Victoria Casani es una chica de 24 años con poca vida social, su día a día se basa en ir a la universidad y forjar su carrera a base de esfuerzo y dedicación, ella sueña con ser arquitecta, ella vive con sus padres Carmen que es de Asendencia Mexicana y Lorenzo que es Italiano, también con su hermano mayor Gabriele, viven en la hermosa ciudad de Florencia- Italia.
Leonard Loannou tiene 38 años, es un excelente decano de diseño arquitectónico y hace poco se unió a (Università degli Studi di Firenze, UNIFI) en Florencia, el es de origen Griego, pero decidió mudarse a este nuevo país, ya que le llegó una excelente oferta de esta universidad, a la que por mucho tiempo estuvo aplicando, pero hasta hace unas semanas se le dió la oportunidad gracias a su excelente perfil profesional.
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CAPITULO 19
Me equivoqué, no lo pensé bien, y lo que dices es verdad, lo mejor es que ellos lo sepan y que estén preparados si esas fotos llegan a caer en sus manos, aunque nunca estaré preparada para que ellos vean estás imágenes, sería un shock y algo difícil de superar, no quiero que eso pase, quiero recuperar esas fotos a como de lugar -- hablé con decisión.
- Yo me encargaré de eso, pero prométeme que vas a hablar con tus papás, tienes que confiar en ellos, no ocultar nada, sé que no soy quien para darte esos consejos, no tengo la mejor relación con los míos, pero pude conocerlos un poco y puedo decirte que mejores papás no pudiste tener, eres afortunada, además no tienes por qué enfrentar tus luchas sola, mira como has vivido, analiza todo eso y te darás cuenta que lo único que has hecho es reprimirte y estoy casi seguro, que tú personalidad, incluso tu forma de vestir ha cambiado después de lo que te pasó -- agaché la cabeza, por qué eso fue lo que pasó, me dediqué a sufrir en silencio.
- Gracias por todo lo que me has dicho, de verdad aprecio cada una de tus palabras, y te prometo que hablaré con ellos -- el sonrió, y luego recordé que no pude darle una respuesta cuando estábamos en el teatro -- tu.. tu me preguntaste si te iba a dar una oportunidad de conocernos mejor y ver qué puede pasar entre nosotros --
- Si, pero si aún no te sientes preparada para darme una respuesta, yo puedo esperar -- intervino, yo puse un dedo sobre sus labios para evitar que dijera algo más.
- No necesito pensarlo, mi respuesta es si, quiero conocerte, quiero que me conozcas, y cuando lo hagas, quiero que no me ocultas nada, si algo no te gusta, si algo te molesta, me lo dices por favor, prometo hacer lo mismo, lo único que si te pido, es que cuidemos esto, no quiero que tengas problemas en la universidad, y yo no quiero estar en boca de todos, ya me falta poco para graduarme y poder cumplir mi sueño -- su mirada estaba llena de felicidad y orgullo.
- No te preocupes, aunque va a ser difícil para mí verte en la facultad y no poder abrazarte libremente -- comencé a reír al escucharlo.
- No va a ser más fácil para mí, pero tendremos que hacer el esfuerzo-- una duda surgió de repente -- Leonard-- dude un poco.
- pregúntame lo que quieras, no te contengas -- tomé aire.
- ¿Eres divorciado? ¿O algo que tenga que saber respecto a tu estado civil?-- finalmente pregunté y de nuevo, pude apreciar esa sonrisa coqueta.
- Se que son 38 años, es lógico que por mi edad tengas esa duda, pero no, si he tenido novias, pero nunca he estado interesado en el matrimonio, la relación de mis padres es compleja y al verlos a ellos decidí que no quería eso para mi vida-- tener una conversación tan abierta me hizo preguntar.
- ¿Se llevan muy mal?-- el asintió.
- Lo que sigue de mal, se llevan pésimo, mis padres son divorciados desde hace muchos años, pero como son tan orgullosos y tacaños ninguno de los dos se quiso ir de casa, entonces ya te imaginarás como es la vida de una pareja divorciada viviendo bajo el mismo techo, para mí fue un infierno, por eso decidí dejar mi país y buscar otros rumbos lejos de ellos -- sentí compasión por el, para mí es tan lindo ver a mis padres, que a pesar de los años aún se dicen
- Lo siento mucho, aunque quizás me vayas a decir que eso no te afecta, si analizas el hecho de que no quieras casarte, en cierta forma si cambio tu forma de ver el amor -- dije.
- Quizás cambió mi perspectiva sobre el matrimonio, no me quiero casar, pero no le temo al amor, quiero enamorarme, pero sin matrimonio-- algo en mi, me hizo sentir triste, aunque comparto su forma de pensar.
Soy testigo del amor que se tienen mis padres, y del hermoso matrimonio que formaron, pero a raíz de lo sucedido deseché toda posibilidad, incluso de encontrar el amor, pero aquí estoy, intentado algo y nada más y nada menos, que con mi Decano y 14 años de diferencia, no se que será de nosotros, pero no me quedaré con las ganas de intentarlo.
Leonard pagó la cuenta y salimos del restaurante, nos despedimos y cada uno se subió a su auto, conduje un largo rato, ya que estábamos en dirección opuesta a nuestro barrio, Leonard llegó primero ya que ví su auto parqueado fuera de su casa, yo guardé el mío en la cochera y entré.
- Hola mami, hola papi--dije al verlos sentados en la sala viendo su novela favorita-- ellos me miraron y sonrieron.
- Hola hija, tu hermano nos avisó que hoy llegabas tarde ¿todo bien en la universidad? ¿comiste algo?-- preguntó mi mamá.
- si, todo está bien, hoy entregamos nuestra parte del trabajo, y ya comi, iré a mi cuarto -- antes de retirarme recordé más palabras de Leonard "promete que hablaras con ellos" me detuve y giré hacia ellos-- mamá, papá -- dije con seriedad -- tengo algo que contarles -- mi padre dejó su postura relajada y se sentó tenso en el sillón.
- ¿que pasó?-- preguntó directamente.
- subiré a dejar mis cosas y bajo en un momento, también llamaré a mi hermano, el debe estar con nosotros -- sin esperar respuesta subi las escaleras, fui a mi cuarto dejé mis cosas y me cambié de ropa, luego le escribí un mensaje a Gabriele, le avisé que debía estar en casa, le adelante que iba a contarle todo a nuestros padres.
Y como si tuviera turbo en los pies, mi hermano llegó en menos de quince minutos, yo bajé y nos sentamos todos en la sala, mi madre me miraba expectante, mi corazón dolía, por qué soy consciente que esto que les voy a contar los va poner muy mal, pero es algo que debí haber hecho hace mucho.
- Mamá, papá, Gabriele, ustedes son mi vida, y no pude pedir mejores padres, ni un mejor hermano, antes de comenzar, quiero que lo tengan presente, lo que hoy voy a contarles, va a marcar un antes y un después-- la mirada de mi hermano era de tristeza, el ya se imagina lo que va a pasar, mientras que mis padres me miraban preocupados.