Me Enamore De La Hermana Equivocada.

Emma finalmente esta recuperada, sus mareos terminaron y su herida cicatrizo perfectamente. Sus días en esa casa cada vez son mejores, Andreas realmente es el hombre con el que quisiera estar toda su vida... Caballero, dulce, leal, como siempre busco en un hombre, y pensó que jamás encontraría.

A pesar de que su esposo trabaja todo el día, el siempre se hace un ratito para estar con ella, charlar hasta altas horas de la noche, tomando un trago, aunque al otro día una taza de café no alcance para sacar el cansancio, ambos disfrutan de su compañía y sin dudas Emma no quiere separarse de él, no quiere que este contrato termine.

Sus noches junto a él son tranquilas, el jamás se ha propasado con ella, al contrario, es Emma quien a mitad de la noche lo abraza y duermen así, hasta el otro día, ella siente que debe ser sincera con Andreas y contarle sus traumas, esta segura que el entendería y la ayudaría a sanar.

Es un nuevo día y Emma se levanta, hoy va a probar volver a cabalgar con gitana. Al abrir sus ojos ve que Andreas ya no está en la habitación, durmiendo a su lado, pero siente que la ducha del baño está abierta, debe estar dándose una ducha para despertarse, anoche hablaron durante horas, sin importarles que al otro día debían trabajar, en realidad solo Andreas, aún Emma, por orden médica, no puede volver a hacer tanto esfuerzo con los animales.

Emma se levanta de la cama, intenta cambiarse lo más rápido posible, con su ropa habitual, para que Andreas no la vea desnuda y baja por el desayuno. Con ayuda de vania, ponen todo en una bandeja, y Emma la lleva de nuevo a su habitación. Cuando entra, ve que Andreas está desnudo, solo con una toalla que tapa sus partes íntimas, pero aún así Emma se pone colorada de la cabeza hasta la punta de los pies y Andreas, que se acerca a ella, debe tomar la bandeja para que esta no se caiga, apoyándola sobre una mesa.

-buenos días Emma - dice Andreas dedicándole una hermosa sonrisa a su esposa.

-buenos días andreas... Discúlpame por no tocar antes, juro que no vi nada - Emma esta muy avergonzada, aun no puede mirarlo, ya que Andreas no hizo nada para cambiarse, sigue desnudo delante de ella, con una sonrisa burlona en los labios, sabe que a Emma la pone incomoda y vergonzosa y se pone hasta más bonita así. - puedes cambiarte Andreas por favor.

-oh Emma, de verdad quieres que me cambie?... Esta bien - dice haciendose el desilusionado. Andreas toma su ropa y va a cambiarse al baño, pero antes le dice-prepara el desayuno Emma, enseguida salgo.

Emma tomo la bandeja y preparo el desayuno en la cama, esperando a Andreas, cuando esté sale del baño perfectamente cambiado, se acerca a Emma y le da un beso en la frente con mucho cariño.

-buenos días querida Emma, gracias por ir por el desayuno, realmente necesito ese café - Andreas toma su taza de café y comienza a tomarlo, esta tan cansado, pero no se arrepiente de pasar horas hablando con Emma.

-lo siento Andreas, es mi culpa-Andreas abre los ojos sorprendido, no puede creer lo que está diciendo esta mujer.

-estas loca Emma? Porque es tu culpa?

-porque... Soy yo la que te distrae todas las noches y no te deja dormir.

-Emma, por el amor de Dios deja de decir tonterías, tu tienes la culpa, pero de ser condenadamente bella y volverme loco - Andreas intenta acercarse para darle un beso, pero ella se aleja levantándose de la cama - porque haces eso Emma? A que le tienes miedo?

-lo siento Andreas, perdóname, quizás algún día logres entenderme. - dice Emma algo triste, este sería el momento oportuno de decírselo, pero aún tiene miedo de hacerlo.

-lo entenderé seguro, pero solo será cuando tomes el valor de contarmelo.

-sin dudas lo haré Andreas, solo dame tiempo.

-esta bien Emma - Andreas la toma de la mano y hace que nuevamente vuelva a sentarse a su lado - te prometo algo, no volveré a besarte, a menos que tu me lo pidas o me des permiso para hacerlo - no puede creer Emma lo increíble que es su esposo, no solo es guapo, millonario, es el hombre más bueno y dulce de este planeta, como pudieron llevarse tan mal en su momento.

-gracias Andreas, aún no entiendo como tu y yo nos pudimos llevar mal cuando nos conocimos.

-nos llevábamos mal porque somos dos tercos y con el mismo carácter, queremos siempre ganar, pero atrás de tu terquedad y de tu carácter, hay una niña frágil, dolida, que no puede sanar, y eso es lo que quiero hacer Emma, sanar tu alma, para que puedas ser tu misma, la mujer bella que eres, sin estar escondiendote detrás de esa ropa.

-te quiero tanto Andreas tanto - Emma lo abraza con toda su alma, y es verdad, ella aun tiene que sanar, pero a pesar de todo lo ama con todo su ser y su corazón.

Después de desayunar y con permiso de su esposo, Emma se dirige a las caballerizas, quiere salir a cabalgar con gitana, despacio, tranquila, como se lo prometió a Andreas :

-si tienes mareos Emma, urgente te bajas y buscas a Aquiles, no te vayas muy lejos por favor - le pidió Andreas mientras desayunaban.

-no te preocupes Andreas estaré bien, gracias por cuidarme.

Emma llega a las caballerizas y allí se encuentra con Aquiles, quien aún sigue extraño, no deja de bajar la cabeza cuando llega ella, algo le pasa y lo averiguara.

-buenos días Aquiles, como estas? - saluda Emma con esa sonrisa que la caracteriza.

-buenos días señora Emma, que bueno que esta por aquí, gitana ya ha comido y esta preparada por si quiere dar un paseo con ella.

-claro que si Aquiles no sabes cuanto la extraño, pero tu estas bien? - pregunta Emma intentando sacarle información.

-señora Emma yo... Si estoy bien, no se preocupe por mi.

-Andreas el otro día me dijo que te había dado el día libre porque estabas muy cansado, si no te sientes bien puedes irte a descansar.

-no se preocupe señora Emma, estoy bien de verdad - pero por supuesto que no se encuentra bien, no puede creer estar ocultandole algo tan grave a sus jefes, ellos que son tan buenos y considerados con el.

-esta bien aquíles, me haré la que te creo, iré a cabalgar con gitana, sabes que si necesitas algo puedes hablar conmigo verdad?

-claro que lo se señora Emma - y eso es lo que más le duele al pobre aquíles, saber que ellos confían tanto en el y el no puede hablar por miedo.

Pasan varios días y finalmente llega el cumpleaños de Emma, sus 27 años, es la primera vez que la pasará lejos de su gemela, pero sabe que Anna está bien, le mando un mensajes de cumpleaños muy temprano diciéndole que la amaba y que siempre estarían juntas, a pesar de las distancias.

Emma se despierta temprano, con el mensaje de Anna y no puede volver a dormirse, por lo que decide levantarse, aún es de noche afuera y Andreas duerme a su lado. Todavía no puede creer que Anna haya dejado ir a este hombre tan increíble, Emma se siente cada día más enamorada de él, pero aún sus miedos y traumas le impiden ser feliz con su esposo.

Emma intenta levantarse sin hacer ruido ni un movimiento extraño, para no despertar a Andreas, pero este lo hace, toma a Emma del brazo y la acerca a él abrazándola con dulzura, dándole un beso en la frente.

-feliz cumpleaños mi querida Emma - Emma se siente tan feliz y amada en sus brazos que no quiere soltarse de ellos, andreas vuelve a dormirse y ella sin poder soltarse también se duerme.

Horas después se despierta completamente sola, andreas ya no está a su lado, seguro ya es tarde y se fue a trabajar, pero en ese momento ve que su esposo entra con el desayuno, un ramo de flores y una caja de regalo.

-oh Emma, quería darte la sorpresa. Despertarte yo... Pero bueno ya que estas despierta, feliz cumpleaños mi querida Emma - Andreas intenta besarla pero recordó su promesa así que solo le da un beso en la frente, el beso más tierno de todos, piensa Emma.

-gracias Andreas, esta todo increíble - Emma esta al borde del llanto, nunca pensó que alguien sería capaz de algo así, traerle el desayuno a la cama, un ramo de flores precioso y darle ese beso tan increíble.

-ay no Emma, no llores por favor, no quiero verte llorando.

-no estoy triste Andreas, es emoción nada más... Nadie jamás, me había hecho algo así.

-entonces tendrás que acostumbrarte porque siempre lo haré Emma - siempre? Esa palabra se queda en la mente de Emma, que significa para siempre? Se pregunta... Hay un futuro para ellos, después de que termine el contrato?.

-a que te refieres con siempre? - pregunta Emma, no puede quedarse con la duda...

-Emma, sabes a lo que me refiero, sabes muy bien lo que siento por ti, sabes muy bien que no quiero que este contrato se termine, que no quiero que te separes de mi. - Emma no puede creer las palabras que salen de la boca de Andreas, es un hombre tan increíble.

-Andreas yo... No se que decir...

-no necesito que digas nada, solo quiero que esta noche, a las 8 estés lista, quiero llevarte a cenar al mejor restaurante de la isla, que dices? Sara ha hecho un vestido increíble para ti.

-gracias Andreas, gracias por quererme así

Como todos los días Andreas se fue a trabajar y Emma, aun sin poder dedicarse a los animales se quedó en la casa, por supuesto que todos los empleados, incluyendo la abuela la saludaron con besos y hasta le dieron un humilde obsequio las empleadas de la casa, Emma es una gran jefa y todas las muchachas la quieren mucho. Pero todavía no se le va de la cabeza el pequeño regalo que Andreas llevó por la mañana, un regalo que no le entregó y que volvió a llevarse.

Emma esta cocinando algo con vania para el almuerzo de Andreas y de repente le llega un mensaje, cuando ve la pantalla de su celular se lleva una gran sorpresa al ver que es un mensaje de Aquiles, pidiéndole que se acerque a las caballerizas que tiene algo que decirle... Así que Emma deja todo lo que esta haciendo y sin pensarlo se dirige al lugar para hablar con el muchacho, seguro algo le pasa, por eso habrá actuado tan raro todo este tiempo.

Aquiles está esperando a Emma, en las caballerizas aterrado, pero sabe que tiene que hacerlo, seguro sus jefes lo protegerán de las garras de esa maldita de Sara, cuando ve a la señora Emma acercarse a él, su corazón comienza a latir con fuerzas, por un momento se arrepiente de lo que está por hacer, pero no Aquiles no puedes ser tan cobarde, se reta a sí mismo, debes ser valiente y decir toda la verdad.

-Aquiles dime que sucede aquí estoy, sabes que puedes contar conmigo - Emma inspira mucha confianza en el joven, quien sin pensarlo comienza a hablar.

-señora Emma he descubierto quien estuvo detrás de su intento de asesinato, quien golpeó a gitana y quien ha estado robando en la finca, durante todos estos años.