Caprichos De Amor

En la habitación de un hotel muy lujoso de la ciudad de Guayaquil, una pareja de recién casados ingresaban bajo la lente de una cámara, Jordan Torres graba el momento único de su hermana menor, Sebastián tenía una sonrisa dulce y llena de amor mientras cargaba a su hora esposa Valentina Torres, en sus brazos siguiendo la tradición de los recién casados, para Jordan eran la pareja perfecta que el grababa con su cámara.

Jordán---: Guauu, que habitación miren los detalles, será perfecta para los tortolitos recién casados, saben que estamos en vivos.

Valentina----: Ya, sale de aquí (dice feliz entre risas).

Sebastián---: Si cuñado, ahora es nuestro momento.

Jordán---: Está bien, los dejaré solos para que disfruten, despidan a la cámara y a su anfitrión.

Vale---: ¡Ya vete! (le tira una almohada).

Jordan salió de la habitación, mientras Sebastián cerro la puerta, que al instante su rostro se hizo osco y sus miradas eran frías, él permaneció de espaldas y sus manos puestas en la perilla de la puerta, Valentina al verlo distraído avanzó hasta él presionando su pecho en sus ancha espalda, Valentina sonrió y dijo con voz dulce.

Valentina----: Al fin estamos casados.

Sebastián sintió de repente una oleada en su miembro abultado, entrecerró sus ojos frío y dio la media vuelta ya que su sonrisa tierna de medio lado se transformó en una sonrisa sepulcral, como la tenía tan cerca a él enseguida apretó la barbilla de Valentina dejando marcando sus delgados dedos en su piel.

Sebastián---: Eres una perra como pudiste ser capas de manipular a mis padres para atraparme, ante mis ojos no eres más que una zorra astuta, pero me quieres entre tus piernas pues lo tendrás.

Sebastián le rasgo el vestido de novia y se lo quito bruscamente, después fue con la lencería que ni siquiera la aprecio, cuando Valentina estuvo totalmente desnuda, la tiro a la cama de una manera violenta, Valentina trato de huir hacia al baño resistiéndose a su abuso, pero al final la fuerza de Sebastián fue superior a la de ella, estando ahí tumbada en la cama así sin fuerzas él la arrastró hacia el filo de la cama donde solo Sebastián bajo sus pantalones y en el filo de la cama la penetro de una manera brusca y violenta.

Valentina tuvo que presionar sus dientes para soportar la rudeza de la acción mientras tenían sexo, ella trató de aguantar lo que más pudo, pero al final sus lágrimas salieron abriéndose paso en sus rosadas mejillas, que termino empapando sus cortos cabellos que había salido del elegante peinado de bodas, mientras que él sonrió con resentimiento y aprovecho para insultarla y le decía que él jamás la amaría porque su corazón le pertenece a otra.

Sebastián---: Maldita perra, te gusta que te den duro, habla dime que lo hago bien.

Valentina----: Por favor para, no sigas me duele.

Sebastián---: Así me gusta, súplica piedad, porque este será el único momento que me tengas dentro de ti, porque mi corazón le pertenece a otra, jamás te amaré y no volveré a tocarte.

 A pesar de todo ahora ella era su esposa, él no tenía el derecho de agraviar su corazón, porque si estuvieran juntos como una pareja normal él estaría gritando el nombre de Martina Romero y Valentina Torres estuviera llena de amargura, las embestidas fueron más fuertes, y el dolor aumenta en el interior de la bella Valentina el sudor había empapado su cuerpo cuando sintió la última en vestida con más fuerza y un fuerte gemido salió de los labios de Sebastián, después de salir de ella dejo caer al suelo a Valentina, ya que la mitad de su cuerpo estaba afuera de la cama.

Valentina sintió un fuerte dolor entre sus caderas y el frío piso le hizo entender lo cruel que fue su esposo en su noche de bodas, ella lloró en silencio porque se sintió por primera vez ultrajada, por su parte Sebastián busco unas toallas húmedas y se limpió sin darle importancia a las lágrimas de Valentina.

El celular de Sebastián, se había caído al piso, el celular recibió una llamada donde Valentina pudo ver quien lo llamaba, pero no tenía un nombre, solo decía "mi vida" dándole entender que la supuesta mujer que el amaba lo llamaba. Sebastián tomó el celular y contesto con una voz gentil, nada comparada con la fea voz que se dirigió hacia Valentina.

Martina 📲 ¿Dónde estás? te estoy esperando.

Sebastián📱Tranquila mi amor, iré de inmediato, no te desesperes.

Sebastián colgó, y miro a Valentina con desdén, se agachó para estar al mismo nivel de ella, alzó presionando su barbilla para que ella lo pueda mirar a los ojos, cuando pudo captar las miradas llorosas de Valentina le hizo una advertencia.

Sebastián---: Ni una palabra a mis padres, ni a tu hermano, porque después de esto podemos divorciarnos, si quieres tendrás la las acciones que tus padres invirtieron en el negocio de mi familia, podrías ejercer tu profesión cuando te gradúes sin problemas, pero tendrás que cumplir unas cláusulas y firmar este documento, podras estar tranquila porque después de esta noche no te tocaré más así compartamos la misma cama y al final todos saldremos ganando, no pierdes las acciones de tus difuntos padres y yo esperaré al amor de mi vida que también quede libre y así podemos estar juntos para siempre y tú podrás encontrar a una persona que te ame de verdad.

 Valentina aún con la mano temblorosa firmó los papeles que le dio Sebastián, ella no quería perder las acciones de sus padres, ya que es lo único que tiene para sobrevivir ella y su hermano después de la muerte de sus padres en un trágico accidente automovilístico, no le quedó de otra que aceptar lo que Sebastián le propuso, tendrá que soportar un año de matrimonio para obtener las acciones de su padre, aunque Sebastián la vio afligida no le importo, solo se dio la vuelta y salió de la habitación dejando a una Valentina devastada y ultrajada.

Ella llora recordando como él la trato en el pasado, con tanta gentileza como si fuera un tesoro invaluable para él, sí que ella no entendía por qué razón la trato de una manera tan desagradable, después de unas horas de haberse casado, la desesperación y el dolor se extendió como una hierba amarga en el corazón de Valentina, y con toda la amargura subiendo por su estómago se levantó, como pudo llegó hasta el baño y una pequeña cantidad de sangre rodo por sus piernas, ella era virgen y la manera brusca que Sebastián tomo su pureza, era imperdonable.

Sentía tanto dolor en sus caderas y sus partes íntimas, ella se duchó no dejaba de llorar, porque ella estaba enamorada de Sebastián desde que era una niña, pero antes de entrar a la adolescencia, ella y su familia se mudaron a Panamá ahí vivió por más de diez años y cuando sus padres murieron, ellos lo perdieron todo y lo único que le quedaba era las acciones que su padre había comprado cuando vivía en Ecuador y a su vez haciendo una Alianza de matrimonio con la familia Delgado Duarte emparejando a su hijo mayor con la pequeña Valentina, que como cosa del destino Alberto el hijo mayor de Rubén Delgado y Thais Duarte tomo como esposa a Martina Romero que se habían casado un años atrás, por ese motivo Sebastián le tocó casarse con Valentina Torres y cumplir con el compromiso de las dos familias.

Cuando Valentina se quedó seca de tanto llorar se miró al espejo y juro que Sebastián Delgado pagaría por la humillación que le hizo.

Valentina----: Un año es más que suficiente, para hacerte arrastrar como una lombriz en el suelo, haré que te enamores de mi, locamente y te destruiré, porque esto significa la guerra.