Las gemelas Aziz, vivirán cada una asu manera el maltrato emocional por parte de sus esposos, pero la valentía y determinación de una de ellas, las motivara a revelarse y pondrán a estos hombres de rodillas ante ellas, con el apoyo de su hermano.
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CAPÍTULO 18
Hakim se levantó de la silla y salió del despacho sin siquiera despedirse, al llegar a la entrada de la casa, llamó a su esposa con un grito? nada cortés
__ AMIRA, NOS VAMOS
Amira, al oírlo retuvo el aire, pues bien sabía que él no había logrado su cometido y que arremetería en contra de ella, pero conocía a su hermano y su difícil carácter, no quería ocasionar un enfrentamiento entre ellos, ella amaba a esos dos hombres y cualquiera de los dos que saliera lastimado, le dolería mucho
Así que ella respiró hondo y salió a su encuentro, pero sorpresivamente, Hakim no le dio tiempo ni de despedirse, la levantó en brazos, frente a toda su familia y se la llevó hacia el auto, cualquiera pensaría que era una escena romántica, hasta el ingenuo corazón de Amira que se llenó de emoción, pero su cerebro la disipo en pocos segundos, más al ver que la mirada de su marido reflejaba odio y rencor,
Ella sonrió para tranquilizar a sus padres y le hizo señal de adiós con la mano y su madre sonrió y su padre se quedó preocupado, pero Abdiel se le acercó corriendo antes de que él se subiera al auto,
__ espera, Cuñado, a mí no me engañas y algo si te voy a decir, si veo siquiera un rastro de lágrimas en los ojos de mi hermana, quemaré tu maldita mansión, arruinaré tus empresas y te partiré cada hueso de tu maldito cuerpo, ¿entendiste? _ le preguntó el joven tomando el cuello de la camisa del jeque
__ Tu a mi no me amenaces mocoso, sabes bien que ella es mía y que puedo hacer con ella lo que se me pegue la gana y la ley me ampara
__ Jajaja, maldito cobarde, me sabe a mierd* las leyes, la sangre es la sangre y yo soy de la nueva escuela, así que ya lo sabes, será mejor que cuides tus pasos, porque por cada lágrima que mi hermana derrame, será un día menos de vida para ti, así que estas avisado _ dijo el menor soltándolo y asomándose al vehículo y dirigirse a su hermana
__ Tu no estas sola y lo sabes, conoces la palabra clave, solo úsala y quemare media Arabia para ir por ti, te amo, cuídate _ dijo su hermano lanzándole un beso a su hermana con la mano y caminando de regreso a la casa,
__ hijo por Alá, no te busques problemas _ dijo su madre tratando de tranquilizarlo, pero Abdiel prácticamente la ignoró y sacó su teléfono para hablar con su hermana mayor, ya que para él, el maldito jeque había dejado al descubierto sus intenciones y ellos no pensaban permitirlo
Mientras tanto en el vehículo, Hakim estaba furioso de verdad tenía ganas de golpear a ese maldito mocoso entrometido y cortar su cabeza como un trofeo, pero por otra parte lo entendía y quisiera que su esposa fuese aunque sea un poco como sus hermanos.
Hakim siempre juró que se encontraría una mujer fuerte y decidida, que se defendiera y defendiera a sus hijos, por eso escogió a la gemela rebelde y altanera,
Pero al parecer el destino le jugó una mala pasada, la madre de Hakim, era sumisa y cobarde y eso la llevó a que una concubina de su padre, la golpeara casi hasta matarla,
Hakim tenía cinco años cuando eso pasó y cansado de los maltratos de la mujer hacia él y hacia su madre, buscó un jarrón de cerámica y golpeó a la mujer en la cabeza para que su madre pudiese escapar de sus pies, ya que la estaba pateando en el piso, pero ni aun así su madre se defendió solo lo agarro y corrió a su cuarto a esconderse, después su padre llegó y fue por Hakim para golpearlo por el atrevimiento y aún así su madre tampoco lo defendió a él,
Ese día su padre le dio una buena golpiza y su madre solo se quedó como una tonta observando y solo esperó a que su padre lo soltara para recogerlo y curarlo, pero en la noche de ese mismo día Hakim aún se sentía mal, y fue al cuarto de su madre para que le diera algo para el dolor y la vio a través de la puerta teniendo sexo con su padre y gimiendo y diciéndole que lo amaba y Hakim desde ese día sin poderlo evitar comenzó a aborrecerla, por eso Hakim sentía odio y repulsión por esas mujeres tontas y sumisas, él incluso había pensado viajar al extranjero para buscarse una mujer de otro país, pero tampoco le gustaban las mujeres liberales, por eso la gemela rebelde encajó perfectamente en el perfil que él buscaba, pero ahora con este fraude que le hicieron, tenía una tonta sumisa como esposa, incapaz de defenderse ella ni a sus hijos, aunque él jamás seria capaz de maltratarla físicamente, pero psicológicamente era otra cosa, ella debía despertar y convertirse en una leona para defenderse o jamás será digna de ser la madre de sus hijos.
Hakim salió de sus pensamientos y observó a Amira jugar con sus dedos en señal de nerviosismo y ansiedad y sintió tantas ganas de gritarla y de sacudirla a ver si por lo menos le decía una grosería, pero él la llevará al límite, la convertirá en lo que quiere así la pierda en el proceso, porque él tiene muchos enemigos y necesita a una verdadera hembra que pueda defender a sus hijos en caso de que él llegase a faltar y si algo estaba seguro era de que esta Amira, era una tonta.
Amira al sentirse observaba por su esposo, trató de ignorar su mirada penetrante, pero Hakim tenia otros planes,
__ bueno querida esposa, como me tocó quedarme con lo peorcito, quiero que sepas que estableceré algunas nuevas normas de convivencia, pero por hoy descansa y duerme como una niña y ya mañana se abrirán las puertas del infierno para ti.
Amira tragó grueso, le volteó los ojos y Hakim se sonrió, al llegar a la casa él se bajó y entró sin siquiera abrirle la puerta y ella solo se bajó detrás del él, ante la mirada de pena de sus hombres y de la estúpida de Habib que salía siempre a recibirlo a la puerta y le daba un beso en los labios como si ella fuese la esposa, pero esta vez, Amira pasó por su lado y solo los ignoró, ella había decidido simplemente enterrar su amor y eso haría, pero primero debe sufrir para que sus heridas sean tan graves que no puedan cicatrizar, así el olvido sea su único alivio.
Hakim solo fue a su despacho, buscó un portafolios y salió de la casa para volver a subir a su auto, Amira solo se encerró en su habitación, se dio un baño de espumas en la bañera, con sales aromáticas y se relajó, él le había dicho que mañana empezaría su calvario así que ella disfrutaría este día como su último día de tranquilidad.