Los Últimos Descendientes Del Imperio

Kafor había dicho que lo que tenía que confesar iba a sorprender a muchos, y al parecer así sería, Ymir y Zaniah iban a conocer la historia de sus padres, ¿estarán listos para saberlo?, ¿estarán listos Yamileth y Jimmy para descubrir quienes son ellos realmente?.

Kafor dijo: Sí, chicos son sus padres de quienes estoy hablando, es parte de su historia. Esa noche del “julto” se conocieron, y no crean que se llevaron bien de inmediato, su padre era el joven príncipe y futuro heredero del reinado de Andovia, aunque no quería mucho ese rol, y su madre, era la menor de las hijas de una pareja de maestros de lenguas interplanetarias, no eran pobres pero tampoco pertenecían a las familias dirigentes del imperio, su madre contaba con una asombrosa habilidad que la hizo entrar becada a una de las escuelas más prestigiosas de Andovia.

Escuchar la historia de sus padres provocaba nostalgia en Ymir y Zaniah, especialmente si el recuerdo de su madre era un dolor aún latente en ellos...

Kafor continuó diciendo: La joven Anymza no la pasó muy bien ahí cuando se enteraron de su origen, puesto que para ser sinceros, sufrían aún de una cultura elitista, que aún ahora permanece haciéndolo sufrido tanto, solo un joven estudiante se volvió su amigo y cuando eso pasó nadie se atrevía a fastidiarla, se trataba de Nahor de KaoB, hijo del duque de KaoB, una de las familias más importantes del reino de Andovia, esa noche él vio como el príncipe Firniah, aunque no lo reconoció de inmediato, rescató a su mejor amiga Anymza y se acercó a ellos, y dijo “Anymza, es el último año en que puedo acompañarte, porque tengo que dedicarme de lleno a mi preparación militar, sabes que debes aprender a cuidarte sola, pero sigues metiéndote en problemas”. Desde ese día, los tres se volvieron grandes amigos, una amistad que perduró hasta el último día de sus vidas.

En ese momento, Kafor miró a Alnair, y no había lugar a dudas de que Alnair sabía muy bien quien era Nahor de KaoB, el hombre más valiente que había conocido, aquel hombre fue su padre.

Alnair se preguntaba por qué Kafor estaba contando eso, ¿qué tenía que ver con la verdad de Yamileth y Jimmy que creía saber?, ¿qué tenían que ver su padre y los padres de sus amigos en todo esto?; Yamileth también no entendía eso, ella esperaba otra confesión, ¿por qué Kafor estaba contando eso?.

Alnair se parecía en muchos aspectos a su padre, protector por naturaleza, decidido, seguro de sí, un gran amigo; a su vez alegre, divertido y especialmente sonoro; sin embargo, ha tenido que frenar su ímpetu y adoptar nuevos comportamientos en un afán de garantizar una paz que pende de un delgado hilo.

Kafor relató: Cuando Anymza cumplió 22 años, fue la última vez que subió a la montaña en la noche de “julto” a gritar el nombre de Zoter, ella estaba segura de que ya no estaba enamorada, pero necesitaba despedirse para poder aceptar la proposición del príncipe Firniah; no supo cuándo empezó pero sí sabía que amaba a Firniah, como nunca había amado a nadie; entonces ella grito “Zoter”, y por primera vez en 6 años escuchó una respuesta “siento no haber vuelto antes, siento recién tener el valor para verte”. Esa noche, él se disculpó por no volver, por el cambio de sus sentimientos, por haberla hecho sufrir, ella le explicó que no se preocupara que ella se había vuelto a enamorar, que esa era la despedida, ambos quedaron como amigos, se pusieron al día de que habían logrado cada uno y pensaron que tal vez no se volverían a encontrar.

Yamileth estaba por perder la calma, ha vivido años de angustia porque le ocultaron muchas cosas, necesitaba, anhelaba, quería saber la verdad, pero seguía sin entender, qué tenía que ver todo su pasado con los reyes de Andovia, un mundo tan distante, tan lejano ...

Kafor continuó: Cinco años después ellos se tuvieron que volver a ver, en un problema universal, grandes enemigos querían conquistar el universo, los Triotenianos habían desarrollado armaduras y poderes especiales, pero que habían caído en manos enemigas. Ahora como emperadores, después del asesinato del padre de Firniah, quién había asumido el rol de emperador luego de lograr unificar varios mundos, tenían que idear un plan para salvar a todos, estaba en una conferencia intergaláctica pensando en qué hacer.

Kafor respiró profundamente para poder continuar con la historia, el pasado era doloroso, culposo, y tenía implicancia en varios de los presentes...

Kafor dijo: En esa reunión descubrieron que solo un guerrero trioteniano en el exilio podría enfrentarlos con la única armadura que no pudieron robar, tal vez era el único que podría derrotarlos, “¿quién es ese guerrero?”, preguntaron y la ya en ese entonces emperatriz Anymza escuchó con atención la respuesta, “Zoter, el hijo del general de 3 estrellas Marvalo de Triotenia, está exiliado porque decidió seguir sus sentimientos, y no continuar en el ejército, se enamoró de una joven terrícola, y se quedó con ella, él se olvidó de todas nuestras costumbres, y dijo que no le haría a ella, lo que le hizo a otra jovencita dejándola en el olvido, sino que esta vez lucharía por su amor, sabemos que por ahora la Tierra no es atractiva para nuestros enemigos, pero en verdad ¿cree que estará a salvo ahí?”.

Venía la parte más dura de la historia, y Kafor se preguntaba cómo irían a reaccionar todos, pero tenía que continuar la narración para que pudieran entender el papel real de Yamileth en todo esto...

Kafor tratando de mantener su serenidad continuó diciendo: La entonces emperatriz Anymza, ya tenía un embarazo notorio, pero decidió ir a la tierra, ni el emperador Firniah ni el guerrero más poderoso del imperio, Nahor de KaoB, se enteraron; cuando localizó a Zoter, él tenía en sus brazos a sus dos hijos mellizos, habían nacido hace poco tiempo de ese encuentro “te vez muy bien como padre”, él se sorprendió, jamás imaginó verla en la tierra.

En ese momento, Delta activó la cámara suspendida numero 3 que estaba sobre la mesa circular del cuartel secreto, y se fue mostrando en la pantalla una imagen.

Kafor afirmó: Él es Zoter, el general de 3 estrellas más joven de la historia de Triotenia, vestido como el legendario guerrero Excélsior blanco del reinado Trioteniano.

Todos miraron con asombro, Kafor les hablaba de Zoter de Triotenia, pero ese rostro era el mismo de Jimmy O’Connor, todo fue silencio y asombro hasta que Yamileth habló.

Yamileth sin inmutarse dijo: Supiste que Jimmy era el hijo de Zoter, desde el primer momento en que lo viste, ¿verdad?.

Yalitxa preguntó: ¿Por qué dices que Jimmy es hijo de Zoter?

Yamileth respondió con una mirada hueca y fría: Por lo que dijo Kafor, que los triotenianos eran capaces de engendrar hijos cromosómicamente iguales a los padres, por eso era común que el padre y el hijo mayor lucieran iguales, incluso al abuelo y antepasados.

Todos sabían que Jimmy era adoptado, que años atrás se encontró con su hermano mellizo (nada parecido a él), se suponía que sus padres murieron cuando eran pequeños, y que su abuelo por parte de madre solo pudo conservar a uno de ellos, esa era su historia, esa era la verdad que suponía, se veía así mismo en esa pantalla, pero no era él, ¿qué había pasado?, ¿qué estaba por descubrir?, se preguntó, habían dentro de sí mismo emociones que no podía identificar.

Todos estaban sorprendidos, todos menos Yamileth y Alnair, desde tiempo atrás sabían que Jimmy realmente era hijo de Zoter, el general de 3 estrellas más joven de Triotenia, el legendario guerrero Excelsior blanco de Triotenia, pero eso lo sabía Kafor mucho más antes que ellos, pero nunca lo había contado.

Kafor miró a Yamileth, y pensó ¿porqué como los demás no se quedó sorprendida?, lanzó esa pregunta con tanta seguridad, sin inmutarse.

Jimmy cuestionó: ¿Soy hijo de Zoter?

Kafor respondió: Sí, eres su hijo, cromosómicamente igual a tu padre, la última voluntad de tu padre era que los enemigos no te localizaran fácilmente, por eso no pudiste quedarte con la familia de tu mamá, para todos los que podían identificar a Zoter, él solo tuvo un hijo, un hijo muy terrícola sin ninguna ascendencia Trioteniana, sin poderes que fueran una amenaza, tú se suponía no debías existir. (Mirando a Yamileth), y sí, supe que era el hijo de Zoter, desde el primer momento en que lo ví.

Jimmy quería respuestas, su cabeza se había llenado de inquietudes y preguntó: ¿Qué le pasó a Zoter, quien tú dice es mi padre? ¿Cómo murió?

Kafor respondió de inmediato: Tu padre murió luego de recuperar las piedras jalistas, que dan la energía para crear a los guerreros excelsior del Triotenia y ponerlas a buen recaudo en el satélite “la muerte” del planeta Triotenia, a fin de que no cayeran en manos enemigas que pudieran destruir el universo.

Todos se miraban unos a otros, menos Yamileth y Alnair que siempre se quedaron mirando a Kafor, esperando más, esperando saber toda la verdad, aquella que por lo visto conocían a medias.

Yamileth había sufrido mucho después de que salió del grupo de superhéroes a entrenar para participar en las olimpiadas, y solo Alnair sabía cuánto. Ese secreto que Kafor debió revelar apenas conoció a Jimmy, eso podría haber evitado mucho dolor.