Me enamoré de John a primera vista pero me obligaron a casarme con su hermano Damon
NovelToon tiene autorización de SilvinaTracy para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capítulo 18
Damon
Mientras más huye de mí, más me provoca someterla y hacerle todo lo que deseo. Le causo miedo y se que aunque suene enfermo me excita.
Se bien que es virgen, su comportamiento lo delata y su modo de cubrir su hermoso cuerpo. La primer mujer que se resiste a estar conmigo es mí esposa y es quien quiero que coopere para así saciar mis ganas de ella.
En casa tengo mis empleados que me informan cada movimiento de ella por si se le ocurre escapar. Me informaron que llegó un paquete para ella y debió pagar una suma insignificante de dinero por él. Una de mis encargadas de limpieza le pregunto que era eso y ella le respondió riendo que era una sorpresa para mí. Ahora no sé con qué me saldrá ésta chiquilla...
Llegué de trabajar y la busqué en casa, estaba en la habitación estudiando tan concentrada que ni me escuchó entrar. Procedí a acercarme lentamente y besarla. No reaccionó enseguida pero me apartó ni bien lo hizo y yo sonreí. La acosté a la fuerza y me puse encima de ella.
-¿Qué crees que haces?- preguntó intentando quitarme
-Quiero que mí esposa me bese como debe de ser- los colores subieron a su rostro, estaba enojada
-Bien- me dio un casto beso en los labios y se apartó apoyando su cabeza en la almohada nuevamente- *listo, ahora sueltame
-Eso ni siquiera es un beso
-Si lo es, ahora sueltame
-Esto es un beso- la besé nuevamente y lamí sus labios pidiendo acceso pero ella permanecía inmóvil- si no me respondes nos quedaremos aquí hasta que lo hagas*- puso los ojos en blanco pero al acercarme la besé y aunque no sabía cómo responder no me apartó. Era tan inexperta y yo encantado de enseñarle. Me separé de ella para mirarla a los ojos.
-¿Jamás te han besado?- apartó la mirada- *respóndeme
-No, ¿Feliz?
-Dejame besarte, aún no lo has hecho como espero y te dejo en paz*- dije con seriedad
la besé nuevamente y solo respondió, fui suave, acaricié su lengua con la mía, exploré su boca completamente y solo cuando estuve satisfecho la dejé. Sus labios estaban rojos y un poco hinchados, perfectos.
Ser el único que la ha besado me enorgullece pero la siento aún más mía. Quiero ser el primero en todo pero también el último en su vida.
-Mucho mejor, aprendes rápido- le dije y salí riendo de la habitación
-Estupido- escuché que gritó
Cenamos en silencio y cuando acabamos de comer ella rápidamente fue a la habitación a cambiarse para dormir, a ver con qué pijama lo hace. Ésta chica es más difícil de lo que pensé. Cuando abrió la puerta del baño estalle en carcajadas, estaba ridícula, superaba todos los límites. Una abeja, no lo podía creer.
-Que original, ¿Haces esto para que no pueda tocarte?- pregunté pero no obtuve respuesta- *si lo haces por eso puedes estar tranquila, aún seré paciente contigo pero cuando desee más de ti no tendrás más opción, ¿Entiendes?
-No quiero acostarme contigo, entiende eso por favor. ¿No te alcanza con todo esto?
-No, no me alcanza, quiero todo de ti.
-Muerete*
-Cuando quiera te haré mía, espero que lo sepas, solo acéptalo
-¿*Haces todo esto para que no haga la anulación? Te preocupa ser menos hombre por eso ¿Verdad?
-Lo hago porque te deseo y mientras más huyes y te cubres como por ejemplo con eso- señalando su pijama- más deseo descubrir que escondes y estar entre tus piernas*
Se quedó sin palabras, no creo que quiera seguir usando esos ridículos pijamas sabiendo que aunque sea con ellos la deseo. Quiero poseerla, robarle su tan preciada virginidad y que cada vez que vea su cuerpo piense en mí