¿Qué sucede cuando la mafia y el romance se juntan? Bastian es un bravucón de corazón frío que esconde un deseo particular: quiere amar de verdad. La vida le sonríe cuando Nadir aparece en la preparatoria como el estudiante nuevo y ambos se embarcarán en una relación bastante curiosa.
NovelToon tiene autorización de Irwin Saudade para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
20
Faltan tres días para el festival de septiembre. Estoy saliendo de clase, informática me parece bien interesante y creo que sacaré buenas calificaciones en el proyecto que nos dejaron como tarea.
—Nadir, el profesor Carlos te llama —me hace saber un compañero.
—¡Gracias! Voy enseguida.
Me dirijo al ascensor, estoy en el cuarto piso y cuando abordo, él entra. ¡No me da miedo!
—¿Cómo estás? —Gonzo inicia la conversación.
—Estoy bien. ¿Tú, qué tal?
—El día está caluroso. Hoy no he molestado a nadie.
—¿Quieres molestarme a mí?
—No, no puedo molestarte a ti.
—¿Por qué?
—Órdenes del jefe.
—¿Sabes que quiere esta vez?
—¿A qué te refieres? —Trata de hacerse el bobo.
—El profesor Carlos me mandó a llamar, ya sé que significa eso.
Hace contacto visual conmigo a través del espejo que está en nuestra espalda.
—¿No sé de qué...?
—¿Qué tipo de mafioso eres tú? Podemos evitarnos todo el show de que me vuelvan a secuestrar como la última vez. ¿Que necesitan de mí?
Parece meditar, no dice nada al principio y entonces...
—En realidad yo soy el quiere algo de ti.
—¿Y qué es?
—Quiero negociar contigo.
—¿Sobre qué?
El ascensor se detiene. Las puertas se abren y frente a nosotros hay más estudiantes de la mafia. Gonzo les hace una seña para que se retiren.
—Acompáñame a la biblioteca abandonada.
—¿Por qué le llaman así? Yo nunca he visto la biblioteca abandonada.
Se ríe.
—Ya lo averiguarás.
Caminamos por medio campus hasta llegar al edificio de la biblioteca. Pensé que entraríamos por las puertas principales, pero resulta que no. Rodeamos el edificio por fuera hasta llegar a una casa pintada de color gris. ¡Nunca imaginé que detrás de la biblioteca hubiera una construcción!
—¿Aquí fue donde me trajeron la primera vez que el profesor Carlos me mandó a llamar?
—Es correcto —asiente.
Porque ese día, cuando salí de la habitación, ellos volvieron a vendarme los ojos.
—¿Por qué me traes aquí?
—¿Olvidaste que el profesor Carlos te mandó a llamar?
Entramos. El aroma es de madera y ligeramente percibo grasa quemada. Alguien prepara una carne asada en la cocina. Subimos al segundo nivel y allí, él me conduce hasta lo que parece ser su oficina de vicepresidente.
—De vicepresidente a vicepresidente, quiero negociar contigo.
—¿Qué tienes en mente?
—Intercambiemos información.
—¿De?
—Proyectos de nuestros clubes. Como habrás descubierto, sabes que constantemente estamos compitiendo por ver quién es el mejor.
—¿Ambos seremos soplones?
—Exacto.
—¡Me gusta tu propuesta!
—¿Aceptas?
—¡Para nada! Tú a tu club y yo al mío.
—¿Quieres dinero?
—Quiero que te calles.
—¡Solo bromeaba! Esa no es la razón por la que te traje aquí.
—Se claro, mi tiempo cuesta.
—Necesito que me ayudes con una chica.
—¿Cómo podría ayudarte?
—Descubrí que tienes el talento de escribir cosas cursis y de dar consejos en internet sobre conquistar.
—¿Estás enamorado?
—¡Lo estoy! Pero la neta es que no sé cómo ser dulce con ella. ¡Soy un gánster!
No puedo evitar sonreír por la emoción. ¡Evidentemente que esto me agrada!
—¿Quién es ella?
—¿Qué pedirás a cambio?