Mi Vida, En Una Flor?

David es quien me guía para escoltarme hasta Adam quien ya está parado en el altar improvisado, mi vestido negro con el gordo dorado resplandece cuando la luna se posa sobre mi. Esto es perfecto, no había dudas, lo amaba y hoy por fin sería suya, suya gracias al Máximo Florista.

- Bien, esto será breve pero con toda la gracia y gloria del arcoiris.

-Princesa Violet de Cerezo acepta desposar al joven Adam de la Tierra, quien ha cautivado su corazón y quién está dispuesto a sacrificarse por usted si los tiempos se tornan oscuros?

-Acepto y doy gracias al arcoiris por haberme enviado alguien tan maravilloso como lo es Adam.

-Joven Adam de la Tierra, acepta a la princesa Violet de Cerezo para ser su protector, su apoyo, el padre de sus hijos y dejar que ella ilumine cada día de su vida?

-Acepto porque desde que la conocí supe que solo ella me entendiera.

-Si no hay objeciones ni contratiempos, por el poder del arcoiris yo los declaro un solo ser desde este momento sagrado. Pueden besarse.

Nuestro beso fue suave, cálido,tranquilo y después de eso pude sentir un calor recorriendo mi cuerpo, las piedras mágicas estaban resplandeciendo como nunca lo había hecho y después todo su brillo se apagó.

-Que ha ocurrido David?

-No estoy muy seguro pero quítate todos los objetos de magia e intenta lanzar un hechizo.

-De acuerdo.

Tras hacer lo que David me pidió intente hacer una lluvia de pétalos de rosas y lo logre.

-Ya veo -dijo David- la magia de los brazaletes se ha funcionado hacia el interior de tu cuerpo tras haber sido bendecida con tu matrimonio. Ahora ya no necesitas usar más brazaletes.

-Eso, eso es increíble pero que hay de Adam?

-Creo que yo no tengo magia pero no importa, ahora que se pelear te voy a proteger y defender siempre aunque se que tú sola eres muy capaz de valerte.

-Gracias. Ahora sí estamos listos para lo que se avecine.

Una vez casados y con la magia fluyendo por mis venas estaba preparada para enfrentar a Lorelei o a quien quisiera hacerme daño.

-Bien, vamos al laboratorio Violet, debo hacer nuevos brazaletes para que Adam también tenga magia y tú debes tener un clon. No podemos darnos el lujo de que algo te pase y nos deje sin ti, entendiste? Cuando las cosas vayan mal en una pelea jurame que vas a intercambiarte por el clon

-Si, te lo juro David, pero si algo me pasa ahora Cerezo no está desprotegido, Adam es ahora su rey y mientras el viva nadie podrá hacerle daño a este reino.

-Asi es, me he casado con Violet para estar cuidándolos cuando ella legue a faltar que espero sea dentro de muchos años.

Hacer un clon era muy fácil, David solo necesitaba mi sangre para hacerlo pero el único cambio que había eran los ojos, para distinguir a un clon de un humano ellos tenían los ojos de colores así como el arcoiris.