Feray: Resplandor De La Luna

Ya Emir había tomado mi cuello y había profundizado el beso, pero la realidad me golpeó, lo que estoy haciendo no está bien, y es mi culpa, yo soy la que lo he provocado, y en estos momentos, esto no está bien y no es lo correcto, me alejé de forma sutil.

- Emir, lo siento, de verdad lo siento --

- ya te dije que no debes disculparte, ambos somos adultos, es difícil controlar un impulso por la atracción que sentimos-- comentó.

- Si, pero no está bien, nos van a tachar de infieles, y seré igual o peor a Khan, y estoy lejos de querer que me comparen con él, ¿me entiendes?-- sonrió con amargura.

- Claro que sí, entonces te prometo que mantendré mi distancia -- dió media vuelta y camino en dirección a su auto.

- Emir, Emir por favor, no terminemos la cita asi-- dije.

El se detuvo y giró hacia mi-- Lo mejor es detenerme en este instante, no quiero empeorar la situación, me estás comenzando a gustar mucho, pero debo cuidar mis sentimientos, y en estos momentos comprendo que para ti es difícil, estás en medio de algo -- yo caminé hacia el y lo tomé de la mano.

- Dame tiempo -- dije.

-¿cuánto?--

- en mes y medio, está farsa acaba, quizás un par de meses más, no lo sé, quiero ser prudente -- logré decir.

- Te conocí en un mal momento, pero te comprendo, aunque te confieso que va a ser difícil resistir las ganas de besarte, pero lo haré, no te preocupes -- abrió la puerta del copiloto y me indicó que me subiera, así lo hice.

Luego se subió y comenzó a conducir de vuelta a casa, al llegar me dejó dónde me recogió, nos despedimos y se fué, tuvimos una gran cita, pero el vacío quedó en mi pecho.

Entré a mi casa, mi mamá y mi papá estaban tomando el té, me acerqué y pedí su bendición, no me preguntaron nada, entonces me fui a mi habitación.

Tomé una ducha, me puse mi pijama y me acosté a dormir, prefería hacerlo rápido y evitar pensar, mi mente no me iba a dejar dormir después.

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Pasaron mis dos semanas de Vacaciones, hice todo lo que debía hacer, ahora tengo una casa para darle a mi hijo, Khan ya envió un equipo de limpieza, también contrato una empresa que se va a encargar de pintar y reparar los deterioros que tenga la casa, y estuvimos mirando un catálogo en línea para amueblarla, escogí las cosas para el cuarto de mi bebé, aunque pedí que todo fuera color nude, aún no le he dicho que es un niño, y es mejor que se quede así, tengo un presentimiento.

Elegí mi recámara, un juego de sala, comedor y los electrodomésticos para la cocina y la zona de lavandería, lo que yo pidiera, él me lo estaba dando, pero decidí que ya era suficiente, aun así, para él, aún no lo era.

- Me voy mamá, papá, nos vemos más tarde -- dije poniéndome los zapatos para salir.

- Que Alá te bendiga mi amor, cuídate mucho y no se te olvide comer lo que te preparé --

- Claro que sí, no se me va a olvidar, lo prometo --- abrí la puerta y para mí sorpresa, allí estaba Khan en la carretera.

Recostado en un hermoso auto rojo, tenía una gran sonrisa dibujada en su rostro, yo terminé de bajar los escalones y me acerqué a el un poco confundida.

-Hola, ¿que haces aquí tan temprano?-- pregunté.

- Vine a ver a mi hermosa prometida antes de ir al trabajo, y a traerte esto -- puso las llaves que tenía en sus manos en la mía-- es para ti-- señaló el auto.

- es ... ¿es en serio? ¿me estás hablando en serio? ¿no es una broma?-- el negó.

- Por supuesto que no, este es tu dote, mis padres y yo acordamos que sería un auto, se que te va a servir bastante, también te tengo otro regalo -- me entregó una tarjeta, tenía mi nombre.

-¿para que es ésto?--

- Es una tarjeta de crédito, está a tu nombre, pero ya pagué un cupo de un millón de Liras, puedes comprar todo lo que quieras, ropa, joyas, lo que sea, solo ten en cuenta el tope, cuando ya se te esté acabando, me dices y pagaré un nuevo cupo--

-¿y por qué está a mi nombre?-- se la respuesta, pero el no lo va a admitir.

- Por qué es lo mejor, no podré estar contigo todo el tiempo cuando vayas a hacer tus compras, así que es mejor que sea así-- respondió.

- Pero la casa, la tarjeta-- no me parece correcto, yo no he puesto una sola libra.

- y este auto, también está a tu nombre, pero no pienses en eso, yo seré el proveedor, incluso puedes dejar de trabajar, yo podré mantener a nuestra familia -- concluyó.

No sé cuáles son sus planes, pero esto ya es demasiado, yo solo sonreí para no levantar sospechas y luego lo abracé.

- Muchas gracias, me encantan mis regalos, diles a tus padres que les agradezco mucho los presentes que me dieron -- el asintió.

- Les diré, ahora me tengo que ir, debo ir a la oficina -- comentó y yo asentí -- ¿tienes licencia para conducir, verdad?--

- si, la tengo-- el sonrió.

- perfecto, entonces hoy puedes estrenar tu auto, no te puedo llevar, así que te toca ir por ti misma-- me dió un beso y se fué.

Mi padres salieron a penas lo vieron alejarse, ellos estaban viendo todo por la ventana.

- Hija, ¿que es eso?-- preguntó mi padre.

- Un auto-- dije y ellos rieron.

- Si, si, eso lo sé, pero por qué te lo dió --

- dijo que era el dote que me enviaron sus padres y el-- mi madre negó.

- Ese tipo es un sinvergüenza --

- Si mamá, pero ahora creo que es demasiado -- comenté.

- Para nada, no digas esas cosas, la humillación que el nos ha hecho, no tiene precio, esto es poco para lo que ese mal nacido debe pagar -- sentenció mi padre.

- Cariño, pero esa deuda la tiene con Alá, él deberá pagar sus pecados con él, mi hija siente que ya es demasiado dinero involucrado, y eso la está haciendo sentir mal, yo la comprendo, lo de la casa, lo hizo por el hijo que están esperando, pero el resto, está demás-- agregó mi madre.

- Tienen razón, ¿entonces que piensas hacer?-- preguntó mi padre.

- Aún no lo sé, pero algo se me va a ocurrir -- dije y me despedí de ellos, como ya era tarde, me fui en el auto.

Debo pensar que haré con la tarjeta y el auto.