Ellas eran muy buenas amigas, ambas se conocieron en un set, ellas querían llegar a ser actrices de telenovelas, y ¿por qué no?, actuar en alguna película.
Pero el destino les tenía preparada una jugarreta, que nadie se esperaba. Esta historia es completamente sacada de mi imaginación, de modo que todos los personajes, pasajes y nombres, son totalmente ficticios. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia.
NovelToon tiene autorización de Maria Esther para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Embarazo de Itatí y parto de Kimberly.
El programa en el que participaba Kimberly e Itatí iba viento en popa. Cada día ganaba más admiradores más fans.
Pronto pasaron los meses y Kimberly ya estaba a un mes de dar a luz.
Eso y el cáncer que la aquejaba minaran su salud enormemente...
Ya tenían todo preparado para que en cuanto diera a luz pudiera empezar a recibir las quimioterapias.
En todo momento, Noé estuvo a su lado, no la dejaba para nada.
En ese tiempo, por obvias razones él dejó de ver a Itatí, quien no estaba dispuesta a perderlo, pero aún así aceptó pero solo por el tiempo que durara el embarazo.
¿Cómo es posible que sigas queriendo estar con ella cuando está llena de cáncer?
Tú y yo podemos seguirnos viendo. Yo no te estoy pidiendo que te divorcies.
Entiéndeme Itatí, yo la amo, no la puedo dejar en estos momentos que más me necesita.
Está bien, voy a esperarme ese tiempo que dé a luz, pero después, a ver cómo le haces, pero te divorciarás de ella.
.
.
Oh, mi amor, no sabes que feliz me haces.
Itatí se abalanzó sobre su esposo, ¿de verdad te pone feliz tener un hijo?
Claro, amor, es lo que más deseo. Esto hay que celebrarlo. Esta misma noche te llevaré a cenar a un restaurante de lujo.
Amor, voy a tener una gira por Estados Unidos, fíjate que mi programa ha pegado mucho y tengo que ir a presentarlo a otros lugares. Le dijo Daniel cuando estaban cenando.
La música se oía tenue, invitando a las parejas a bailar.
Pero amor, ¿qué voy a hacer sin ti?, ¿cómo es posible que te vayas?, ¿cuánto tiempo?
No te preocupes, mi amor, será por poco tiempo. Solamente que necesito presentar el programa porque está siendo muy demandado, me van a pagar bien.
No es por dinero, amor, yo estoy embarazada y tienes que estar conmigo en todo el proceso del embarazo.
Lo sé amor pero es por nuestro bien. Es para que no te falte nada a ti y a mi hijo.
¿Y cuándo te irás?
Mañana a primera hora. Así que regresemos ya porque tengo que preparar la maleta.
Una vez que llegaron a su casa, Itatí le ayudó con sus maletas.
Esa noche Daniel la hizo suya varias veces, A ella le gustaba mucho eso, pero no se comparaba en nada a Noé que era un amante perfecto. Había dejado de verlo durante el embarazo de Kimberly porque todo el tiempo la estuvo cuidando, ya que ella no se sentía nada bien.
Por lo pronto se conformaba con su esposo que nunca la había dejado sola.
Itatí no había tenido otra crisis ya que se tomaba sus pastillas religiosamente. Hasta se sentía muy bien, su actitud había cambiado notablemente.
¿Sabes qué, amor?, tienes que ir con tu ginecólogo y explícale que estás tomando pastillas, tal vez las tengas que suspender por un tiempo.
Tienes razón, mañana mismo iré.
Al día siguiente muy temprano, Daniel se despidió de su esposa.
Cuídate mucho, amor y por favor, no te olvides de que estoy aquí esperándote.
¿Cómo crees que te voy a olvidar, mi amor?, claro que no, te amo demasiado y amo mucho a nuestro hijo.
Bueno, vete pues, no se te vaya a hacer tarde. Adiós mi amor, te quiero mucho.
Y yo a ti..., un beso marcó la despedida..
.
.
El parto de Kimberly estaba ya a la vuelta de la esquina. Noé la llevó inmediatamente al hospital.
Tranquila, amor, todo estará bien, ya lo verás.
Mientras tú estés conmigo nada puede preocuparme, no me dejes sola, por favor... Kimberly estaba muy nerviosa.
En cuanto entraron por la puerta de urgencias, ya la estaban esperando los camilleros, Noé les había hablado en el trayecto.
No lo dejaron pasar y se quedó en la en la sala de espera.
Noé repasaba todas las cosas que le había hecho a Kimberly, y la verdad se sentía muy arrepentido.
Se había prometido a sí mismo no volver a ser infiel a su esposa. Estaba feliz porque sabía que de un momento a otro nacería su hijo.
Kimberly luchaba por dar a luz a su hijo, se sentía muy mal, pero la ilusión de saber que su hijo pronto nacería la llenó de una fuerza increíble.
Varias horas después el cuarto de Kimberly se llenó por completo del llanto de um bebé.
Es una niña, le dijo el doctor a Noé cuando salió de la sala de partos, ambas están bien.
Gracias a Dios, Noé vio la cara del doctor y presintió que algo malo pasaba.
Levantó una ceja a modo de interrogación...
Es hora de que su esposa reciba las quimioterapias. Por favor, tráigala a más tardar en una semana. Urge que reciba el tratamiento.
Sí, doctor.
Al día siguiente Kimberly fue dada de alta, Noé sacó una cita para dentro de una semana.
Gracias, la niña es preciosa.
Como Kimberly tenía que estar yendo a las quimios, Gudelia le cuidaba a la niña.
.
.
Varios meses después... ¿qué te pasa amiga? Mi esposo está muy raro conmigo, parece que ya se cansó de mí. Ya no me abraza ni me besa como antes.
No te preocupes, así actúan todos los hombres, solo es una etapa. Él volverá al redil, ya lo verás...
Eso espero, me siento muy mal, sin fuerzas para nada.
Bueno, relájate, y mira todo con optimismo. Todo pasa.
Aunque quiera ser optimista no puedo, siento que mi marido me está engañando con otra.
A Itatí se le hizo un nudo en la garganta, por un momento sintió remordimientos, pero inmediatamente se compuso. Yo no creo que eso sea verdad amiga, estás sugestionada, de seguro él te es fiel.
Tiene como tres meses que ya no se acerca a mí ni me hace cariños. Por eso te digo que se ha de haber aburrido de mí y tiene otra.
Tú mira para adelante amiga, estoy segura de que solo son imaginaciones tuyas.
Pues que tu voz sea de profeta. Lo amo tanto que no soportaría perderlo.
No lo perderás, solamente es una etapa, ya verás .
Por un momento Itatí pensó que estaba haciendo mal, sintió remordimientos por su amiga, pero ella no podía evitarlo, ella estaba enamorada de Noé y no pensaba dejarlo, así tuviera que pasar por encima de su amiga.
"Ni modo, son gajes del oficio. Así es la vida". Se dijo para sí misma. "Si no soy yo, puede ser cualquier otra".
No sufras más amiga, él recapacitará, tú ten fe.
Eres una gran amiga, gracias. Kimberly e Itatí se abrazaron.
(¿No sintieron como una puñalada por la espalda?).
.
.
¿Cuánto te falta para dar a luz?, fue la pregunta de Kim para su amiga.
Solo dos meses.
¿Y ya sabes el sexo?
Sí, será un niño.
Me da alegría por tí.
¿Cómo van tus quimios?
Pues fíjate que en estos tres meses he sentido que el cáncer se está apagando, me siento bien dentro de lo que cabe.
¡Qué bueno, Kim!, ojalá y pronto salgas de esto.
Gracias.
ya ni ganas de seguir leyendo