Charlotte que fue engañada por el hombre que juraba amarla, vuelve en el pasado para cambiar su pasado y proteger a su esposo, a quien ella mato con sus propias manos tras haber sido manipulada.
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capítulo 21- Carta
La familia real se podía divorciar, las condiciones eran simples, siempre y cuándo no había hijos entre medio, sin hijos podrían divorciarse sin problema alguno, pero fuera de otra manera no había opciones de divorcio.
Charlotte mira el rostro de Killian quien se encuentra dormido a su lado, después de horas de pasión.
— Sé que sin importar lo que haga no voy a obtener tu perdón. — Sonríe con tristeza besando la frente del hombro. — Y lo mejor que puedo hacer es alejarme para ya no hacerte dañó Killian. — Sin poder evitarlo, las lágrimas comenzaron a deslizarse en su mejilla. — Pero es más difícil de lo que pensaba. — Nunca pensé qué llegaría amarte de esa manera, pero tienes razón, tienes todas tus razones de estar así conmigo.
Ella sabía que no tenía derecho de reclamar ni menos suplicar el perdón de killian, cómo bien lo dijo él, si Edwin no la hubiera traicionado regresando al tiempo, ella hubiera seguido actuando como una estúpida.
— Señorita. — Escucha la voz de Valeria tras tocar la puerta. — ¿Se encuentra lista? Ya es hora de irnos.
— Dame unos minutos más. — Musitó siendo escuchada por su doncella. Charlotte se levanta con dificultad, mientras comienza vestirse, no sin antes de observar las marcas notorias que había en su cuerpo, recordando todo lo que acaba de pasar.
Flashback
— Hubiera deseado jamás recordar. — Bramó el emperador mientras le quitaba la ropa besando el cuello de Charlotte, dejando marcas de manera brusca.
— Killian. — Intenta calmarlo, tomando del rostro, sin embargo, él la rechazó sin dudarlo.
— No te he dado el permiso de tocarme. — Gruñó este tras tomar sus manos y ponerlas encima de su cabeza.
— No hagas eso. — Niega aguantando las lágrimas. — Si vas a actuar de esa manera estando así, detente y déjame ir. — La indiferencia de Killian era algo más doloroso de lo que creía. — Lo siento, realmente lo siento, jamás podré encontrar las palabras correcta para pedirte disculpas, pero no me alejes de esa manera. — Sus sentimientos terminaron de traicionarla
— Cariño. — Al ver el rostro llenó de lágrimas, Charlotte no pudo evitar sentir una sensación en el pecho. Besando donde dónde caían las lágrimas de la chica. — Perdóname, no quise hacerte llorar. — Hunde su rostro en el cuello de Charlotte y las lágrimas lo terminaron de traicionar de igual manera. — Simplemente, no sé cómo llevar esto. — Abraza a Charlotte con fuerza. — No sé cómo continuar con esos recuerdos. ¿Qué hago? Dime que hago Charlotte.
— Perdóname. — Fue lo único qué pudo susurrar tras sentir las lágrimas de killian en su hombro, no solo ella estaba sufriendo, él estaba sufriendo también, no imagina lo doloroso que es para killian tener esos recuerdos. Podía imaginarlo con solo ponerse en su zapato.
Habían pasado varios minutos y ambos habían comenzado a repartir besos.
Charlotte trataba de seguirle el ritmo a Killian mientras qué este poco a poco le iba desvistiendo hasta que ella quedó totalmente expuesta para él.
Killian se encargaba de repartir beso en cada rincón de Charlotte sin saltarse cada detalle.
La chica solo jadeaba ante aquel tacto.
— Ah… — Gime, tras sentir cómo esté la embistió, comenzó un vaivén rápido y profundo que dejaba a la chica extasiada de placer.
Charlotte se había desmayado tras sentir cómo el pelirrojo eyaculaba en su interior una cuarta vez.
Fin Del Flashback
Mueve su cabeza aun lado, ya casi amanece y debe irse antes de qué killian despierte, ella sabe que lo mejor es alejarse y darse un tiempo; Sin embargo, si Killian decide mandar los papeles de divorcio lo firmará cómo debe ser.
Deja la carta que ha escrito para él en el borde de la cama.
Se termina de vestirse, acercándose nuevamente a este con leve sonrisa, dejando un suave beso sus labios antes de susurrar aquellas dos frases.
— Te amo. — Dicho esto se alejó dirigiéndose a la puerta, tras salir lo cierra silenciosamente.
...Marquesado. ...
— Hija. — El marqués mira su hija con sorpresa, cuando recibió la noticia de que su hija estaba aquí en la madrugada no se negó a creerlo, pero ahí estaba Charlotte.
— Papá.
— Mi pequeña. — Este abre sus brazos y Charlotte no duda un segundo antes de correr abrazarlo.
El marqués sabía qué algo había pasado, pero al ver su hija tan vulnerable en ese estado no fue capaz de preguntar y solo la acompañó a descansar, quien se durmió tras recibir unas palma ditas en el hombro.
— Quién diablos se atrevió hacer llorar a mi pequeña, — Sin duda para el marqués, Charlotte era su todo, era el único regalo que le había dejado su amada esposa y por eso se había encargado de cuidar a su hija para que jamás saliera lastimada; Sin embargo, hoy su hija llegó llorando y sabía muy quién podría ser el culpable.
“Esperó que tenga una buena explicación qué darme su majestad” Mira por última vez a Charlotte, la cual está profundamente dormida antes de retirarse.
El sol iluminaba todo el palacio, doncella tras doncella se encontraba moviéndose, para atender a sus respectivos amos.
Killian se mueve en la cama y lo primero que hace es buscar aquella persona que siempre ha estado su lado por las mañanas, pero no importaba cuándo buscaba con sus manos, el otro lado de la cama estaba vacía.
— Charlotte. — Abre sus ojos de golpe, mirando a su alrededor la chica no estaba por ningún lado. — Cariño. — Sisea esperando alguna respuesta, pero en aquella habitación no había más qué un frío vacío.
Entonces todos los recuerdos de a noche regresaron a su cabeza como si fueran imágenes.
Sus ojos caen sobre un sobre que está en el borde de la cama, no duda tomarlo abriéndolo con rapidez.
“Sé que jamás voy a merecer tu perdón, ni menos estar a tu lado por todo lo malo que hice en pasado, te lastime de la peor forma y si no hubiera vuelto a comenzar de nuevo, no sería más la estúpida Charlotte que haría todo para no casarme contigo, pero agradezco el cielo y la tierra que me dieron esta oportunidad y pude recapacitar. Al principio sí, lo admito estuve a tu lado para poder remediar todo y no dejar que lo mismo volvieran a repetirse, pero con el tiempo te fui amando Killian, Eras todo lo que necesitaba para que las cosas no volvieran a repetirse, te ame cómo nunca imagine amar a un hombre, y te sigo amando a pesar de todo. Me estoy alejando porque sé que necesitas tiempo para asimilar todos esos recuerdos, pero si decides enviar los papeles de divorcio los firmaré sin darte problema Killian, si es realmente lo que quieres.”
“Tu amada Charlotte.”
Lee lo último apretando la carta, mientras que las lágrimas poco a poco lo fueron traicionando.
— Cariño. — Musitó aferrándose a la carta.
...Nota de la autora...
No he podido actualizar en esos días porque cambié de celular y normalmente escribo en celular, porque tardo demasiado en computadora, pero ese nuevo teléfono es un caos total, es un puto Huawei, en mi puta vida vuelvo a tener un Huawei.
Demasiado complicado 😑
Se supone que la novela iba a ser de 20 capítulos, pero al parecer tendré que extenderlo un poco, es probable que tenga entre 22 o 24 capítulos.
Nos vemos en el próximo capítulo.
