Una relación que comenzó con un error terminó en un amor sincero, pero estuvo salpicada de piedras afiladas y dolorosas.
Nadine, una exitosa futura doctora, tuvo que experimentar la destrucción de su futuro debido a una violación cometida por un hombre desconocido. El hombre que estaba bajo la influencia de estimulantes le robó a Nadine su castidad y plantó semillas en su útero.
El hombre se arrepintió de sus acciones y trató de encontrar a Nadine, que había desaparecido desde el incidente.
Hasta que finalmente su encuentro se convirtió en el momento que inició esta dulce historia de amor.
Nueve meses después del incidente. Arthur, el mafioso y principal pediatra del hospital, tiene un pequeño paciente de una semana en estado grave.
Arthur quería conocer a los padres del bebé y tenía la intención de regañarlos porque vio una condición tan grave.
Quién hubiera pensado que la madre del bebé era la niña que había estado buscando todo este tiempo.
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Llamada por la noche
-Estoy con el pequeño, ¿quieres verlo o no?- El mensaje entrante logró emocionar a Nadine.
Arthur sonrió ante la pantalla. Tenía la intención de volver a hacerle una broma a Nadine al no contestar la llamada, simplemente sostuvo su teléfono celular mientras sonreía.
Las llamadas cesaron y Arthur entró en pánico, temiendo que Nadine se enojara. Inmediatamente llamó a la mujer que amaba.
-Hola- La gran sonrisa de Arthur era claramente visible en la pantalla del teléfono celular de Nadine cuando apareció por primera vez.
-¿Dónde está? ¿Está durmiendo?- Nadine preguntó con entusiasmo.
-¿No dijiste que estabas dormida? ¿Cómo es que contestaste el teléfono?- Bromeó Arthur.
-Isshh, quieres hacerme una broma, ¿verdad?- Nadine preguntó ferozmente.
-Eres linda cuando te enojas- pensó Arthur.
Tutt...tutt... se perdió la conexión.
Arthur se sorprendió cuando Nadine desconectó el teléfono. Entró aún más en pánico cuando imaginó a Nadine desvariando contra él.
Esta relación ligeramente mejorada volverá a empeorar debido a malentendidos.
Arthur volvió a llamar a Nadine, esta vez contestó, pero lo que apareció en la pantalla no fue el rostro de Nadine sino el techo de la habitación.
-Lo siento, solo estaba bromeando, hay un pequeño a mi lado, ¿no quieres verlo?- preguntó Arturo.
De repente, el rostro de Nadine apareció nuevamente en la pantalla del teléfono celular de Arthur.
Sus miradas se encontraron, ambos estaban en silencio y avergonzados.
-Oye, pequeño allí esta tu mami- dijo Arthur, dirigiendo la pantalla de su teléfono celular hacia el bebé.
Los ojos de Nadine se llenaron de lágrimas:
-Lo siento mi niño, no puedo abrazarte ahora- dijo Nadine emocionada.
Arthur, cuando lo escuchó, también se emocionó.
-Madre, ten paciencia, definitivamente me recuperaré, aquí esta papi para cuidarnos- bromeó el hombre con Nadine, fingiendo usar una voz de niño.
Nadine se rió del sonido que hizo Arthur.
-¿Por qué este pequeño tiene mi nombre? ¿Quizás me admiras?- le preguntó Arthur a Nadine.
-Jeje, cuando estaba en la universidad había un joven médico cuyos logros eran realmente buenos, era conocido por ser inteligente.
-Lo admiraba y también me gustaba su nombre, como un personaje de juego de acción.
-Hmm... seguramente ese hombre tiene mucha suerte de ser admirado por un hermoso ángel como tú- bromeó Arthur nuevamente.
-Pero resulta que ahora que te conozco, eres realmente feroz y le gusta empujar- dijo Nadine nuevamente en respuesta a las palabras de Arthur.
Arthur tosió cuando escuchó las palabras de Nadine.
-Lo siento, doctor, he cometido un error- dijo Nadine inocentemente.
Arthur se limitó a mirar a Nadine en silencio con una mirada extraña e ilegible.
"¿Está enojado el médico?", preguntó Nadine."Sí", respondió Arthur casualmente.
"Yo... lo siento mucho", Nadine comenzó a entrar en pánico.
"No puedo simplemente perdonar, hay condiciones que tienes que cumplir", dijo Arthur con picardía.
"¿Que señor?" -Preguntó Nadine.
"Acompáñame a desayunar mañana por la mañana, no más negativas", ordenó Arthur.
"Está bien, mañana cocinaré para ti", ofreció Nadine.
"No, no puedes estar cansado, yo prepararé todo, no discutas", volvió a intimidar Arthur.
"Sí", respondió brevemente Nadine.
"Ahora descansa un poco, ya es tarde, ¿has bebido tus vitaminas y jugo de verduras?" preguntó Arturo.
"Sí", respondió Nadine brevemente.
"La buena chica bromeó Arthur mientras aplaudía.
"Eres extraño", murmuró Nadine.
"Te amo", murmuró Arthur mientras miraba el teléfono celular.
Se miraron pero con diferentes estados de ánimo, Arthur lo miró con una mirada llena de amor mientras Nadine lo miraba con una mirada extraña mezclada con confusión ante la actitud y atención del doctor.
