La Esposa Del Villano

- ¿divorcio? Clarice, creo que estás exagerando, que no te agrade Odette no significa que debas hacer algo bajo absurdo.

- ay por favor, lo único que te importa es tu reputación y la de esa chica. Pero no me culpes, eres tú quien no ha sabido darle su lugar a su hija...

- a Noelle nunca le falto nada, cumplí con su caprichito de aprender a pelear, si no fuese por eso, quizás ella pudo haber conquistado al príncipe.

- a tú hija nunca le importo el príncipe, pero como solo te importa Odette, no te diste cuenta.

- ¿entonces por qué trata mal a Odette? Empeoro cuando supo que el príncipe eligió a Odette.

- tú solo crees en lo que Odette dice, jamás le diste el beneficio de la duda a Noelle.

- todo mundo sabía lo que Noelle era, no iba a permitir que mi hija fuese tan mal criada.

- pero si la mal criada es Odette, al menos Noelle no hizo un berrinche al irse a Darkness y sabes que, creo que fue lo mejor que le pudo pasar, según sus cartas, el gran Duque es mejor padre que tú.

El Barón se pone de pié golpeando la mesa con las manos.

- ¿que dices? Soy su padre no hay nadie que pueda...

- no, no eres su padre, nunca lo has sido, Noelle nunca ha sido tu hija, solo la has tratado como si ella fuese la adoptada.

- por supuesto que he sido un padre para ella ¿de donde crees que ha sacado para vivir durante estos años?

- el dinero y lo material no lo es todo y pronto te arrepentirás de tus palabras.

Dicho esto, la Baronesa se retira dejando en el escritorio el documento de divorcio, sellado por el rey, lo que significa que fue aprobado y aún si el Barón se niega, el divorcio ya es un hecho. Clarice solo se va a su habitación para terminar de empacar, más tarde cuando esta subiendo sus cosas al carruaje, llega Odette.

- madre ¿se va de viaje? ¿Padre también va? Quiero ir.

- no, voy sola, iré a casa del gran Duque Ivanov, si quieres saber más pregúntale a tu papito.

- ¿eh? Si va con mi hermana, yo también quiero ir, la extraño...

- ahorra tu hipocresía, seguramente solo quieres ir porque quieres quitarle a su esposo, no eres más que una envidiosa.

- madre ¿por qué dice esas cosas? Yo que la quiero tanto...

Odette se abraza a su doncella mientras solloza, por supuesto todos los que están presentes sienten pena por Odette, Clarice ignora todo, solo se sube al carruaje y se pone en marcha, mientras que Odette frunce los labios.

Por otro lado, Noelle tuvo que asistir a una fiesta de té con las nobles del territorio, Lilly fue con ella, para poder decirle quien es quien, aunque todas estaban en un solo sitio, hablaban entre ellas sin prestarle atención a Noelle, aunque a ella eso no le importaba, le daba igual lo que esas mujeres hablarán, fue hasta que usa se acercó, rápidamente Lilly le susurro quien era y el probable motivo por el cual se acercó.

- mucho gusto señorita Noelle ¿cierto?

- Duquesa Ivanova para quienes no son cercanas a mi.

Noelle muestra una sonrisa radiante mientras que se queda en silencio el lugar debido a la manera en la que respondió.

- p-por supuesto...aunque debe ser duro para usted, casada con un hombre como Raizel Ivanov.

- si, es algo cansado, hacerlo casi todas las noches deja mi caderas adoloridas.

Aquella chica muestra una molestia por sus palabras mientras que Noelle le sonríe con burla.

- que graciosa, aunque eso no evita que su esposo...sea...cariñoso con otras damas.

- supongo que no, pero yo tengo una ventaja que ellas no, él es mío.

Noelle levanta la mano mostrando su dorso, pues era la mano donde estaba el anillo de matrimonio.

- eso de nada sirve si no puede ser la única.

- pero tampoco de nada sirve abrirle las piernas, si al final solo será una más del montón.

Aquella chica se levanta y se va, estaba furiosa y es porque Lilly le dijo que esa chica buscaba a Raizel seguido y creyó que por ser una noble clase alta, él se casaría con ella después de pasar la noche juntos, pues Raizel suele pasar el tiempo con nobles de clase baja y no toma en serio a esas chicas, de ese moco aquella chica descubrió que no importa su nivel, jamás sería tomada en serio por el joven Duque.

- eso fue increíble señorita Noelle.

- Edna siempre esta de presumida, pero usted le cayó la boca.

- bueno, en realidad no me gusta ser molestada y en Diamond solía ser el blanco de algunas chicas.

- ¿en serio? Seguramente tenían envidia de usted.

- yo una vez fui a Diamond, muchas decían que usted acosaba a su hermana porque era adoptada...

- si, eran los rumores y Odette les hacía creer que todo era verdad, pero siendo sincera, yo nunca le hice nada, solamente la corregía cuando hacía algo mal, pues su educación era muy cuestionable, ustedes saben que si decimos algo mal, seremos blanco de críticas y quien sale más fastidiada en nuestra familia.

- si, si, comprendemos eso, es una pena que su hermana no haya sabido apreciar lo que hacía por ella.

- ¿dijo Odette? Acaso se refiere a Odette Le Blanc...la futura esposa del príncipe heredero.

- si, esa misma, solo espero que sepa llevar bien el cargo de princesa heredera.

- me han contado que la reina no la acepta, dijo asistir a la boda pero no va ayudar a organizar nada.

Las chicas siguen hablando, comentando que no muchos nobles están de acuerdo en que ella sea la princesa heredera, además de que creen que su absurda manera de ser es un problema pues no parece poner de su parte en nada y solo se la pasa asistiendo a fiestas con sus amigas. Después de un rato, de la platica, se escucha el murmullo de las chicas, para cuando se dan cuenta, era Raizel quien había entrado, todas se sorprenden que éste ahí pues era una reunión solo de chicas, Edna al verlo se acerca a saludarlo pero pasa de largo.

- esposa, he venido por ti, se hace tarde y me preocupa lo que pueda pasar.

Noelle casi escupe el té que estaba bebiendo antes las palabras de Raizel, algo debe estar tramando para aparecerse así en plena reunión; el suspiro de las chicas se deja escuchar junto con los murmullos.

"Que envidia, mi esposo nunca viene personalmente"

"Y así siguen diciendo que sigue siendo un mujeriego"

"Es todo un caballero"

Noelle solo hace mueca pero se pone de pié sonriendo hasta estar cerca de Raizel.

- que dulce eres cariño, no esperaba que vinieras por mí.

- estaba cerca y pensé en darte una sorpresa esposa.

- claro que ha sido una sorpresa. Bueno chicas, me retiro, fue un gusto conocerlas.

Noelle dirige su mirada a Edna y le sonríe con burla, pues vio como ella se acercó con la intención de llamar la atención de Raizel. Ambos se retiran de dicho salón para dirigirse al carruaje.