A veces no podemos sumergir tanto en una historia, en una persona, que se nos olvida por completo nuestro mundo y obligaciones.
Este es el caso de benjamin, un chico de 25 años obsesionado con la perfección. Adicción que lo llevara al límite de sus límites mentales.
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Cap 16
Después de cruzar dos o tres palabras más, luisa se despidió, al cerrar la puerta, Thomas fue a la cocina a preparar la comida, estoy más que seguro que estaba rezando en su interior
-Thomas
Entre a la cocina y lo llamé, este se hizo el loco y empezó a picar el pimiento, para hacer unos burritos de carne
-Thomas
-jum
-pedazo de imbécil.
Thomas volteo a verme, en sus ojos había algo curioso, no sé si arrepentimiento o se estaba creando una explosión que terminaría en una carcajada
-bueno ya, no la toque.
-y ¿por qué carajos, me hiciste empujarla por la escalera?
-se lo merecía.
-como es esto posible Thomas, secuestras a una persona que no te ha hecho nada, y luego dices que se merece más golpes.
-Benjamín, ¿tú no te acuerdas, verdad que no? No te acuerdas como te desprecio luisa, como llegabas triste después de que esa perra no pudo decirte en tu cara que tenía a otro, tú no viste como se burlaba de ti con sus amigas.
Guarde un silencio que me estaba pesando en el alma, era cierto. había olvidado como conocí a luisa, es profesora de bellas artes en la misma universidad en la que enseña Thomas, un día que fui por él en el carro, la vi, le ofrecí aventó, y desde ahí me dedique a invitarla a salir, ella aceptaba con gusto, me daba besos se insinuaba y luego se perdía por días o semanas, no contestaba el celular y salía más temprano de la universidad para que no la viera. Me parecía un plan estúpido por lo cual decidí enfrentarla un día, llegue a la universidad a eso de las 2:00 pm antes de su salida, llegue parquee el auto y al bajarme la vi a tres estacionamientos del mío, besándose con un tipo que estaba recostado sobre una camioneta Chevrolet 4x4.
Volví a mi auto, y conduje a mi casa, saqué del sótano la pala, fui al patio y cabe un hoyo, tres días después, el hoyo se encontraba lleno, con el cuerpo del imbécil de la 4X4
-y lo de las escaleras lo hice para que te desahogaras, aunque fuera de forma inconsciente.
Me acerqué a Thomas y a este se le llenaron los ojos de curiosidad
Le di un golpe en la cabeza y le di las gracias, este sonrió y siguió picando los vegetales, tome asiento en el comedor auxiliar en la cocina
-esa no va muy lejos.
-¿cómo?
Thomas volvió a centrar sus ojos en mí
-cuando llegue a la casa, vi su autoparqueado fuera de la casa, le puse un clavo en uno de los neumático trasero
Thomas estalló en carcajadas al igual que yo, nos reímos por un largo rato, le volví a dar las gracias y subí a mi habitación para seguir con lo mío
...
-¿a qué hora nos vamos?
Thomas pregunto antes de morder el burrito que tenía en la mano, eran ya las 7:00 pm y nos encontrábamos sentando comiendo en el comedor, en la sala
Consulte mi reloj de mano y le respondí
-tenemos que salir de la casa, a media noche
-¿por qué a esa Hora?
-porque a esa hora quede con ese par de locos.
-tengo sueño
-Thomas...
-si, si, ya dejaré de quejarme y cuando lleguemos serás tú quien hable.
-no era eso lo que iba a decir...
-¿entonces?
-vamos a hacer esto y nos separamos.
-aún no entiendo por qué tenemos que hacer eso Benjamín, acá puedes conseguir una mujer, casarte y tener uno o dos engendros.
-quiero tener una vida tranquila, lejos del cementerio que tenemos en el patio.
Thomas guardo silencio y siguió comiendo, al terminar, lave los platos, luego me dispuse a esperar la hora indicada recostado en el sofá
-hermano, voy a dormir hasta que sea la hora, ¿me despiertas?
-sí.
-¿no vas a prender la tele?
Agarre el control que estaba sobre la pequeña mesita que se encontraba entre la tele y el sofá, prendí el televisor, escuche como Thomas subía las escaleras, estaban dando las noticias, quería pasarlo para ver caricaturas, pero me detuve al ver una cara familiar, la señorita que quiso entrevistar a Thomas "cuando capturó al verdadero secuestrador" estaba hablando con una anciana, tal vez de uno 60 a 70 años de edad.
La señora lloraba pidiendo justicia, la señorita le pidió que hablara más acerca de lo que quería, la anciana mostró una foto de un sujeto corpulento, de cabello café oscuro, ojos café claro, tez blanca y una sonrisa perfecta.
Lo reconocí, la señora pedía que siguieran con la búsqueda, su podre hijo no podía quedar en el olvido, no puede ser un caso más, repetía
Han pasado más de cuatro meses y aún no dan con el pobre hombre. La de las noticias, le dio palabras de aliento a la anciana y pasó con otra noticia
El de la Chevrolet 4x4, susurre para mí, antes de cambiar de canal
...
-Benjamín... Benjamin...
Desperté luego de sentir un fuerte sacudón
-Benjamín, te quedaste dormido, ya es hora de irnos
-¿qué hora es?
-11:30 pm
Me levante, lave mi cara, salimos de la casa, nos acercamos un poco a la carretera principal y agarramos un taxi