ESCLAVOS DEL DESEO.

Jehan.

Han pasado un mes desde la muerte de Mateo y, aunque lo odio a muerte, siento algún tipo de remordimiento desde su muerte. Me confesó ciertas cosas y me pidió que cuidara de su hija. Mía, la cual no tengo idea cómo está estos días. No he podido dormir, recordando sus palabras y que la cuidara de Rubí. Por lo que veo, Rubí sigue pareciendo lo que no es.

Iván me informo que Anastasia llamo para preguntar por Mateo. Esa señora es toda una alimaña, sabe todas las jugadas. Ella era una gran amiga de mi padre y puedo decir que como una hermana. Me sorprende todo ahora. Mateo mató a mi padre por venganza. También entiendo por qué Anastasia se distanció de mi padre; él mató a su padre. Hay tantas cosas por resolver y que algo en mí me dice que tengo que hacerlo.

Por otro lado, Rubí ya regreso y, aunque siento deseo de pedirle el divorcio, creo que no es el momento. Está aún afectada por el bebé y ahora la muerte de su padre, aunque no fue al funeral. Iván aún no consigue mucho sobre la vida de su madre antes de que tuviera a Rubí, solo lo normal, y me doy cuenta de que hay algo detrás de todo eso. Me parece que Mateo tenía razón, y que él tenía muchas cosas por decir, pero el maldito de Dominik lo mato antes de tiempo. También me doy cuenta de que Lucía y Dominik tienen algún tipo de relación y no es bueno, puesto que él es mi peor enemigo.

Salgo de mi oficina y me encamino al departamento. Tengo un nuevo chófer, puesto que Iván está investigando personalmente a Lucía. El nuevo chófer es más joven y aparenta unos 30 años, pero es bueno en lo que hace. Hoy le pedí que no viniera por mi, quiero pasar por la mansión de mi madre. Tengo días sin hablar con ella desde que me informo de lo que había pasado con Rubí. Es medio día, así que siento que me quedaré con ella a almorzar.

A mitad de camino, mi celular suena varias veces hasta que entra una llamada de Iván, la cual contesto enseguida.

📞— Iván. ¿pasa algo? Que has encontrado?

📞 — Señor nada de lo normal, pero si algo que no le gustará sobre la señora Rubí.

📞—¿ Que has encontrado, Iván ?

📞— Primero que todo señor, usted se encuentra solo. No está Antonio con usted.

📞— No, ivan. Estoy camino a la mansión de mi madre, pero habla de una buena vez.

📞— La señora Rubí lo ha estado engañado todo este tiempo desde que estuvo en Nueva York, y aquí lo sigue haciendo. En este momento, se encuentra en el departamento con Antonio en la habitación. Pero eso no es todo. El bebé que supuestamente perdio nunca existió, como lo dijo el señor Mateo.

Freno enseguida. Le creí todo a Mateo, menos lo del bebé. No puedo creer como Rubí puede jugar con algo tan delicado como lo es un bebé.

📞— Muy bien, Iván. Gracias por la información. Sigue buscando y lo que encuentres, enviamelo a mi correo personal.

📞— Muy bien, señor. Solo le pido que revise los mensajes que le acabe de enviar. Allí se encuentra las pruebas de todo. Hasta luego señor.

Dice y cuelgo la llamada, para buscar los mensajes de Iván, al abrir los mensajes me encuentro con fotografías. La primera aparece ella entrando a un hotel en Nueva York con Antonio, muy felices. La segunda muestra a Rubí y Antonio en la habitación de mi departamento. Me siento feliz, pero al mismo tiempo, molesto. Ya me podre deshacer de ella, pero no se quedará asi, me engaño y lo sigue haciendo.

Sigo mi camino normal y almuerzo con mi madre. Charlamos y le muestro lo que me envió Iván. Ella me vuelve a recalcar que siempre tuvo razón y que Rubí no es lo que dice ser. Si siempre tuvo la razón y yo caí ciegamente en sus mentiras. Que bueno que no la amo. Tampoco siento ningún tipo de sentimientos por ella.

— Que bueno que me tienes como madre — dice mi madre y no entiendo.

— ¿Como así, madre?— digo algo confundido.

— Pues tu matrimonio es falso. El sacerdote y todo lo demás es falso. Yo no quería que una arpía como Rubí llevará nuestro apellido. Así que ahora es más fácil. No le digas nada y solo haz que firme el divorcio falso — dice muy relajada y vaya que mi madre es todo una cajita.

— Madre, te creí capaz de todo, menos de estos — digo con una sonrisa.

— Lo se, el apellido Volkov no lo tiene que llevar cualquiera, y cuando te casas de verdad, el matrimonio tiene que ser por toda la vida. Así que tienes que estar seguro a quien eliges cómo esposa.

...ΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩ...

Mía.

Ha pasado un mes desde lo que pasó con mi padre. He tratado de convencer a mi tía que me diga quien lo mato, pero no quiere. Dice que es muy peligroso que lo sepa.

También he estado pensando en irme a la ciudad. Ya tengo bastante dinero ahorrado y quizás pueda terminar mi carrera y empezar a trabajar. También podre recuperar todo lo de mi madre de las manos de Lucía.

— Lo siento, Mía. Pero no te lo puedo decir. Corremos peligro, y aún más sí se llegan a enterar — dice mi tía, sin ningún tipo de preocupación o tristeza por la muerte de mi padre.

— Tía, mi padre le debía algo a ese hombre, ¿verdad?— le digo. Estoy segura de que le debia algo, porque no lo puede matar así como así.

— Si, mi niña. Tu padre tenía una deuda muy grande con el lobo, y este ya se la cobro — Dice mi tía, mirándome fijamente — Pero también debes de saber que no fue el quien lo mato directamente. El lo secuestro para matarlo, pero llegó otro enemigo de tu padre y le disparó.— añade mi tía.

— Igual todo fue culpa de él, del lobo — digo levantandome.

— Yo se todo lo que tu padre le debía a esos hombres, y por eso entiendo la actitud de ellos. Y me gustaría decirte quien lo mato, pero no puedo. corremos peligro si lo llegas a saber — dice mi tía desde su lugar.

— Está bien, tía. Dejaré el tema a un lado por ahora, pero quiero volver a la ciudad. Quiero terminar mi carrera, enfocarme en la herencia de mis padres, saber que ha hecho Lucía y porque no ha aparecido— digo un poco más relajada.

— Te apoyo en todo, mi niña, pero hay un problema — dice mi tía ahora sí con cara de preocupación.

— ¿Cuál? — pregunto .

— Los bienes de tu padre se pasaron a nombre de Lucía. El abogado me llamo y me informo de todo, y que estaba difícil que pasarán a tu nombre — dice mi tía con preocupación.

—¿ Que? No puede ser, tía. Todo me pertenece a mi y no a esa arpía que solo buscaba el dinero de mi padre. Ahora que no esta, se le hizo más fácil. No me interesa ese dinero, pero no voy a permitir que se lo quede ella y lo derroche como le de la gana— digo molesta.

— Lo se, mi niña. Por eso te he conseguido una excelente oportunidad — Dice mi tía con una pizca de felicidad.

Mi tía no es cualquier persona. Siempre tiene un plan detrás de casa cosa que hace. Se que todo lo que hace es por alguna razón y que siempre piensa en el futuro.

— El exesposo de Rubí te llevará con el y te ayuda a terminar tus estudios. Solo con una condición: que el mismo te explicará — dice de nuevo sin rodeos .

— ¿Que? El esposo de Rubí, no. No puedo aceptar nada de ese hombre— digo sin rodeos .

— Exesposo — dice mi tía, enmarcando la palabra — Recuerda que todo fue un engaño de Rubí, y pues no se qué pasó con ellos y como Jehan se enteró de todo, pero te ayudará con tal que tú lo ayudes a el.

— No, tía. ¿Como puedo ayudarlo yo a él ?— digo molesta.

— En muchas cosas, Mía. Es un bien para ti. Además, eres amiga de su hermana odias a Rubí. El también te puede ayudar a recuperar los hoteles de tus padres — dice mi tía, y me está convenciendo.