Gracias a un matrimonio forzado, después de 2 años Valentina por fin siente libertad.
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Capitulo 22
No podía creer que las cámaras no hayan captado nada, al parecer todo se daño justo ese día.
Diego... Alguien que me explique, ¿Porque no hay grabaciones justo de la mañana?
Seguridad... Lo siento señor, pero al parecer una de las cámara falló .
Diego... Esa no es una excusa, quiero para hoy mismo a la persona encargada de los videos.
Valentina... No es obvio? Se encargaron de todo, pero tengo mis sospechas.
Seguridad... En seguida llamo al servicio técnico para que se encargue de restaurar toda la información..
Diego... espero y esta vez hagan bien las cosas, si descubro que alguien de la empresa está implicado, se las verá conmigo.
Hasta no estar segura de mis sospechas, haré como si no me importara.
Diego... Puedo saber de quien sospechas?
Valentina... Claro, pero jamas vas a poner en duda la palabra de ella en comparación a la mía, así que da lo mismo ¡si te lo digo, como no te lo digo!
Diego... Tú palabra me es más importante que la de otra persona..
Valentina... Ja, entonces querido ex esposo, si te dijera que la persona quien tomó mi boceto es tu querida Dina ¿Me creerías?
Diego... ¿Dina? ¡Por favor Valentina, ella es la menos implicada en esto, seguro fue alguien más, pero Dina nunca haría algo así!
Valentina... Como veo que mi palabra no te sirve, entonces haré de cuenta que alguna vez tuve esta charla contigo, - ¡a por cierto, tengo una curiosidad! ¿Por qué tanto la defiendes?
Diego... Ese tema no es asunto tuyo, y si te recomiendo que veas en otra dirección..
Valentina... Veo que es más importante para ti de lo que me había imaginado, muy bien, entonces no tengo nada de que hablar contigo.
Diego... Valentina, hay algo de lo que me gustaría hablar contigo, es acerca de Sebastián.
Valentina... ¿Que quieres con mi hijo?
Diego... Quisiera pedirte permiso para poder llevarlo al parque de diversiones, creo que necesita ver una figura paterna y yo no tengo ningún problema en que me vea como un padre.
Valentina... ¿Y quien te crees que eres tú para intentar ser una figura paterna para mi hijo?
Diego... Escúchame, quiero cambiar, quiero que veas en mi otra persona que...
Valentina... Claro, ¡quien no cree en mi palabra!, y pues fíjate que a mi hijo no le hace falta nada, él ya tiene un padre y ese no eres tú, permiso.
*Con cara de frustración Diego maldice todo tipo de blasfemias, al no poder lograr demostrar que Sebastián es su hijo, él lo piensa y siente en su corazón que así es.
Por otro lado, no puede creer que Dina sea quien haya tomado el boceto de Valentina, ya que es la persona en quien más él confía, según así lo piensa, por haber sido aquella chica que lo ayudó cuando él más lo necesito.*
Pero quien se cree que es para decirme eso, después de creer en la palabra de otra persona y no en la mía, así mi venganza no llegará a nada, por ahora demostraré que su querida Dina fue quien lo tomó, después empezaré con mi propósito.
*Mientras Valentina busca pruebas, un Sebastián listo para darle una lección a su padre, emprende su primer paso.
Pensamientos de Sebastián..
- Ahora veremos de lo que eres capaz papá, si fuiste valiente para abandonar a mamá, espero y seas valiente para salir de mi trampa.
*A que nadie sabía que a una edad tan pequeña sea un experto en manejar todo tipo de aparatos electrónicos como una computadora, todo lo aprendió en sus tiempos libres, haciéndose conocer como el mejor pirata cibernético.*
*Tecleando un sinnúmero de códigos, logra entrar en el sistema de la compañía de su padre, instalando un virus que no podría ser fácilmente eliminado, ni los hackers más avanzados lograrían eliminarlo, a excepción de él, ya que era su propio virus.
Pero antes de que se termine de enviar el virus, se aseguró de husmear por las cámaras de seguridad, logrando ver algo que ni él mismo Diego Gamier había logrado ver.
Por lo que rápidamente lo descarga y listo, trabajo terminado.*
- Esperemos y veamos...
Al siguiente día...
Técnico... Señor el sistema a sido hackeado, no podemos con el virus es muy poderoso, temo que la base de datos se haya dañado.
Diego... Maldita sea, ¿Quién se atrevió a hacer algo así a mi empresa?
- Logra averiguar de donde proviene y contáctate con quién lo haya hecho y veamos que es lo que quiere.
Técnico... Si señor, pero por ahora no hay mucho por hacer..
Diego... Busca la manera, contrata más personal si es posible, pero quiero solución ya.
Todos en la empresa estaban como abajeas revoloteando su colmena, si bien se sabía la empresa contaba con la mejor tecnología del mundo, y una crisis así, solo significaba que una serie de problemas se avecinaban.
Sebastián por su parte no pudo evitar sonreír en todo el día, su felicidad era notoria, incluso su abuelo lo pudo notar.
Héctor... ¿Podría saber por qué mi nieto favorito está muy feliz?
Sebastián... Abuelo soy tu único nieto.
Héctor... Eso si tienes razón, ahora dime que te tiene tan feliz..
Sebastián... Es un secreto abuelo, pero pronto te lo contaré..
Héctor... Ok niño astuto..