Evan es un hombre que al perder a su amada trágicamente, la Diosa luna le concede la inmortalidad para volver hallarla y vivir su amor. Pero no es así de fácil como él cree, cada noche experimentará el dolor de cada herida causada por el paso de los años triplicada. Él tiene un tiempo límite para encontrarla, por qué si no morirá dolorosamente... Hasta que sus huesos sé hagan polvo, solo lo salvará la reencarnación de su amada utilizando el último brilló de la piedra lágrima de luna para volver a hacerlo humano y librarlo del dolor, ¿Pero qué pasará cuando después dos siglo logré encontrarla y no sea la misma mujer que una vez amo ?...
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CAP 22 Sangre
Fadel corre detrás de Isaac sin darse cuenta que Ayla había sido herida. Ayla solo lo observa irse sin darle tiempo de evitarlo.
Ayla siente un ardor fuerte y la sensación de un líquido caliente sale de ella, pero ella tiene la caja con la lágrima de luna en su contenido, se recuesta en una pared y cae lentamente sentada el pavimento de ese callejón bañada por un sol suave, con algunos charcos de agua producto de la torrencial lluvia de la noche anterior.
Ayla solo se lleva su mano hacia la área del abdomen en donde fue herida, haciendo presión en ella, sus manos se manchan de sangre, mientras ella hace presión soportado el dolor, ella solo se quita la chaqueta de cuero, para alzar el suéter de color gris claro con la imagen de goku observando la pequeña herida que no dejaba de sangrar, en ese instante Fadel corre sudado y agitado, pero había perdido a Isaac, Fadel llega al lugar donde había dejado Ayla antes de salir detrás de Isaac, Pero no la ve, solo manchas de sangre y gotas hasta seguirlas, con su respiración agitada, sigue las gotas de sangre hasta visualizar Ayla con sus manos manchas de sangre sosteniendo la herida de su abdomen. Fadel corre, se agacha lleno de preocupación a auxiliarla al ver la sangre
Fadel: ¡Ayla!, No te preocupes llamaré a emergencias, resiste amiga. —Sus manos tiemblan al sacar el teléfono sin saber que hacer el miedo lo invade, Pero trata de marcar el número, Pero las manos sangrientas de Ayla se lo impiden. Con su cuerpo débil y un tanto pálida, ella mueve la cabeza.
Ayla: No lo hagas... — Mueve la cabeza negando.
Fadel: No puedo dejarte así... Necesitas ayuda no quiero que mueras... Eres muy importante para mí — Llora de impotencia y sin saber que hacer para ayudarla
— Solo Déjame llamar— Suplicando Ayla que solo sostiene su herida, su mano está manchada de sangre. Únicamente sonríe aún que el dolor la consume, Ella sabe que su cuerpo no resistirá mucho.
Ayla: No llore, solo se que voy a morir... Esta es solo una herida, no me matará, pero el veneno que habita en mi cuerpo si, se que mi final está cerca y no quiero morir en un frío hospital... Solo ayúdame a detener la sangre, para devolver la piedra.. Ve yo te esperaré... Tranquilo no iré a ninguna parte... —sonríe como siempre y el dolor la consume.
Fadel: Como me puedes pedir eso... Solo déjame llevarte al hospital manita...¡ si! y no diga eso tú no vas a morir aún eres joven. No puedes dejarme solo eres mi única familia...— Ella sonríe,
Ayla: Mi hermanito, solo hazlo... —Queriendo llorar
Fadel: (observa la caja que está en sus manos. )
Ayla: Esta caja es lágrima... de luna que quería robar Isaac— Sus palabras se entre cortan por el dolor
Fadel: Entonces usala ¡si! y te sanarás. Tratando de tomar la caja, esperanzado.
Ayla: No lo haré, recuerdas que la piedra está débil si yo la uso Evan No podrá salvarse, ahora que apareció ella para completar el ritual y él pueda vivir no la utilizaré. Solo ve atraer unas gasas o unas vendas algo para desinfectar la herida, sí... O quieres que muera aquí.— Fadel sin opciones solo corre en busca de una farmacia. Ayla solo presiona la herida y abre la caja observando el pedazo de piedra en su contenido. Una parte de ella quiere tocarla, pero no se atreve, Aunque esté tentada hacerlo, solo puedo pensar en Evan, en que él también la necesita si no él va a morir, y solo al recordar cuánto ha sufrido los dolores que ha aguantado, por muchos años; ella siente que él la necesita más que ella. Aunque en un principio ella quería conseguirla para salvarse, pero al darse cuenta que si ella la utiliza, él no la podrá utilizar, y ella solo desea verlo feliz porque se da cuenta que lo ama con toda su alma. Sin embargo, nunca fue capaz de decírselo tal vez porque ella siempre sube que no era la indicada para él. Ayla la observa, Por un instante siente la sensación de tocarla al acercar su mano llena de sangre un poco temblorosa por el dolor, pero no era más que el que sentía su alma. La piedra empieza a emitir una luz tan resplandeciente que la hace querer tocarla...
No obstante ella se niega a hacerlo y solo cierra la caja. Al escuchar unos pasos ve a Fadel totalmente sudado con dos bolsas en la mano, saca botellas de agua y empieza a lavarse las manos, Ayla levanta su suéter, Fadel trata de limpiar la herida, para luego introducir en ella un pedazo de gasa, para evitar que se desangre y haciendo presión empieza a vendar lo más que puede. Las manos de Fadel tiemblan al ver la palidez de Ayla y la sangre que ha perdido...
Fadel saca un suéter un poco grande con el nombre del pueblo en él de color negro, porque sabía que es el color favorito de Ayla. Ella se cambia usando el agua para limpiarse la sangre, de su cuerpo lo más que puede, Fadel venda la mano de Ayla la cual también tenía una cortada, pasado un tiempo Fadel recoge todo lo que estaba sucio de sangre y lo arroja en un contenedor de basura, para ayudar a levantar a Ayla, pero el dolor en su abdomen no la deja, pero aún así ella lo hace hasta ponerse de pie tomando la chaqueta, que es pasada por su amigo, así Fadel la ayuda sosteniéndola para caminar y salir de ese callejón. Ella solo pensaba en devolver la piedra para poder irse y verlo a él aunque sea por última vez .
Mientras tanto Evan y los demás regresan a casa Pero esta vez Amaya venía con ellos con uno sus pies vendado producto de una supuesta caída. Evan se encontraba tan débil, más el dolor que habían en su cuerpo trataba de controlarse, pero aún así no podía, sin embargo, su dolor físico no era tan fuerte como el que sentía por la ausencia de Ayla, y el solo pensar en tenerla a su lado y al no tenerla le hace sentir una angustia de perderla todos llegan a la mansión Evan tienen que ser ayudado a bajar del auto, por Igor, su cuerpo está demasiado débil que no tiene la fuerza para sostener por su cuenta de pie, aunque trata de controlar y resistir el dolor que es como si mil alfileres se han incrustado en su cuerpo, pero aún así sigue soportando con la esperanza de que Ayla lo esté esperando. La señora Regina baja del auto y ayuda a Amaya a bajar de él pues cojea, pero ella solo puede mirar a Evan en su estado. Igor y Evan sujetado por él, llegan a la entrada notando a la puerta totalmente abierta y gotas de sangre lo cual generó un mal presentimiento, Igor y Evan entra caminando hasta el sofá de la sala sentandolo en el . Los demás entran observando los rastros de sangre que siguen hasta las escalera.
Fadel: ¡Todos ustedes! quédense aquí iré a revisar las cámaras y a revisar que nada falte...— Evan solo cae en el mueble tratando de soportar el dolor aunque Amaya sostiene su mano y lo anima no se siente igual que cuando Ayla se acercaba a él que solo con su presencia lo aliviaba instantáneamente.
Igor sube las escaleras siguiendo los rastros de la sangre hasta hallar la puerta abierta la cual tenía la cerradura digitalizada él entra encontrándose una cantidad de vidrios sangre y el rastro de que hubo una especie de lucha empieza a buscar la caja donde guardaba la piedra, pero no se encontraba ahí, bajando a toda prisa le informa a los demás que la piedra se la han llevado.
Mientras que Evan intenta de levantarse, pero sin lograrlo. Igor pide que cuidan a Evan mientras él revisa las cámaras para ver si hay algo para poderle recuperarla, subiendo las escaleras.
En ese instante Fadel y Ayla llegan a la propiedad, ellos notan el auto de Evan al frente de la mansión, lo cual les da a entender de que él se encuentra ahí, Ayla camina con dificultad y un poco débil y pálida. Mientras que Fadel se encuentra lleno de preocupación tratando de convencerla, siendo su apoyo para ayudarla a caminar.
Ella se rehúsa a usar la piedra o ir al hospital, al estar ambos en la entradas de la mansión, Ayla se aleja de Fadel para caminar por su cuenta. Al subir los escalones siente un inmenso dolor que amenaza por caerse, pero Fadel la sujeta ayudándola a subir, cuando están en la entrada de la puerta solo escucha las voces de preocupación. Ella solo mira la caja que sostiene. Suspira tratando de mostrar su mejor cara y verse lo más bien y normal posible, camina lento, tratando de ocultar el dolor mientras la herida aún sigue sangrando ella se da cuenta de eso y la cubre con su chaqueta, para dar unos pasos .. Hasta encontrar todos en la sala, al verla Clarissa corre hacia ellos, llegando hasta Ayla. Ella solo sonríe, pero Clarissa la observa y sabe que algo le pasa pues está demasiado pálida y sus manos están demasiado frías más tiene una venda en su mano, pero reconoce la caja que tiene en sus manos.
Clarissa: ¿Qué ha pasado?¿ qué te ha sucedido? ¿porque estás tan fría y por qué Tú tienes la caja con la lágrima de luna?. Ella sonríe, evitando las tantas preguntas que Clarissa le hace, observando su cara ansiosa, confusa, pero al mismo tiempo refleja preocupación. Ayla la hace a un lado para seguir caminando observando a Evan que se levanta con su cuerpo débil mirándola quiere caminar hacia ella, pero la señora Regina lo detiene evitando que se caiga.
Evan: Ayla... has vuelto— con su voz entrecortada pero sintiendo que una parte de él había regresado al ver a Ayla, pero había algo diferente en ella se veía la palidez en su piel, sus ojos se veían cansados y ella extrañamente caminaba lento tenía una venda en su mano que se manchaba de sangre, pero aunque aparentaba estar bien en sus rostros era evidente que había una tristeza en ella que trataba de ocultar.
Ella se acerca un poco a él mientras Fadel está detrás de ella Clarissa trata de hacerle preguntas pero Fadel solo niega con su cabeza y solo se preocupa por Ayla temiendo que se desplome en cualquier momento porque había perdido mucha sangre y se negaba a recibir ayuda.
Ayla: Hola a todos solo vine a despedirme de ustedes y espero que no me odien por lo que les voy a decir... Y puedan perdonarme la razón de las que me acerqué y acepté estar cerca de Evan. Es porque quería conseguir la lágrima de luna por cuestiones personales, pero me he dado cuenta que nada sirve robarla igual forma solo, es una piedra inservible, que no me puede ayudar...— se acerca a Evan que la mira sin entender cada una de sus palabras,
—Lo siento por usarte espero que me perdones— Pone la caja en las manos de Evan, El solo la Mira sin entender lo que pasa sintiendo el tacto frío, El trata de sujetarla, pero ella solo le entrega la caja quitándose el anillo que él le había dado y poniéndolo sobre la parte superior de la caja.
—Lo siento de verdad, lo siento a ella le pertenece No a mí siempre fue así.— sintiendo el dolor de cada una de sus palabras que luchó para que salieran, mientras sentía ahogarse con su propio dolor, solo suelta a Evan da la vuelta, sin mirar atrás ni a nadie. Ella camina hacia la salida, Pero la señora Regina la detiene tomando una de sus manos,
Regina: Hija Solo dime lo que pasa. Yo puedo reconocer cuando una persona miente y tú lo estás haciendo ahora tus ojos solo muestran dolor y por qué estás tan fría. — Ella sonríe pues siempre ha sido la máscara que siempre he usado aunque le duela siempre va a sonreír, aunque por dentro esté deshecha y solo quiera llorar y sienta que va a caer ahí de lo débil que se siente, solo sonríe es lo única máscara qué puede hacer ante la adversidad y la vida, solo se libera de la señora Regina quitando su mano lentamente para soltarla
—Lo siento, por favor cuídalo— Ella solo camina, con un dolor en su alma, que siente que no puede respirar, con el miedo desmoronarse ahí mismo, saca fuerza para caminar, pero el dolor del alma es más fuerte que la adormece su dolor físico. ella no puede evitar que sus lágrimas caigan Al escuchar los gritos desgarradores de Evan al gritar su nombre.
Evan tratar de caminar para alcanzarla, pero es detenido por Amaya que no lo permite, pero él sin importarle nada empuja Amaya haciendo la caer en el suelo, para seguir Ayla que está por cruzar la puerta, pero él solo cae tosiendo sangre con la caja en sus manos desvaneciéndose al instante.
Mientras todos corren auxiliarlo. Ella solo sale de la mansión, sube al auto como puede Fadel empieza a conducir, ella empieza llorar como nadie lo a hecho, Fadel conduce pero deteniendo el auto con el dolor en el alma al ver el estado de su amiga, pero él revisa la herida de Ayla, está completamente llena de sangre, al instante que el la mira ella se desvanece.
Empieza a conducir con una mano tratando de hacerle presión a la herida de Ayla, para llevarla hacia una cabaña en el bosque que Ayla había preparado con anteoridad, donde Cairos los esperaba con un médico, pero sin saber que la fecha límite de Ayla está por expirar no en días si no en horas...
Y con muchos nervios.
y ahora que va a pasar