En el oscuro arte de la escritura, Ella dio vida a una novela donde la astucia de la villana desafiaba los límites de la imaginación. Sin embargo, está muere a causa de los protagonistas, la autora fue cruelmente criticada pues la historia no tenía mucho sentido. En "El último acto de la villana caida", descubre cómo la mente maestra lucha por redimirse en un mundo donde la realidad y la ficción se entrelazan, desafiando las expectativas y sumergiendo al lector en un juego de venganza y astucia. ¿Te atreves a explorar las páginas de esta historia donde la autora se convierte en su propia creación?
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¿Cómo puede enseñarme usted?
Isabella, bajo de su carruaje en la entrada del palacio, estaba lista para enfrentar a esas brujas de la nobleza, eran mujeres mayores que debían estar ayudando al pueblo en vez de andar de chismosas, Isabella, no se dejaría humillar, ni siquiera por la emperatriz, quien la había invitado para que fuera la burla de esas mujeres. A la emperatriz lo único que le importaba era que Isabella era la hija del duque Nolan, un hombre influyente y rico, quien sería un gran aliado, por eso permitió que el emperador comprometiera a su hijo con una ordinaria como Isabella.
Isabella ingreso y mientras era guiada hasta el jardín, escucho las risas de esas mujeres, Isabella iba sin su madre, pues la invitación decía claramente que solo Isabella podía ir, era una reunión solo con ella, la duquesa no le dió importancia y le permitió a Isabella ir sola, pues eran órdenes de la emperatriz.
Isabella ingreso al lugar, las risas se apagaron, las mujeres quedaron mudas ante la belleza de Isabella, su cabellera negra y esos ojos verdes, llamaban mucho la atención, Isabela ese día llevaba un vestido verde, que era encantador y combinaba con el color de sus ojos, Isabella camino hasta la emperatriz, realizando una reverencia perfecta presento sus saludos.
— Saludos, a su majestad la emperatriz, madre de este imperio — Isabella se levantó poco después.
La marquesa quedo mirando a Isabella de pies a cabeza, la última vez que la había visto era una mocosa poco agraciada, hasta parecía enferma, pero está Isabella que estaba frente a ella, se veia como una diosa, lleva un porte elegante, y es en apariencia bien parecida, eso le disgusta.
La marquesa cambia su expresión a una de arrogancia, pues no dejará ver qué esa mocosa la ha sorprendido, a pesar de que Isabella luzca hermosa, sigue siendo una chica ordinaria, por eso la mujer sonríe, hoy esa niñita se irá llorando, y sabrá que nunca será tratada como emperatriz, aunque se case con el príncipe heredero.
— Isabella, pero que vestido tan vulgar, bueno que se puede esperar de una chica tan ordinaria como tú. —
Le dijo la duquesa para hacerla molestar, Isabella solo sonrió, lo cual molesto a la mujer.
—Marquesa, veo que la vejez ya le llegó, este vestido es lo último en moda en el imperio, pensé que usted siempre estaba a la moda, pero viendo el vestido de la temporada pasada que lleva, supongo que ya no, o simplemente a perdido ese buen gusto con el pasar de los años — le dijo Isabella, sin verte como un insulto.
La mujer estaba que ardía en rabia, Isabella la había llamado vieja, y de manera sutil, la llamo pasada de moda, sin embargo no puede hacer un berrinche pues Isabella se vio inocente al decirlo.
— Jajaja que graciosa es la joven, en realidad este vestido, es de alta costura y quise usarlo hoy porque fue uno de los mejores de la temporada —
— No lo dudo —
La tensión se podía sentir en el ambiente, incluso la emperatriz se siente impresionada por las respuestas de Isabella, pues de niña siempre parecía tan frágil.
Las demás damas solo cuchichean sobre lo ocurrido, la emperatriz las acalla y les pide sentarse a la mesa, normalmente la princesa heredera se sienta al lado derecho de cualquier anfitrión, pues es una tradición de respeto, sin embargo al lado derecho de la emperatriz se sentó, la marquesa y la emperatriz no dijo absolutamente nada.
— oh, espero que a la joven duquesa no le moleste que me siente aquí —
La marquesa no llamaba a Isabella princesa, pues le quería dar a entender que no la consideraba como tal.
— Por supuesto que no... Al final el respeto hacia la princesa heredera está dónde ella se siente —
Algunas mujeres se cubrieron la boca para no reírse, mientras que otras están calladas mirando la situación de seguro este sería un gran chisme que contar. La marquesa está hecha una furia, nada de lo que hacía enojaba a Isabella, por el contrario siempre tenía algo que decir para refutar.
La emperatriz tomo su campana y de inmediato las criadas empezaron a servir el te, y algunos postres, luego dirigió su mirada hacia Isabella, quien mostraba unos modales impecables, como toda una emperatriz.
— Isabella, este te, es de una marca exclusiva — le dijo la emperatriz.
— Te blanco, excelente calidad sin duda —
La emperatriz solo asintió, esperaba que Isabella no supiera que tipo de te era, pero una vez más las sorprendió.
— Bueno, la joven Isabella parece conocer sobre muchas cosas, sabe le contaré secretos sobre el matrimonio, pues espero que tenga un matrimonio encantador y sobre todo pueda mantenerlo — le dijo la marquesa.
— Por supuesto, aunque dígame ¿cómo puede una mujer que no supo mantener su matrimonio, darme consejos? — le dijo Isabella.
La mujer se levantó roja del coraje.
— No le permito hablarme así, ¿de dónde saca eso? Mi matrimonio es un ejemplo en la sociedad y todas estas mujeres pueden corroborarlo, mi marido es un hombre ejemplar —
— Si tan segura esta, ¿Porque alterarse? Aunque ya veo que no se ha enterado, pero aquí dice lo contrario, en este diario dice que La baronesa, Mirta, engaña a su esposo, con el Márquez Ferguz, acaso ¿el Márquez Ferguz no es su honorable esposo? —
La mujer le arrebato el diario a Isabella de la mano, avergonzada la mujer vio como todas las demás empezaban a murmurar.
—¿ De dónde ha sacado esto? Es obvio que es falso —
— Por favor marquesa, es el diario principal de Astaroth, todo lo que se escribe es verificado por expertos, y son totalmente ciertas, ¿acaso está diciendo que nos mienten? Le recuerdo que es un diario certificado por el mismo emperador y por la emperatriz. ¿dice que ellos también se equivocaron? —
La emperatriz al verse mencionada, y sin poder ayudar a la marquesa, pues quedaría mal la casa real, de inmediato se levantó.
— La señorita Isabella tiene razón marquesa, le pido que se calme y no diga cosas de las que se pueda arrepentir —
La mujer con lágrimas en sus ojos, miro a su alrededor dónde todas las demás damas la miraban con burla y otras con lastima, de inmediato tomó sus cosas y se marchó a toda prisa del lugar, Isabella se disculpo por haber lanzado la noticia, se justifico diciendo que no sabía que la marquesa no se había enterado de lo sucedido, la emperatriz dió por terminada la reunión, cuando vio a Isabella salir, supo que ella lo había hecho todo a propósito.
Al día siguiente las noticias no hablaban si no de la infidelidad del Márquez, pero quién termino mal fue la baronesa, mientras que el marquez solo fue visto como un hombre con necesidades, incluso la marquesa quedo manchada pues decían que de seguro ella no lo complacía en la cama.
Para acallar los rumores, la ceremonia de bienvenida se adelantó, y sería al día siguiente, Isabella ya estaba preparándose para el gran día.
( más o menos como se vería Isabella) se que no les había puesto referencias, así que, aquí está. está es solo una idea, ustedes pueden imaginarse la de otra forma.
