“AMOR Y VENGANZA"...Alejate Pero Quédate...

El silencio en la casa de los padres de Sofía era muy notable, ella estaba muy inquieta, sentada al lado de su padre, que lo habían tenido que obligar a recostarse, no se sentía muy bien. Él que era un hombre tan fuerte, era difícil verlo así de vulnerable. Solo sospechaba que ese malestar era más emocional que físico.

La charla, esa conversación largamente postergada, seguiría así por el momento, tendría que esperar una vez más.

Dejaron a su padre descansando en la habitación, estaba su madre también a su lado.

Fueron hasta la sala,se sentaron en el sillón que decoraba el hermoso lugar amplio del comedor.

Andrea, su madre con la ternura, la firmeza, la paciencia que caracterizaban su personalidad, tomó sus manos entre las suyas y miró fijamente a sus ojos.Pregunto:

-Hija ¿Por qué tu padre llegó a ese estado? ¿Qué ha sucedido?

Sofía Vaciló por un momento, lo pensó, era una verdad que todos necesitaban saber, pero solo su padre podría revelarla, para comprender de qué se trataba en realidad, no sabía nada de esa historia.

-Mami, no sé mucho de lo que sucedió, es algo del pasado de mi padre, que bien no comprendo. Tendremos que esperar que él lo cuente. La miró con preocupación en su cara.

-Pero mamá quiero hacerte una pregunta ¿cómo conociste a mi padre?

Una pregunta lanzada al aire de golpe. Andrea la miró a los ojos con una mezcla de confusión, nostalgia.

La pregunta la regresaba a un pasado que parecía lejano, pero Andrea le sonrió y le respondió:

-Cuando conocí a Marco, era un hombre muy apuesto, solitario, pero lo que vi en él es que estaba roto, muy lastimado.

En ese momento ingresé a la empresa como su asistente personal. Era muy buena en ese rubro.Fue muy duro al principio conmigo, estaba cerrado, solo era como una máquina de trabajar.Lo único que le importaba, eran sus negocios. Me daba órdenes sin mirarme a los ojos imagínate.

Era frío, distante. Pero por cosas del destino un día luego de mucho tiempo me miró y desde ahí nos fuimos acercando lentamente, muy despacio, detalle a detalle,

pude ir acercándome a su corazón.

Puso muchas barreras, las fui atravesando una a una , no era mujer de rendirme. Y te juro hija que avanzaba un paso y retrocedía tres, pero seguí luchando, me había enamorado de ese gran hombre.

Solo supe que tuvo un gran amor, que había fallecido. Una historia algo terrible, de la cual nunca me permitió saber, ni me dejaba investigar.

Solo lo acepté así, y bueno fuimos muy felices, mira la hermosa familia que hoy tenemos, creo que tu hermana Giovanna que choca tanto con tu padre es la más parecida a él. Sonrieron Andrea y Sofía.

-Nunca le pregunté que sucedió, me quedé en silencio,hija.

Andrea respiró hondo, sintiendo un nudo en la garganta, quizás había llegado el momento de saber el pasado de su esposo ,enfrentarlo como familia. Amaba con toda su alma a Marco y juntos podían superar todo, hasta su terrible pasado, que era sobre el primer amor de él.

-Mamá,sé que todo tiene que salir a la luz, pero no tengas dudas, ni miedo , todo esto será para sanar de una vez, sobre todo a mi papá.

Eres tan dulce, tan fuerte que no me asombra que lo hayas conquistado, lo enamoraste y lo ayudaste. Él te ama mucho, lo sé.

Sobre todo que no salga más gente lastimada en esa historia. Quiero saber para entender porque yo fui un instrumento de venganza.

-Sofi ¿pero porque tu? No comprendo.Has crecido, eres tan madura,tan buena hija. Explicate. La miraba atenta.

-Si mami, pero también me equivoqué, me metí con alguien que no debía. Te lo contaré todo, se que entre nosotras no hubo nunca secretos, solo lamento no haberte contado antes.

Cuando su madre terminó de escucharla, solo la miró y le dió un beso en su frente.

- Hija no te arrepientas, lo hiciste de corazón, mi experiencia sin conocerlo por todo lo que hoy sé, y me relatas, ese hombre está lleno de ira, de rencores, una historia que involucra a su familia y a la nuestra. Me hace recordar por alguna razón al pasado de tu padre, su corazón estaba lleno de esas emociones como ese hombre que me cuentas.

No lo odies, no te llenes tú también de rencor.

Y si tú te entregaste a él por amor, no te arrepientas nunca. Tenlo como un bonito recuerdo.La vida da tantos giros, es impredecible entender, solo el tiempo dará las respuestas.

-Mami te quiero tanto, tu corazón es único, eres tan buena , tan sabía, y vez más allá, estoy muy lastimada, no puedo pensar así como tu, pero se que el odio , el rencor nunca llevan por buenos caminos, eso me lo enseñaste muy bien.Doy gracias a Dios por ser tu hija.

De repente un nudo en mi estómago me apretaba sin parar, muchas náuseas. Corrí hasta el baño, que por bendición había uno muy cerca, me apoye sobre la cerámica fría del mismo y vomité todo lo que tenía en mí panza, quedó vacío.

Mí madre estaba detrás de la puerta nerviosa, preocupada se notaba en su voz.

- ¿Sofía estás bien? Cariño ¿quieres que entre?

No quería añadir sobre ella otra preocupación más a la que ahora sé que sentía por mi padre.

Me lavo la cara, mis dientes, moje mi pelo y respire profundo.

- Ahí salgo mamá, tranquila.

Cuando salí del baño, la miré y sonreí intentando disuadirla en esto.

-No te preocupes, es algo que comí seguramente y me hizo mal. Mucho estrés, nervios. Mentí tratando de convencerme a mí misma de esas palabras.

-Creo que necesito vacaciones,ya en una semana las tendré en la facultad, está el receso de invierno. Me iré por ahí madre.

Le conté sintiendo esto como un salvavidas a mi vida aunque sea unos días.

-Hija puedes irte a la casa de los abuelos, en el campo, bien sabes que esa casa es muy grande, ellos estarán felices de consentir y cuidar a su hermosa nieta. Soltó mi mamá con un brillo especial en sus ojos, que reflejaban un poco de alivio.

Los padres de mi madre eran muy cariñosos y protectores.

- Buena idea, si iré a preparar mis cosas, me hará muy bien, hace mucho que no veo a mis abuelitos.

-Sofi sé que no quieres nada de regalo, lo entiendo, lo respeto, pero en esta oportunidad acepta el auto. Lo compramos para ti como regalo por tú inició en la facultad,también finalización de la escuela, tus altas calificaciones finales, estábamos muy orgullosos de ti.

Ahora lo necesitas, podrás ser más independiente.

La propuesta me tomó por sorpresa, en este momento un auto era un símbolo de libertad para moverme, pero me había negado a aceptarlo por orgullo.

Lo pensé, lo reflexioné y finalmente cedi, pero con una condición.

“Lo pagaré en cuotas con mi trabajo" fue mi decisión final.

Sentía una necesidad imperiosa de demostrarme a mi misma que podía valerme por mis propios medios.

Ella asintió complacida con mi determinación y me dio las llaves de mi auto.Mostrando una enorme sonrisa por su logro conmigo.

Le di un beso a mi madre, le pedí que me avisé como seguía mí padre más tarde.

Sali de la imponente mansión familiar. Me encontré frente a mi auto, un elegante modelo deportivo que brillaba.

Subi, sintiendo la suavidad del cuero y el aroma a nuevo, una promesa de aventuras y nuevos horizontes. Me sentía tan feliz, por un instante.

En camino a mí departamento, el sonido del celular me sacó de mis pensamientos.

-Donde estás amiga mía, estoy afuera de tú depto. ¿Qué dices noche de chicas? La voz de Antonella, su mejor amiga sonó alegre al otro lado de la línea.

-Obvio que si amiga, ya te estaba extrañando, llego pronto, ¡espérame, ahora tengo mi propio auto! Respondí, con una sonrisa sincera asomando en mi rostro.

-No me digas amiga , por fin lo aceptaste ,me cuentas como fue que aceptaste, apúrate en llegar, sale festejo entonces ¡Te quiero!

Quizás, solo quizás esta noche de risas y confidencias serían el bálsamo que necesitaba para empezar a sanar“ Antonella era esa amiga que todas deberían tener en su vida.Lo pensaba así.

Estaba en el estacionamiento del edificio cuando suena nuevamente mí celular era un mensaje de texto.

Pensé esta Antonella que impaciente,veo que es un número desconocido.

Lo leo: “Me fascinan tus expresiones cuando sonríes, mi corazón se ilumina, verte feliz hace que yo también lo esté. Brilla siempre mí ángel.Ten buenas noches.No tomes mucho he.Eres

hermosa". Miró sorprendida quién es caramba, sabe todo lo que hice prácticamente, cómo puede suceder esto. Miró para todos lados para ver si alguien me seguía, pero no veía a nadie.

Decido no responder, imagino que puede llegar a ser un psicópata o algo parecido y ya había conocido a uno en su vida, otro no quería igual.