Olvidada

Después de ver partir a la princesa Majic, el rey Fortem regresó al palacio, Lady Zarila estaba en la puerta esperando en el carruaje y Tesko se acercó al monarca mientras bajaba del caballo.

- "¿Qué fue todo eso?, irse así por esa...", increpó Tesko al rey.

El rey Fortem empujó a Tesko al suelo, los guardias se sorprendieron, Lady Zarila que estaba en el carruaje se asustó y no pudo evitar temblar.

- "Que sea la última vez, que te refieres a la princesa Majic con desden, ¡y va para todos!, (respiró profundo) la princesa Majic es la esposa principal del rey de Fontana, y ofenderla es lo mismo que lo hicieran conmigo, si aprecian sus vidas es mejor que cuiden como se dirigen o hablan de ella", expresó el rey con rabia, quien siempre se había mostrado controlado y sereno a pesar de las circunstancias, no se puso freno alguno, para expresar la frustración que sentía, estaba en una lucha de aceptar lo que ha ocurrido, o rechazarlo y aceptar lo que debió ser.

Luego de ello, el rey subió al carruaje con Lady Zarila, y Tesko tuvo que aguantarse la rabia de lo ocurrido, estando más seguro que antes, que la menuda princesa de Susumira se había ganado el corazón del rey, sin que el mismo monarca se haya dado cuenta todavía; y con esa debilidad buscaría la manera de hacerle pagar la humillación.

En el carruaje, Lady Zarila no sabía ni qué hacer ni qué decir, nunca había visto al rey tratar así a Tesko; sus manos temblaban aún, por un momento cuando vio al monarca tirar al Consejero Real al suelo pensó que había descubierto toda la verdad.

- "Sé que debería pedirte disculpas por dejarte sola en la iglesia después de la boda, pero significaría que me arrepiento de lo que hice y eso sería una mentira, el engaño es algo que detesto; te voy a ser sincero Zarila, hasta poco más de un mes creí estar muy enamorado de ti, sabes que mi sueño era convertirte en mi esposa, la única y para toda la vida; no sé exactamente cuándo ese sentimiento cambió, aunque ahora te tengo un cariño especial, no es ese amor que tal vez estes esperando de mí, lo único que puedo ofrecerte ahora es una amistad sincera, lamento profundamente lo que pasó esa noche y si pudiera la cambiaría completamente, para que hubieses podido conocer a alguien que pudiera darte todo lo que mereces", dijo el rey.

Fortem quería ser completamente sincero con la mujer que fue su primer amor, pensando que ella seguía siendo la dulce muchachita de la que se enamoró hace diez años; sin embargo, ella había sucumbido al bien armado plan que hizo Tesko para seducirla, aprovechando su juventud e inexperiencia; cuando vio al rey defender el honor de la princesa Majic hace unos instantes, supo que la decisión que tomó hace años había sido un error, el rey podría ser fiero y frío en muchas ocasiones, pero era leal y protector, y empezó a arrepentirse de haber entregado más que el corazón a la persona equivocada.

- "Tendrás mi protección siempre, y puedes contar conmigo si se te presenta alguna dificultad, seré un gran amigo si me lo permites; pero, es todo lo que habrá entre los dos, no puedo dejar que piensen mal de ti cuando el culpable fui yo, así que te llamaré esta noche; sin embargo, no ocurrirá nada entre nosotros, ni hoy ni más adelante; sé que te estoy lastimando con mis palabras, solo que no puedo mentirte ni ilusionarte. Mañana emprenderé una serie de viajes alrededor del reino, para garantizar que la reconstrucción de nuestra nación, se lleve a cabo de la mejor manera; confiaré en tu inteligencia, bondad y prudencia para que te encargues de la administración interna del palacio; hasta que la princesa Majic retorne a tomar el lugar que le corresponde, serás la responsable de organizar la casa real", dijo el rey, para luego ordenar al cochero que avance.

- "Es cruel conmigo, debió dejar que me condenaran a muerte, una cosa era estar sola en la vida, y otra estar sola cuando los demás suponen que me encuentro en compañía; haré lo que me pide porque no tengo más opción su Majestad, pero no le voy a perdonar el daño que me ha causado", expresó con mirada de decepción, si lastima era lo único que podía inspirar en el rey entonces lo haría sentir miserable.

El coche se detuvo y el rey ayudó a bajar a Lady Zarila, saludaron a todos, y siguieron con la ceremonia, era imposible para el rey ocultar su tristeza de saber que la desgracia había cambiado las cosas; mientras que su segunda esposa, trataba de verse feliz y emocionada.

Por otro lado, en Reviere el príncipe Josag estaba en el jardín, dando los únicos pasos que podía dar durante el día, aún con dolor él caminaba descalzo en el pasto para no atrofiar sus piernas.

- "A mí también me gusta sentir el pasto bajo mis pies", dijo tímidamente Majic.

- "No hago esto por gusto sino por necesidad, sería mejor para ti, mantenerte alejada de mi, no esperes que sea un gran amigo tuyo, seré cortez no un ángel", dijo el príncipe con tono frío.

- "Aunque hablo este idioma hay cosas que no entiendo, aún si, escuché que mi padre mató a los tuyos, en verdad lo siento, mi madre murió cuando tenía ocho y es un dolor muy grande; pero dice Lady Marila que yo no soy mi padre y que los demás no debemos cargar con las culpas de otro, si eres hermano del rey entonces también debes ser amable, gracias por la habitación, era lo que quería decirte"; expresó Majic con total sinceridad, y esa mirada cálida que dejaba ver su interior.

El príncipe Josag no dijo nada y ella se dió media vuelta para regresar a la casa, pero unos segundos más tarde, la princesa dió un grito desesperado; una serpiente levantó la cabeza y parecía ir a morder, sin entender la razón, porque con el odio que sentía hacia su padre tal vez debía dejarla morir, el príncipe Josag corrió hacia ella, y con una piedra atacó a la serpiente.

- "Ya está, deberías tener más cuidado, deberás aprender a cuidarte de ellas", dijo el principe.

Sin embargo, el príncipe Josag al voltear notó que la princesa Majic había palidecido y estaba en shock; la tomó de los hombros y la sacudió delicadamente.

- "Está bien, ya pasó", expresó el príncipe con una voz más serena.

- "Gracias", respondió tímidamente Majic.

El príncipe vio como unas ligeras chispas en los ojos de la princesa, y mientras seguía sosteniendo sus hombros, sintió como un ligero golpe de electricidad recorrió su cuerpo; ambos se quedaron mirando por largo tiempo.

Al ver que la princesa lo quedaba mirando perpleja, se acercó bastante a ella, teniendo casi sus frentes pegadas.

- "No te puedo gustar, soy el hermano de tu esposo"; dijo el príncipe Josag con una sonrisa.

Majic se puso completamente roja y se fue velozmente a casa; el príncipe se rió de la inocencia de la niña que no entendió su broma; empezando a caminar hacia su silla de ruedas, cuando llegó a ella, se dió cuenta que las piernas no le dolían, que había corrido para atacar a la serpiente y había regresado al mismo lugar, sin ningún problema, ¿qué es lo qué está pasando?, pensó.