Bella Idiota

Luego del revuelo que se formó por el secuestro fallido de Michele, la mansión volvió a quedar en calma. El pobre Sorrentino tuvo que pedir permiso a Michele para poder salir con su Nanny.

Sorrentino se fue de la mansión Morante con una sonrisa de tonto, esperando con ansias que sea viernes.

- Ahora sí, nos vas a contar qué es eso de que Sorrentino quedó tan fascinado contigo. - preguntó Fátima.

- Ese viejo descarado como que es masoquista, le di una bofetada que se le volteó la quijada y ahora anda disque enamorado. - cuenta sonrojada.

- ¿Y a ti te atrae el viejo sobrosón? - pregunta Tina con picardía.

Chloe suelta una risilla, Fátima y Tina le hacen una bulla por lo evidente.

- De corazón me alegra que por fin alguien te atraiga, solo espero que ese mañoso de Sorrentino te sepa valorar. - habla Fátima, sinceramente feliz por lo que les contó su amiga y nana de su hijo.

La rubia pasó a la habitación de su hijo, donde ya el jovencito se encontraba dormido, le dio un tierno beso en la frente y salió, agradeciendo a Dios que el susto haya pasado, pero en su corazón se mantenía presente esa sensación de desasosiego de estos últimos días.

- Si queremos obtener todo el dinero del idiota de Guido, debemos acabar pronto con la ramera de Fátima, esa mujer siempre fue una piedra en el zapato para mí, antes cuando de verdad amaba al imbécil ese, y ahora que lo que anhelo es su cuenta bancaria. - le dijo Marietta a su amante - Lo bueno es que tenemos de nuestro lado a la vieja idiota de Xica, que está convencida de que somos aliadas.

Las dos mujeres reían disfrutando de unas copas de vino.

Se habían conocido hace ya 5 años en una exposición de arte, donde Marietta fue como invitada y Adreana era la modelo del artista exponente.

La atracción entre ambas era latente, por lo que se comenzaron a conocer, primero una amistad, luego fue algo más. Para Marietta era algo nuevo todo aquello, pero se sintió a gusto con la joven.

Entre las dos planearon vengarse de Guido y de Fátima, para Adreana era inconcebible que el trigueño rechazara a Marietta por una mujerzuela como Fátima, que según ella, no le llegaba ni a los pies a su amada.

.....

Xica estaba sonreída con una auténtica cara de maldad, ya por fin había conseguido a quien se haría cargo de desaparecer a esa víbora y a su engendro, solo esperaba que todo saliera como lo estaba planeando, ya se había enterado que el ex amante de esa fulana, había secuestrado al bastardo, pero él mismo lo había liberado.

En el corazón de la mujer, el odio estaba a rebosar, un grave error que le costará bastante.

.....

- Buenos días mi bebé. - saluda Fátima ingresando a la habitación de Michele quien ya se estaba alistando para ir a su escuela - Hoy no irás a la escuela, ya llamé al rector y te excusé, nos iremos de paseo a La Toscana, tu papá irá con nosotros, aprovechando que mañana ya inicia el fin de semana.

- ¡Yupi Mom! - hace un urra.

La pareja y su hijo, salieron en uno de los carros del trigueño, serían casi tres horas de viaje, por lo que ir en carro no resultaba tedioso, como tampoco aburrido, ya que los paisajes eran divinos.

Madre e hijo venían cantando por todo el camino, la música favorita del casi adolescente. Guido estaba feliz de ver a su hijo libre y disfrutando de ese momento de familia, ajeno a los planes macabros de su madre y de su ex.

Al llegar a La Toscana, condujo por un camino un poco inclinado, llegando a una hermosa propiedad.

La casona se veía clásica, pero a la vez moderna, el lugar gritaba lujo y confort.

- ¿Les gusta? - preguntó el trigueño a ambos.

- Es hermosa. - dijo Fátima.

- Está genial, Dad, ¿de quién es? - habla Michele.

- Pues es mi primer obsequio para ti, este será tu lugar de escape y refugio, cada persona necesita uno. - habla como si nada el hombre.

Madre e hijo estaban sorprendidos, jamás imaginaron que Michele recibiera un obsequio de tamaña magnitud a sus escasos 13, casi 14 años.