El Renacer de la Princesa Demonio.

El infierno, un mundo habitado por demonios de toda clase, un lugar al que según van todas las almas pecadoras, y si, así es, y como en cualquier mundo, este debe tener un gobernante y siendo uno donde habitan seres de los más tramposos y despiadados, su emperador debe ser peor, al menos así es como dicen que es, su nombre, sin duda lo han de conocer, Lucifer, un demonio que una vez fue el ángel más perfecto, bueno, lo sigue siendo o es lo que él asegura. Solo que se independizó de su padre y puso su propio imperio, el cual funciona muy bien, al menos ha funcionado durante siglos. Pero ahora desde hace ya unos 20 años, Lucifer entro en un pequeño sueño, un descanso, dejando a uno de sus generales como encargado de todo, lo nombro rey y se retiro a su pequeña siesta.

Este nuevo rey temporal, es Amon, un fiel demonio, leal a Lucifer desde siglos y aunque ha hecho bien su trabajo, eso no significa no haya traidores en el imperio, después de todo, en el infierno, solo habitan serás traicioneros y tramposos, ¿que se puede esperar? Bien, ahora dicho esto, hace 20 años, antes de su sueño, Lucifer fue al mundo humano, de vacaciones, según sus palabras, pero en realidad solo fue a divertirse con unas cuantas humanas sexys, entre ellas, una muy especial por así decirlo, su nombre era Aurora, una recién llegada a un burdel, por lo tanto, el señor del infierno, fue su primer cliente, así como de otras, porque él no es tanto, no, sabe que ese lugar esta lleno de enfermedades, así que lo más "inteligente" que puede hacer, es pedir vírgenes. Tras pasar su noche de diversión, regreso al infierno y procedió a tomar su siesta.

¿Que paso con aurora? Ella al paso de los días comenzó a sentirse mal, hasta que un médico le dijo que estaba embarazada, cosa que no le gusto nada a la madam del burdel, pero Aurora, pese a su decisión de trabajar en un sitió así, quiso tener al bebé, la madam se lo permitió, pero si este era un niño, sería criado como sirviente para el lugar y si era niña, a sus 12 años sería ofrecida al mejor postor y trabajaría en el burdel, Aurora no quería eso, pero no le quedo de otra. Así, finalmente el bebé nació, era una hermosa niña de ojos rojos y cabello blanco, la madam estaba encantada, sin duda, ganaría mucho con esa niña, pero Aurora no quería eso, y como después del parto quedo muy enferma, lo decidió y así como su único acto de amor hacía su bebé, escapo del burdel una noche y dejo a la pequeña niña en las puertas de una iglesia que funcionaba como orfanato.

Y ahora 20 años después, un demonio ha descubierto la existencia de esa niña, este era un demonio llamado Zagan, quien por siglos se ha ganado la confianza de Lucifer, volviéndose un gran general de sus tropas, pero justo cuando creyó que él quedaría como Rey durante el sueño de Lucifer, resultó ser Amon quien fue el elegido, furioso por esto, ha decidido que solo eliminará a Lucifer, pero no hay forma de hacerlo, las armas y sus poderes no son suficientes, entonces al estar investigando, descubrió una forma de hacerlo, Lucifer puede morir, si su corazón es atravesado con una lanza hecha de los huesos de alguien de su propia sangre, es decir, un hijo suyo, pero en el infierno Lucifer no tiene hijos, las mujeres demonio, no pueden dar a luz, ese fue el castigo que les fue dado, por eso, para que nazca un demonio, algunos buscan tener hijos con una humana o mezclan su sangre con un alma corrupta y los vuelven demonios, adoptándolos como parte de su familia.

Tras años de investigación, Zagan finalmente descubrió que Lucifer tuvo una hija con una humana, una joven llamada Valentina, así que solo debe asesinarla y tomar sus huesos, algo que creyó sería fácil, pero en su primer intento fallo, así que envió a alguien para que se encargará de todo, alguien que conoce ese mundo y por supuesto, tiene algo personal con cierta familia y que causo grandes males a la humanidad.

.

.

.

Lucila no dudo en decirle a su padre lo mal que la trataron por Maximiliam y en como la echo de la mansión sin importar que que se acercará el anochecer, lo cual era peligroso para que una mujer viajará con pocos guardias. El conde le asegura que piensa reclamarle al príncipe por su falta de cortesía a una dama, incluso jura que enviará una queja con los emperadores, porque no pueden tratar así a un noble que aporta tanto al imperio.

Y tal como dijo, a la mañana siguiente llegó a la mansión pidiendo ver a Maximiliam, aunque le informan que el rubio ya ha salido y que probablemente no regrese pronto, pero su prometida estaba en el estudio. El conde sonríe ante aquella respuesta y le pide los guardias que le digan a Valentina que desea verla.

No demoraron en hacerlo pasar, lo llevaron a la sala donde le sirven té y un par de bocadillos, así que el conde, aprovechando que Valentina no llega, saca de su bolsillo un polvo que coloca en la tetera, aunque primero se había servido él. Valentina no demora en llegar y sentarse en el sofá frente al conde, el hombre no duda en observarla fijamente, era una chica hermosa y no piensa quedarse con las ganas de probarla, tal vez cuando el príncipe sepa que ella le fue infiel, la abandone y el podrá tomarla como amante.

— si ya terminó de observarme, dígame, ¿que desea? ¿Es por su hija? —

— por supuesto, me pareció de muy mala educación que la sacarán de la mansión, ¿sabe lo peligroso que es?— menciona mostrándose indignado.

— si, para nuestra mala suerte, al parecer no le paso nada, debí alcanzarla y rebanar su cuello.— sonríe ladina.

— ¿como te atreves? Esto es un insulto y le haré saber a los emperadores la clase de maleducada que eres, seguramente no te aceptarán en la familia.— amenaza.

— que miedo, ¿en verdad cree que los emperadores le harán caso un noble tan insignificante?—

Valentina se sirve un poco de té, pero al tenerlo cerca de sus labios, ve la leve emoción del conde, así que lo aparta y lo deja de nuevo en la mesa y el conde frunce el ceño.

— soy alguien importante en el imperio, pero, si quieres que hable bien de ti, podríamos llegar a un acuerdo, solo bebe el té y...—

El hombre no puede seguir hablando porque una daga se ha clavado en su pierna, este cae al suelo gritando de dolor, mientras que Valentina se pone de pie.

— ¿me crees tonta? Tu repugnante deseo hacía mi lo note desde el primer momento que te presentaste ¿y que crees? Mi prometido también lo noto.—

Las puertas se abren dejando pasar a Maximiliam, quien se sienta en la mesita de centro cerca de donde esta sentado el conde.

— a-alteza...no es lo que cree...ella me estaba seduciendo...le dije que no y me ataco.— trata de excusarse.

— ¿y piensas que creeré algo tan estúpido? En fin, te dejaré vivir, pero, por supuesto, debo asegurarme que cada mujer cerca de ti, no corra peligro.— Maximiliam hace una seña.

Los guardias pasan y se acercan para levantar al conde los brazos.

— llevenlo al granero y diganle al encargado que hay un cerdo más para castrar.—

—¿que? N-no puede hacerme eso...alteza...por favor...perdone a este humilde servidor...alteza...

Los guardias se llevan al hombre mientras sigue gritando y suplicando, hubiera sido fácil matarlo, pero es mejor dejarlo vivir, pero hacerlo sufrir de la peor manera.

— ahora si, podemos irnos, mi pequeña hada.— le ofrece la mano.

— por supuesto. Sabes, pensaba matarlo, pero tu idea es mucho mejor, ni yo lo hubiera pensado.— lo hagala.

Ambos caminan hacía la salida, donde les esperan los escoltas, ya que les ha llegado información de un lugar algo sospechoso el cual es mejor investigar.

—¿como supo de ese lugar? Sus escoltas no encontraron nada ayer.—

— tengo espías, de los que nadie sospecharia.— una pequeña mariposa roja se posa en la mano de Maximiliam.

Valentina al verla, se acerca observando al pequeño insecto.

— ¿como podría esto informar sobre algo sospechoso? ¿Acaso habla con ellas?—

— algo así, mi madre las ha mejorado con el paso del tiempo, antes solo eran venenosas, ahora, emiten una onda mágica que me informa sobre lo que han visto y puedo saber la ubicación, todo tiene que ver con magia.— la mariposa se eleva nuevamente y vuela junto a un pequeño grupo.

Valentina estaba impresionada con esa información, nunca imaginó que con magia se podría modificar un pequeño insecto y que este pudiera servir como un espía indetectable.

...