Valerian perdió a su madre al nacer y su familia siempre la desprecio por ello. El único que la trató con amabilidad fue el príncipe heredero, con quien fue comprometida, pero todo cambió con la llegada de su prima Marlene, quien de inmediato se ganó el cariño de su familia y del príncipe. Esto llevó a Valerian a convertirse en una villana que intentó matar a su prima por celos.
Pero ahora, una nueva alma ha renacido en el cuerpo de Valerian y, con el conocimiento de su desdichado futuro, ella decide alejarse de su familia y romper su compromiso para tener una mejor vida. Pero para su sorpresa, el príncipe heredero, Callisto ha ido por ella y no piensa aceptar la ruptura de su compromiso.
¿Por qué Callisto es insistente con ella? ¿Cuáles serán sus verdaderas intenciones?
NovelToon tiene autorización de Arhuchim para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
escena 03.
En menos de una semana ya tenía todo listo para partir al campo, sus maletas estaba siendo acomodadas en los carruajes mientras Maddy los supervisa todo. Marlene al ver lo que pasaba, enseguida le pregunta a los gemelos que estaba pasando y estos le cuentan que Valerian se irá una temporada al campo.
— que magnífico, yo también quiero ir, vayamos los cuatro.— habla emocionada.
— si eso quieres, no veo porque no ir. ¿Cierto Einar?— pregunta Kenai.
— cierto, no creo que padre se niegue.— responde Einar.
— que bien, nos vamos a divertir.—
Marlene al ver pasar a Valerian corre hacía ella con una gran sonrisa.
— hermana, te tengo grandiosas noticias, hemos decidido ir al campo contigo, ¿no es emocionante?—
— entonces si van al campo, asegúrense de que no sea en la misma casa.— responde molesta.
— iremos a la misma, será divertido.— habla feliz.— ¿o es que me odias?— baja la mirada con tristeza.
— si, te detesto, me voy porque no soporto verte y no soporto a los gemelos, ¿por qué querría estar en el campo con tu compañía?— pregunta molesta.
— pero yo...yo creo que es mejor en familia...— solloza encogida de hombros.
— yo no tengo familia. Así que espero no se les ocurra ir, no quiero tu presencia en el mismo lugar.—
— Valerian, ¿como puedes ser tan cruel?, Mar solo intenta llevarse bien contigo...— la regaña Kenai.
— ¿y acaso yo se lo he pedido?, no me interesa lo que ella quiera, si me voy al campo es para estar lejos de todos ustedes.— los señala.
Los gemelos no esperaban escuchar algo así parte de Valerian, ella se veía muy molesta.
— no cabe duda que eres una mujer despreciable, Marlene solo te brinda su cariño y tu la tratas mal.—
— tienes razón, soy despreciable, así que, mejor sigan manteniéndose lejos de mi o su preciada Marlene podría sufrir un doloroso accidente.—
Valerian señala a Marlene y repentinamente ella grita cayendo al suelo, los gemelos al ver esto, se acercan a ella mirando que había sangre en el piso y cuando Marlene levanta un poco la falda de su vestido, ven que tiene una cortada cerca del tobillo. Los gemelos miran ha Valerian y esta sonríe mientras mantiene una mirada afilada.
— ya lo saben, no los quiero en cerca de mi, esa casa me la dejo mi abuelo y no permito que nadie se acerque a ella.— les advierte.
Maddy llega a decirle que todo estaba listo, así que Valerian sigue a Maddy hacía el carruaje subiendo a este. Los gemelos salen y ven como los carruajes se alejan, Valerian nisiquiera se despidió de ellos, ni del Marqués. Los gemelos se miran entre si, preocupados por lo que acaba de pasar, ya que esos últimos días, Valerian ha cambiado mucho, pues antes ella se acercaba en busca de su atención y les hacia berrinche cuando veía que ellos solo se preocupaban por Marlene, esto los hace pensar un poco, en que podría estar pasando, pero el sollozo de Marlene llama su atención y enseguida regresan para ayudarla.
El Marqués es informado por su asistente sobre la partida de Valerian, menciona como se apresuro a preparar los carruajes y tan pronto estuvo listo se marchó. Esto sorprende al Marqués, pues Valerian no se ha despedido de él, incluso esos días, ella no ha ido a su estudio para darle el saludo de la mañana como solía hacer y hoy, no se molesto en despedirse, simplemente se ha marchado.
— señor, aún no es tarde para arreglarlo.— menciona su asistente.
—¿arreglar qué?— pregunta seriamente.
— no es nada señor. Con su permiso.—
Al asistente se retira, pensando que el Marqués y sus hijos son injustos, Valerian ha sufrido mucho por su desprecio siendo ella la hija que dejo la marquesa, pero, en su lugar le dan todo el cariño a esa chica que llegó hace poco y que solo se aprovecha de todo.
.
.
.
Ha Valerian le llevó dos días llegar a la casa de campo, esta quedaba lo suficientemente lejos del reino, además, era un lugar perfecto para vivir con tranquilidad y al tomar el control de la villa, podrá tener una vida tranquila.
Al llegar, los pocos sirvientes que estaban en dicha mansión, le dan la bienvenida y lo cierto es que nadie esperaba la visita de Valerian, al menos no que ella llegara sola, normalmente son el Marqués y los gemelos quienes llegan a supervisar que todo este bien, además de que ya han escuchado que Valerian no era precisamente la hija dorada de la familia.
— mayordomo, necesito que me pase los libros de administración de la casa y la villa. Estaré mucho tiempo aquí, así que yo llevaré las finanzas.— le informa al hombre mayor.
— por supuesto señorita, lo tendré todo mañana temprano.—
— perfecto, en cuanto a la gestión de la casa, todo seguirá como siempre. Y ella es Maddy, será ella quien se encargue de mi personalmente.—
— así será señorita, y bienvenida.—
El mayordomo ordena que lleven las maletas de Valerian a una habitación, además de que preparen la cena y un baño, para que ella pueda estar comoda.
.
.
.
A los días siguientes...
En el palacio del reino, una mujer que pasaba de sus 30, camina por los pasillos seguida de varias doncellas, ella es la reina Isabella Valencia, la reina de Celes, una mujer justa, pero también con un toque de arrogancia, ella sabe que para sobrevivir en ese mundo de la sociedad de aristocratas, debe ser firme y de carácter fuerte. Por eso tuvo una educación estricta desde pequeña, ella proviene de Flame, un reino vecino, un reino conocido porque la familia lleva en su sangre el legado de los dragones y fue comprometida con el actual rey como una forma de llevar paz a ambos reinos. Isabella entra a una sala sin tocar, ahí estaba un chico de hermosos ojos dorados y cabello negro, este se encuentra sentado en la sala y muestra molestia ante la repentina llegada de la mujer.
Pero tan pronto ve la expresión de la mujer, se pone de pie. Ella sin duda estaba molesta, aunque no se le ocurre el porqué de ese enojo.
— acabo de enterarme que la señorita Lacaster no ha aceptado las clases de los profesores y que te han visto muy cercano a la hija adoptiva del Marqués.— habla Isabelle.
— ¿de donde sacas eso?, sabes que los gemelos Lacaster son amigos cercanos, pero, lo de la señorita Lacaster no lo sabía, ella es muy diligente con sus clases.— menciona el chico.
—¿como es posible que no lo sepas?, vas cada tres días a la mansión Lacaster, ¿no hablas con ella?— pregunta molesta.
— solo a veces tomamos el té, no hablamos mucho, y su hermana siempre esta presente.— toma asiento de nuevo dejando salir un pesado suspiro.— y ella es una habladora.
— ¿por qué la hermana debe de estar presente?, vas a ver a tu prometida, una cita con ella, no con la hermana. Espero no escuchar rumores, porque sabes que tu posición como heredero no es estable.— le advierte.
— comprendo madre, no se preocupe, hablaré con el Marqués sobre el tema.— asegura.
— eso espero.— advierte.— no quiero escándalos.
El chico se pone de pie y hace una reverencia. Al salir de esa sala deja escapar un largo suspiro, por suerte su madre estaba calmada, porque si hubiera estado más enojada seguramente le lanza un jarrón. Ríe del solo pensar en eso.
°°°