Una chica de 18 años, caprichosa, con un gusto diferente, hace lo que imposible por estar con él hombre que amo, desde que lo vio, sin importar convertirlo en su sugar daddy, aún sin tener esa necesidad, solo por capricho, lo que ella no sabe, es que el destino le jugará una broma, que solo ellos sabrán si quieren continuar.
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Capitulo 22
1 semana después
Anderson seguía encerrado, Aitana empezó a meterse de lleno en la empresa, conocía cada detalle, descubrió los manejos de su padre que no eran nada buenos, esa mujer estaba por llevar el duro trabajo de su madre a la quiebra, su padre trataba de acercarse, pero ella solo lo buscaba para el trabajo.
Por otro lado, su madrastra hacia lo posible e imposible por buscar una manera de dañar a Aitana, pero ya no tenía todo el dominio en su esposo.
_Amor, Aitana no debería estar a cargo..._
_Lola, Aitana es dueña absoluta, yo solo tengo un 20% nunca me quiso vender nada, ella es mayor de edad, si sigo a su lado, es por su misericordia, ya no me digas nada más de mi princesa._
El hombre salió dejando a esa mujer vuelta un demonio, si seguía así, lo perdería y quedaría en la calle, no tenía nada para retener a ese hombre o pedir algo a cambio.
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_Abuelo, ayuda a Aitana._
_Mi niña, ya tu padrino y yo estamos en eso, la chica solo está tomando y trabajando en lo que es de ella, denle su espacio._
Sofía se quedó en sus brazos, extrañaba a su amiga.
_Anderson está sufriendo, no sale de su apartamento._
_Le Pasara, no te preocupes._
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_Hijo, ya deja de tomar, te necesito en la empresa..._
_No quiero, no puedo abuelo, me dejó sin importarle mi amor, mi corazón._
_Como sabes si te dejo de corazón, si no luchas por ella._
El chico le dedicó una mirada a su abuelo, se sentó en el sofá y pensó un momento.
_¿Crees que no lo hizo de corazón?_
_¿Aprende a conocer a la mujer que quieres a tu lado, es ella así de cruel?_
El chico pensó un momento, tal vez podría estar actuando y se moría por estar junto a él.
Mientras Anderson pensaba en que hacer, Sofía se fue a ver a su sugar, solo quería un abrazo, estaba tan triste, sola, aburrida, después de tanta diversión, llegó ese momento de soledad que no le gustaba.
_¿Buenos días, señorita, está el señor mallorquín?_
_Sí, ya la anuncio._
_No, no lo haga._
Sofía pasó sin tocar y Aron estaba hablando con su amigo, tenían mucho trabajo, Anderson en su despecho, le tocaba a Aron ayudar a su abuelo.
_¿Sofía?_
_Oh, lo siento, estás ocupado._
_No, tranquila, pasa, yo regreso en un momento._
Su amigo se levantó y salió, guiñándole el ojo a Aron.
_¿Qué pasó? _
_Nada, solo quería..._
_Sofí, no puedo, estoy muy ocupado, nena no seas tan caprichosa._
Sofía se detuvo antes de llegar a él, ¿tan caprichosa era? ¿Le molestaba?.
_¿Soy muy caprichosa?_
_Ven..._
Sofía se retiró, ella solo fue por un abrazo, pero le dolía saber que a él le molestaba que fuera así.
_No, sigue trabajando, aunque no vine por sexo, solo quería un abrazo._
Salió dejando a un Aron muy arrepentido.
_¿Qué pasó? ¿Por qué salió triste y molesta a la vez?_
_Cometí un error._
Su amigo solo palmeo su hombro, estaba tan cansado y estresado que no pensó las palabras antes de decirlas, se había arrepentido por eso, ella pensaría mal.
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_¿Que haces aquí? Estoy muy bien._
Sofí entró sin responder, pasó a la cocina y agarró una botella de alcohol, tomo un trago quemando su garganta, se fue a la sala, seguida por Anderson, sin preguntarle nada, esperaría a que ella le dijera que pasaba, encendió la tele y puso música, bailo, veinte minutos después, siendo observada por el chico, muy paciente, esperando que dijera algo, la chica dejo de brincar en su sofá y se sentó a su lado a llorar, poniendo su cabeza en el hombro del chico.
_Soy muy lamentable, mi amiga no me habla, mi novio no me quiere por caprichosa y tú, tú también estás triste._
_¿Quien dijo que no te quería?_
_Él me dijo que no fuera caprichosa, yo solo fui por un abrazo._
_Boba, seguro estaba cansado, habla sin pensar cuando está así._
_Que bueno que me lo dijo, así no lo seré más._
Anderson negó riendo, siguió acariciando su cabeza, como una hermana menor, una niña.
_Sofí, crees que Tana no me quiera._
_Tonto, ella te ama, estoy segura de que está muy triste por todo esto._
¿El chico se quedó pensando un poco, debería hacer algo para demostrarle que estaba con ella? ¿Que seguiría luchando por ella? ¿Pero dándole su tiempo?
Sofía se levantó y siguió tomando de su botella, cantando y brincando, insultando a su sugar, gritándole lo mucho que lo ama y que lo odia también.
_Ya loca, vete a casa o tu abuelo se preocupará._
_Nooo, no quiero irme..._
La chica ya estaba que no podía con su cuerpo, se acostó en el sofá, quedándose dormida.
Anderson no le quedó de otra que llamar a su abuelo, el anciano no tuvo problema, si él en sus mente tenían planeado casarlos, aunque no fuera obligado ya.
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_¿Buenas noches, nana, está Sofía? Vine a traerle unos documentos._
_Pasa mi niño, déjame ver en su habitación, no la he visto llegar..._
_No es necesario, Anderson me llamo, está con él._
Aron frunció el ceño, fue inevitable no sentir celos, por su cabeza pasaron muchas cosas.
_Aah, bueno padrino, está bien, yo regreso mañana._
Aron salió dejando a esos dos confundidos, que le había pasado? Aron se fue al apartamento de su hermano, cada segundo que pasaba era eterno para él, tenía en mente todas las cosas que tenía para hacerle a su chica por estar a solas con su hermano.
_Sifiiii._
Anderson trataba de llevarla a la otra habitación, pero estaba ebrio también y casi no podía con su cuerpo, como llevaba el de ella, tanto dio que la llevó, cuando estaba por dejarla, ella dormida insultando a su sugar, lo aló y lo abrazo tan fuerte que ya Anderson no quiso luchar, se quedó dormido siendo abrazado ella, más que como pareja, eran como dos hermanos, Anderson la había llevado de caballo y así quedaron, ebrios y dormidos.
Aron pidió que abrieran, ya sabían que era su hermano.
_¿Anderson?_
Aron tenía su corazón acelerado, tenía miedo a encontrar una escena para nada agradable, entró a la habitación principal y no había nadie, busco en la otra y sus celos se encendieron, viendo esa escena, los separó de inmediato.
_Por fin me sueltas loca._
Hablo Anderson medio dormido, no tenía ni ganas de abrir los ojos.
_Te odio Aron..._
Sofí pateó a Anderson haciendo que cayera al suelo, Aron no sabía si molestarse o reír.
_Que te pasa... ¿Hermano?_
Anderson se levantó algo sorprendido.
_¿Qué hacen?_
Grito Aron
_Nada, lo juro, ella llegó molesta y se embriagó._
_Cállate..._
La chica hablaba dormida, pero de golpe se levantó y sé vómito en la cama, su sugar la ayudaba, la tomo en brazos y la llevó al baño, ya Anderson se había salido, mejor les daba privacidad.
