Pero una cosa es segura, no quiero volver a mi mundo. Aquí he encontrado amigos, personas que se preocupan por mí, que me aceptan por quien soy. En mi otro mundo, vivía sola, no tenía a nadie. Era una vida vacía, sin propósito".

Sol piensa en Eryndor y en la conexión que siente con él. Se siente atraída por su amabilidad, su sentido del humor y su corazón noble.

"¿Será que he encontrado mi lugar en este mundo.

Al día siguiente.

Sol llega al Gremio y busca al Maestro Ryder. Lo encuentra en la sala de entrenamiento, revisando algunas armas y equipo.

Sol: "Maestro Ryder, buenos días. ¿Hay algo sencillo que pueda hacer hoy? Quiero ayudar en lo que pueda".

Maestro Ryder sonríe y asiente:

Maestro Ryder: "Ah, Sol, buenos días. Sí, hay algo que puedes hacer. Necesitamos que alguien entregue algunos suministros a la aldea de los elfos. Es un viaje sencillo, pero es importante que lleguen estos suministros a tiempo".

Sol asiente, emocionada de tener una tarea:

Sol: "¡Genial! Estoy lista para ir. ¿Qué suministros debo entregar?"

Maestro Ryder le entrega un paquete y le explica:

Maestro Ryder: "Estos suministros son para la curandera de la aldea. Son hierbas y medicinas que necesita para ayudar a los elfos. Debes entregarlos en persona y asegurarte de que lleguen a destino".

Sol toma el paquete y se despide del Maestro Ryder:

Sol: "Entendido, Maestro Ryder. Me aseguraré de que lleguen a destino. ¡Gracias por la tarea!"

Sol sale del Gremio, lista para comenzar su misión.