Selena buscaba libertad. Huir de su pasado, de los lazos que la asfixiaban, de una vida que ya no sentía suya. Londres era su promesa de renacimiento.
Pero jamás imaginó que su nuevo comienzo la pondría cara a cara con él. Ben. El hombre que en su adolescencia la hizo temblar de rabia... y de algo más oscuro y peligroso que nunca se atrevió a nombrar.
Ahora, como su jefe, Ben la observa con la misma intensidad de entonces, pero ya no hay espacio para juegos inocentes. Cada roce, cada mirada, cada palabra no dicha entre ellos es una chispa a punto de incendiarlo todo.
Él nunca la olvidó. Nunca dejó de desearla.
Selena deberá decidir si sigue luchando contra el deseo que la consume o si se rinde ante una pasión que puede destruirlos... o salvarlos.
¿Puede el amor nacer del odio? ¿Puede el deseo vencer al miedo?
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Capitulo 19: La Amante
Selena:
Ya estamos nuevamente en el hotel, el recorrido duró una hora y algo, que si por mi fuera hubiera durado más, estaba totalmente embelesada con los paisajes, pero el fastidioso de Ben se puso en papel sobreprotector y se encaprichó con que debíamos volver, por qué no era seguro además ya estaba anocheciendo y un montón de babosadas, definitivamente a veces tengo me ganas de mat****, si hay algo que detesto es que me digan que hacer.
Salgo de la ducha, reviso mi valija y busco en la misma un atuendo para la cena de hoy, según Ben me dijo que me encantara el lugar, es muy lindo estéticamente y hacen una comida exquisita, por lo que traduciendo sus palabras debe ser un lugar super fino, asi que no puedo desencajar, busco y rebusco hasta que encuentro el indicado, se trata de un vestido corto color negro, mangas largas, escote pronunciado en forma de v con hombreras, sencillo, pero que es delicado y elegante, lo voy a combinar con unas sandalias negras de taco bajo, cartera chica color negro y de accesorios optare por un collar y aros dorados sencillos y muy delicados, en cuanto a mi cabello solo lo seco, y repaso mis ondas, mi maquillaje es solo base, corrector, rimel y gloss color rosa claro.
Una vez lista, me miro en el espejo y quedé encantada con el resultado, no es por nada, pero estoy bellísima, si mis amigas me vieran estarían muy orgullosas de como quede, le aviso a Ben que ya estoy lista, este me responde a los segundos diciendo que ya pasa por mi, tocan la puerta, vuelvo a verme en el espejo, asesorando que este todo en orden, para luego salir.
-Estas bellísima- este queda maravillado al verme.
-Gracias, tu no te quedas atrás-
-¿Me haría el honor de ser mi acompañante en esta cena bella dama?-
-Claro caballero, el honor es mío- le regaló una sonrisa -Ahora vamos al restaurante, ya veo que perdemos la reservación-
Toma mi mano y salimos del hotel, varias personas se nos quedan mirando pero no le doy importancia en cambió mi acompañante no se lo está tomando muy bien, ya que tiene una cara de pocos amigos.
Al llegar al restaurante, fuimos guiados hasta nuestra mesa, desde que llegué quedé maravillada con el lugar, es hermoso, no puedo creer lo bello que es y eso que no he hablado de la vista, se puede apreciar el maravilloso paisaje que nos regala este lugar, al punto de dejarme sin palabras.
-¿Te gusta?-
-¿Si, me gusta?, no solo me gusta me parece hermosamente un espectáculo- le sonrió -Gracias Ben por traerme a este lugar es increíble, desde que llegamos me la he pasado de maravilla, obviando el accidente obvio, pero sacando eso y dejando el resto, está siendo fenomenal, de verdad gracias-
-No me debes dar las gracias, si la he pasado genial a tu lado, me encantó tu compañía y si alguien tiene que agradecer soy yo, por qué estos días han sido maravillosos y todo por qué estás conmigo- toma mi mano besando el dorso de la misma.
Somos interrumpidos por el mesero que viene a tomar nuestra orden, le digo a Ben que elija por mí, ya que confío en su buen criterio, además él ya ha venido en otras oportunidades y sabe cuál es la especialidad de la casa.
Nos ponemos a hablar de la obra, le consultó ¿Cómo está? ¿Si han avanzado?, y si ¿se pudo solucionar el tema del terreno? Y muchas más cosas referidas al proyecto, este me relata todo lo que estaba pasando y el dolor de cabeza que le generó que todavía no hayan podido continuar con la obra, ya que parece que le están metiendo muchas trabas para que desista. Me comentó que dejó el proyecto a cargo de otro arquitecto de la empresa para poder estar más tiempo conmigo, lo que claramente hizo que se acelerara mi frágil corazón.
La velada está siendo todo un éxito, hablamos de muchos temas y algún que otro coqueteo, me siento totalmente plena a su lado, hasta que noto que mi acompañante no deja de estar buscando algo o mejor dicho a alguien, lo que hace que me desconcierte su actitud, al principio pienso en dejar de darle tanta importancia, pero eso cambia cuando lo veo volver a hacerlo, dejo mi postre aún lado y lo confronto.
-¿Ocurre algo? Te veo bastante pensativo- suelto sin poder contener mi curiosidad.
-Nada, solo que me pareció ver a alguien conocido- lo noto muy nervioso, haciéndome dudar, hasta que entiendo el porqué de su comportamiento, cayendo en la triste verdad, aunque yo este encantada con esta velada y sintiéndome la mujer más afortunada, sólo soy la otra, la amante, la roba novios.
-Voy al cuarto de baño- antes de que pueda decir algo, me levanto y retiro cuánto antes, al llegar, miro mi reflejo en el espejo sintiendo culpa y desprecio, por mi, por estar haciendo lo mismo que hizo Sara y su ahora prometido conmigo -¿Cómo pudiste caer tan bajó? ¡Estúpida!¡Maldita estúpida!- Lloro a causa de la ira que siento, soy un manojo de nervios, tardó unos minutos, hasta que decido que debo volver para acabar de una buena vez con este absurdo teatro, todo por dejarme llevar por mis sentimientos hacia Ben, pase por altos mis valores y principios por un hombre aunque se que ese hombre es el dueño de mi corazón hace ya bastante tiempo, pero eso no justifica el haberme metido en esta situación, no puedo pensar que este se atrevió a jugar con ambas, por qué si es tan grande el sentimiento por mí, por qué no dejó a su novia para estar a mi lado, en cambio prefirió estar con ambas a la vez y así no perder a ninguna, pero eso se acabó.
Camino de vuelta hacia nuestra mesa, lo veo sentado preocupado, pero no dejó que su estado interfiera en mi decisión, ya está decidido, esto se acabó.
-Sele¿Te sientes mal?¿Por qué tardaste tanto?-
-Claro que me siento mal y todo es por tu causa, tú eres el causante de esto que siento-
-¿Por qué?¿Qué hice? No entiendo nada-
-No entiendes ¿como me haces sentir al meterme en este juego sucio que llevas?, me estás involucrando en tu triángulo amoroso ¿creías que yo aceptaría muy alegremente tus migajas de amor? Pues no, no las aceptó y aunque estoy muy agradecida por todo lo que hiciste nuestra relación solo será profesional, no quiero ser la amante de nadie- Este queda mudo, no dice ni una sola palabra lo cual termina por confirmarme que eso es lo que el pretendía, dejarme en el puesto de la amante, es un maldito, este no dice nada sigue callado haciéndome sentir peor de como ya me sentía, tomo mi bolso y salgo del restaurante, veo un taxi, le hago señas haciendo que este pare, le doy la dirección y voy de nuevo al hotel.
Entró cuánto antes a mi habitación, miro los horarios de tren, veo que sale uno en media hora, no lo pienso dos veces compro el boleto y acomodo todo en la maleta, me deshago del vestido y maquillaje, lo más rápido posible, no quiero estar aquí cuando él regrese, lo único que quiero es estar en mi casa, segura y sin tener que cruzarme con él por lo menos por lo que queda de la noche.
Con mi valija ya lista, bajó al primer piso a avisar y dejar la llave en recepción pero al estar ahí lo veo, antes de que esté me descubra, me escondo, esperando a que suba al ascensor, cuando lo hace, salgo de mi escondite, le entregó al chico de recepción la llave y cuando este intenta avisar a Ben lo detengo, le digo que llegó muy cansado y que este sabía que me retiraba por temas personales que debo resolver, este pide un remis para que me lleve hasta la estación, me saluda y desea un buen viaje, yo le agradezco por todas sus atenciones y me voy con gran nostalgia por qué amé este lugar y me duele horrores tener que despedirme de esta forma, en este lugar me llevo varios recuerdos que quedarán para siempre en mi corazón.
