LOS RUTTHERFORD - MATH RUTTHERFORD

Math subió al hombre moribundo al auto, este se despertó en el momento en que lo sentó en el asiento trasero, Samanta se subió en el lado del copiloto, luego Math se subió y encendió el auto.

-          Je… Jefa – le dice Richard aun aturdido- no siento mi rostro – le dice

-          Tranquilo cariño, iremos a una clínica – le dice volteándose para poder tomar la mano del hombre – estarás bien, eso corre por la cuenta de este tipo – dice Samanta mirando a Math, quien acelero el auto.

Llegaron a la clínica en cuestión de minutos, enseguida los empleados del lugar salió con la camilla para el hombre, lo ayudaron a salir del auto y lo subieron a la camilla, entraron al lugar para atenderlo, mientras Samanta y Math se quedaron en el área de espera.

-          Mira todo lo que causaste con tu bestialidad – le dice Samanta a Math una vez se quedaron solos en la sala.

-          Si no te anduvieras abrazando con ese tipo en el carro, yo no lo hubiera golpeado – le refuta Math

-          Ya te dije que él es gay, ¿Cómo podría tener un romance con él? – le dice

-          Pues yo no lo sabía Samanta – le dice comenzando a molestarse

-          Lo hubieras sabido de haber preguntado primero – le dice en el mismo tono de voz

-          Señor – le dice James llegando al lugar – vine lo más rápido que pude- le dice cansado.

-          Justo a tiempo diría yo – le dice Math caminando hacia el hombre alejándose de Samanta – Quieres explicarme por qué motivo no me explicaste la situación con ese sujeto – le dice en voz baja dándole la espalda a la mujer.

-          Lo siento señor – le dice el hombre

-          ¿Lo sientes?, solo me enviaste la ubicación de ese lugar, pero no me explicaste nada – le dice - ¿tienes idea de la vergüenza que pase? – le dice en reproche – necesito una mejor explicación James - le dice

-          Pues la cuestión fue que la señora me descubrió en el momento en que le enviaría las imágenes del parque con los niños – le dice el hombro – aunque tampoco espere que usted actuara de esa forma amo Math, le confieso que me tomo por sorpresa su comportamiento- en todos los años que James tenia trabajando para los Ruttherford desde que su amo Math tenía apenas unos tres años de nacido, no había presenciado tal conducta en él.

-          Esa no es excusa suficiente James, tu debiste enviarme esas imágenes antes de que yo tomara cartas sobre el asunto – le dice ignorando el comentario del hombre

-          Lo siento amo, la señora me mantuvo ocupado y se me fue imposible hacerlo – le dice

-          ¿Qué tanto hablan ustedes dos? – les dice Samanta molesta de cuchicheo de los dos hombres - ¿no tienen modales?, hay una persona aquí – les dice molesta.

-          Estábamos discutiendo sobre unos pendientes – le dice Math volteándose hacia la mujer – cosas que no son de tu incumbencia – le dice de forma cortante.

-          ¿Estaban hablando acerca de estas fotos? – le dice mostrándole las imágenes de Samanta y su personal en el parque de atracciones junto con los niños.

-          Pe… pero, ¿Cómo? – dice James sorprendido.

-          Es algo lento James – le dice Samanta – uno de mis chicos le quito el teléfono mientras estaba ayudando a repartir los jugos – le dice de forma astuta – habría sido un reto más interesante si por lo menos hubiera tenido bloqueo, pero resulta que el hombre es un libro abierto – dice sonriendo – me tomo solo cinco minutos espiar todo lo que quería y luego lo volvieron a colocar con su dueño, sin que este se percatara – James estaba boquiabierto

-          No… No sentí que me sacaran el teléfono en ningún momento – le dice a Math alterado.

-          Son mafiosos, prostitutas y personas del bajo mundo, obviamente tienen mañas – le dice Math a James – y esta mujer es la jefa de todos ellos – le dice Math señalando a Samanta

-          Exacto – le dice Samanta – aunque el más tonto fuiste tú por enviar a este pobre hombre a seguirme sin pensar en los posibles riesgos – le dice – en fin, el punto aquí es que, debes parar con toda esa ridiculez – le dice Samanta a Math poniéndose seria

-          Lo haría con mucho gusto querida, pero resulta que no confió ni un poco en ti – le dice Math – tienes demasiada reputación en el mercado del libertinaje y no puedo permitir que te vayas por ese rumbo mientras estés en este matrimonio, el apellido de mi familia está en juego y no pienso flaquear ni por un segundo contigo – le dice de forma severa – así que te aguantas – le dice viéndola de forma imponente

-          No he estado haciendo nada malo, estas imágenes hablan por sí solas – le dice Samanta comenzando a molestarse – tampoco he hecho nada que desmoralice tu tan apreciado apellido, así que ¿puedes dejarme en paz? – le dice

-          No me engañas, tal vez ahora no hayas hecho nada, pero quien sabe más adelante – le dice de forma incrédula.

-          Eres insufrible – dice caminando por el pasillo, alejándose del hombre

-          ¿A dónde vas? – le dice Math

-          ¡Lejos de ti! – le dice molesta mientras camina rápidamente.

-          Señor, ¿seguro que el asunto de seguir a la señora es solo por el apellido? – le dice James viendo a Math

-          ¿Qué otro motivo podría haber James? – le dice mientras observa a la mujer alejarse

-          Solo era curiosidad señor – le dice cerrando el tema, aunque la conducta de Math parecía mostrar algo más que simple preocupación por el apellido.

Paso aproximadamente una hora hasta que el doctor se acercó a ellos para informarles que ya podían pasar a ver a Richard, También les platico de su estado y condición. Por suerte no tenía mayor lesión que la inflamación y moretones por los golpes, aparte de que tenía el tabique de la nariz desviado, algo que ya había sido corregido con una septoplastia nasal, lo cual era una cirugía que les tomo casi cuarenta minutos dado el grado del daño en la nariz del hombre.

-          Muchas gracias por todo Doctor – le dice Samanta sonriéndole – ahora tú, ¿hacia dónde te diriges? – le dice a Math viéndolo pasar por un costado

-          Iré a ver al paciente – le dice Math - ¿te quedaras hay toda la noche sonriéndole al doctor? – le dice sin dejar de caminar

-          Ni creas que te dejare a solas con Richard – le dice Samanta siguiendo a Math, mientras este esboza una sonrisa al ver a la mujer caminar tras él.