Endemoniadamente Peligrosas

Bastian:

Caminé sin apartar la mirada de Guido, él y yo teníamos mucho por hablar. Todo dependería que tanto acepte de culpa… por que tengo el tiempo que se necesitaba para hacer las cosas con pruebas siempre.

Guido: Te quedó muy bien el numerito.

Bastian: No tengo nada que ocultar, pero sabía que siempre había algo en ti que no me da buena espina.

Hice seña que tomara asiento, él solo fue pisando las fotos que estaban regadas en el piso, se sentó reposando los codos en los braceros uniendo las yemas de su dedos mientras me miraba fijamente con ganas de pelear por lo sucedido.

Bastian: llevaré el caso de Dina, es mejor que lo haga a que lo tome otra persona que no sea capaz de conocer su historia.

Guido: Mis hijos no están en juego, ella no los quiere para dedicarle tiempo, los quiere para utilizarlos en mi contra y hacerme volver a su lado.

Bastian: Dina no mintió en decir que sabían tú y Elena sobre que estaba viva. Ella pensó que se lo dirías, sin embargo el cargo que tiene en su contra Dina es mucho más grande.

Guido: No creo que necesite ir a prisión para hacerle ver su suerte. Tarde que temprano caerá en mis manos y la torturaré cobrando la vida de mis hijas.

Asentí con la cabeza, Guido ya tenía su sentencia y se la respetaba, sostuve la carpeta que tenía las fotos de Guido con Dina, no estaban siendo para nada comprometedoras, pero estas verdad son las que se deben hablar para tener la seguridad de la mujer en sus manos, cosa que no pasaba con ellos.

Bastian: Lo mejor era decirle que estaba con vida.

Guido: Tú y yo aunque no parezca tenemos muchas cosas en común.

Bastian: Querer vengar lo que le han hecho a Elena, por supuesto.

Guido: No, no me refiero a eso, me refiero a que siempre decimos lo que nos conviene y lo que no, lo ocultamos.

Entrecerré los ojos Guido sabía como dar golpes bajos y de que manera…

Bastian: El hecho es que tu matrimonio con Elena no es válido.

Guido: Dina acudió a ti para darle un golpe bajo a Elena.

Bastian: Como dije llevaré el caso, sé como manejar este tipo de cosas, sin embargo, hay algunos puntos que quiero tocar contigo. Por que Dina va tras todo lo que le pertenece y eso te incluye.

Respiró dejando caer un poco hacia atrás la cabeza, sinceramente no era mi intención arruinar la relación entre Guido y Elena, pero Elena tarde que temprano se iba a enterar…

La puerta se abrió de un gran golpe, se trataba de Dimitri demasiado molesto, bajó la mirada hacia las fotos del piso.

Dimitri: ¿Cómo PUDISTE BASTIAN? ELENA ESTÁ PASANDO POR UNA SITUACIÓN DIFICIL.

Bastian: ¿Por qué tratan de subestimar a Elena?

Dimitri: POR QUE LAS COSAS SE HACEN CUANDO SE DEBEN, AHORA HEMOS QUEDADO CON LAURA PARA LA ÉLITE.

Bastian: La hija de Guido.

Dimitri: No estoy con tus bromas, Elena pudo esperar a saber la verdad.

Me levanté muy molesto, no me parecía la manera que querían manejar esto.

Bastian: SIEMPRE TRATAN DE MENOS PRECIAR LA INTELIGENCIA DE ELENA, SIEMPRE CON LO MISMO, PREFIERO QUE SEPA LA VERDAD QUE CUANDO TENGA A DINA DE FRENTE Y LE DIGA SI GUIDO ME VISITABA, VENÍA HACIA MI, NO SEA CON EL PENSAMIENTO QUE AHORA TUVO… POR QUE ELENA SABE DEL PASADO DE GUIDO Y LO PRIMERO QUE LE DIJO ES QUE SE ESTABA ACOSTANDO CON DINA CUANDO SABEMOS QUE NO ES ASÍ.

Guido: Basta… No haré nada en contra de Bastian, entiendo su punto de vista. Tambien el tuyo Dimitri. Ahora estamos en una situación donde deberíamos estar unidos.

Bastian: Lamento tener que haber sido quien le diga la verdad. Pero su trabajo de ustedes es quitarle de la mente que pudo haberse acostado Guido con Dina.

Dimitri: Sabes que es tan imposible eso.

Bastian: usando las palabras correctas podrán hacerlo. Te escucho Guido.

Decidí tomar asiento necesitaba escuchar las razones de Guido. No solo quería tener la versión de Dina que lo que ella quería era obtener de regreso a Guido.

Guido miraba muy atento a Dimitri, no fuera ser que diga algo que lo pudiera condenar antes de terminar de hablar. Sonreí negando con la cabeza, ¿Qué podía esperarme de Guido?

Reposé las manos sobre la mesa entrelazando sus dedos, miraba a Dimitri que decidió sentarse.

Bastian: Sinceramente Guido es bien conocido que nunca estuve de acuerdo que te casaras con Elena, la manera tan baja que lo hicieron por que ambos lo hicieron me molestó mucho, Elena es una gran mujer de un corazón que nadie ha podido adueñarse de él.

Guido: yo Si.

Bastian: Si, es cierto, ella ha demostrado que te ama, pero ¿tú a ella? No me hagas perder el tiempo, sé la necesidad que tenías de ella, los dos vieron el potencial que tenía, no hablo de su conocimiento en su profesión. Elena, la niña abusada por su padre, la niña que cuidaba a sus hermanitos a pesar DE LO MAL QUE LE IBA EN LA VIDA.

Me puse de pie sin dejar de retar a Guido con la mirada, era el momento que por mucho tiempo estaba esperando, sabía lo que desde un principio Elena prometía en la vida de los italianos.

Bastian: La niña que poco a poco empezó a salir por si misma, en el reformatorio su presencia muy notoria, no obedecía, no cumplía con las reglas, siempre estaba buscando la manera de sobresalir.. LO HIZO… aquella niña que se le iluminaban los ojos al saberse libre. Esa mujer que tomó muchas decisiones incorrectas y a su vez demasiadas CORRECTAS. Esa mujer que brilló en la universidad para ganarse un puesto en la defensa que estaba siendo peleada. Elena esa mujer que demostró que las heridas que OTROS LE CAUSARON PUDO SANARLAS, PERO QUE LA VIDA LE PUSO EN SU CAMINO A UN BUEN HOMBRE LLAMADO ALEXANDER. Él, él si le dio su lugar de reina, siempre pendiente en lo que ella quería y necesitaba, cubría perfectamente sus necesidades de esposa y de mujer. ESA MUJER QUE PERDIÓ SU PRIMER HIJO Y AUN ASÍ SE LEVANTÓ DESEANDO TENER MUCHOS MÁS, QUE NO LE IMPORTÓ LO QUE LOS DEMÁS PUDIERAN DECIR DE ELLA. LA MUJER PERFECTA QUE SOBRESALÍA ANTE MUCHAS QUE SE SOMETÍAN A UN HOMBRE. ELENA NO, ELLA NUNCA LO HIZO.

Ambos me miraban sin la intención de interrumpir, por que saben que lo que estoy diciendo es la verdad.

Bastian: Esa mujer que día y noche cubría los estándares para ser una de ustedes. Si, ¿verdad? Una mujer que ha pasado por mucho dolor, por muchas decepciones con ganas de tomar algún día la venganza entre sus manos. La ideal para alguno de ustedes, pero sus ojos se fueron más allá descubriendo que Elena TENÍA LA CUALIDAD DE LA SUPERVIVENCIA, ESO… ESO FUE QUE HIZO QUE TOMARAN LA DECISIÓN QUE TENÍA QUE SER ELLA… UNA MUJER QUE CONOCE EL DOLOR A FONDO, QUE SU DESPERTAR ESTABA TAN LATENTE Y QUE SABÍA DE ARMAS POR ALEXANDER Y DE PELEA POR ÉL. ¿CREEN QUE NO ME DI CUENTA DE SUS INTENCIONES?

Dimitri: siempre estuviste de acuerdo, ¿Recuerdas?

Miré de reojo a Dimitri, no es que estuviera del todo de acuerdo, pero no esperaba que la trataran desde un principio con la punta del dedo para formar parte de ellos.

Bastian: Estuve de acuerdo que les representara, pero NUNCA QUE SE CASARA CON UNO DE USTEDES, LO PLANEARON TAN BIEN QUE SABÍAN QUE ELENA ESTABA TAN VULNERABLE QUE ERA EL PASE PERFECTO PARA SU VIDA.

Guido: ¿TÚ QUE SABES DE LO QUE ELLA SENTÍA?

Bastian: La conozco perfectamente y sé de que está hecha. A mi ese cuento que estabas tan enamorado de ella, sinceramente… nunca me lo creí.

Guido respiró profundamente esbozando una sonrisa de la maldad que él mismo poseía, sé lo que es, lo que muchos le temen, pero a estas alturas lo que ellos representaban para nada era parte de mis miedos.

Guido: Elena es mía, te guste o no. Un papel no dirá que me pertenece o lo deje de ser. ELENA LLEVA ME PERTENECE.

Bastian: ELLA NO ES UN OBJETO.

Se levantó bruscamente dejando caer la silla hacia atrás, Dimitri estaba demasiado atento a lo que pudiera hacerme, no se atrevería a ponerme una mano encima, no era el momento para hacerlo, por que tendría todas las de ganar, no hablo de fuerza por que él por si solo me mataría, hablo que en este momento mi credibilidad ante Elena es superior cosa que Guido ha perdido. Dimitri se levantó interponiéndose entre nosotros con las manos levantadas evitando un enfrentamiento.

Guido: Eres de lo peor Bastian Bonnet, tu ego de Dios te nubla la visión, no eres quien para decidir que hacer con mi vida y menos la de mi esposa. Elena se queda a mi lado no la dejaré ir tan fácil solo por que un estúpido perro como tú no está de acuerdo.

Entrecerré los ojos sin dejar de observar a Guido, la manera de como ve a Elena a su lado no era del todo de mi agrado, pero eso no tendría mucho por hacer.

Bastian: La única que puedo decidir en quedarse a tu lado es Elena. Pero por como veo las cosas…

Dimitri: Bastian, Elena en este momento solo está viendo lo que le has presentado.

Bastian: ¿Acaso es mi culpa?

Guido: SIII. DE ESO NO HAY DUDA, BIEN LO HAS DICHO NUNCA HAS ESTADO DE ACUERDO.

Crucé los brazos plantando mi autoridad ante Guido, lo que él pensara de mi estaba de sobras, por que no darle el beneficio de la duda. A los culpables a pesar de saber su culpabilidad también los dejaba hablar.

Bastian: Dame motivos para pensar lo contrario, por que de no convencerme, sabes que tengo la autoridad y el poder para que Elena te deje como el perro que eres.

Dio un paso y Dimitri lo sostuvo del hombro empujando, ahora era él contra mí y yo contra ellos, desearía tanto que Elena hubiera escuchado las cosas como son en realidad, pero ella en este momento solo tiene la idea que le he demostrado con verdades.

Dimitri: Basta los dos. Cada uno tiene parte de la verdad, no voy a decir que no, pero las cosas tienen un por que.

Bastian: Habla.

Guido respiró profundamente mirando hacia Dimitri, él asintió con la cabeza, como deduje ambos lo sabían y bien que se lo ocultaron a Elena, negué con la cabeza reposando en la orilla de la mesa, de este lugar no me iría hasta escucharlo a toda voz y pulmón por el mismo Guido.

Guido: Tú Bastian nos has juzgado desde siempre. Nunca has estado del todo de nuestra parte.

Bastian: Corrompen la ley.

Guido: POR FAVOOOR, ¿CORROMPER? ¿Cuántas VECES HAS PLANTADO EVIDENCIA ANTE LA VERDAD? ¿Cuántas PERSONAS HAS JUZGADO CUANDO NO HABÍA MANERA DE CULPARLOS? Lo has hecho con alevosía y ventaja.

Dimitri: Aquí nadie es inocente ni culpable, eso que quede claro.

Respiré profundamente, Guido tenía una especialidad en lograr siempre sacarme de mis cabales, rodeaba la mesa sentándome frente a ellos, hasta no saber la verdad, tendría el mismo concepto que tengo de Guido.

Se sentó mirando hacia el techo, le rogaba a todos sus demonios que le dieran ideas para convencerme en algo que estaba muy claro.

Guido: Es cierto, si sabía que Dina estaba viva, pero… a muchos les consta que mi vida con Dina solo era una pantalla de la familia feliz, no voy a negar que la apreciaba, que la quería a mi manera, pero no la amaba, ella ante todo lo sabía, no era nada nuevo ni oculto en hacerle saber que mis sentimientos no le pertenecían, siempre, siempre tuve la esperanza que en algún momento de la vida llegaría esa mujer especial a quien me rendiría ante ella, no fue la manera, cierto, no fue la manera pero no me siento culpable de haber ocultado la existencia de Dina.

Bastian: Omitir la verdad, también es una manera de mentir.

Guido: ¿Acaso siempre le has hablado con la verdad a Renata? No, no lo has hecho, le has ocultado muchas cosas y ¿Qué hace Renata? Confiar…

Reposé el codo en el reposero, rosaba suavemente mis dedos en los labios, nada de lo que tenga que negar, por que era cierto. Hay cosas que se pueden y deben decir y otras que no.

Guido: Cuando se tomó la decisión que fuera Elena la que llegaría y formara parte de nosotros, me sentí muy satisfecho, contengo que sea ella, aunque el miedo igual me inundaba, tenía presente el gran amor que le tenía y le tiene hasta la fecha a Alexander. Era algo que no iba a cambiar ni forzarlo, allí era quien tenía la desventaja ante ella. Lidiaba día y noche cada que me mandaban a retomar los pedimentos, conocer esa parte de Elena hacia que me interesaba cada vez más, es cierto Bastian, yo mismo cree la desconfianza que todos me puedan tener, pero cuando me casé con Dina, juré no volver a lastimar a nadie, por eso le hablé claramente a Dina sobre mis sentimientos. Todos, absolutamente todos creen que nunca he podido superar a Beida, puede que en el fondo le guarde un cariño muy especial y eso para nadie es una mentira, pero desde que conocía a Elena, ese sentimiento se avivó.

Bastian: Elena y Beida compartían por mucho la misma personalidad, tus gustos en particular, rubias, hermosas.

Sonrió negando con la cabeza, quería picarlo más de la cuenta, por que hasta ahora no me ha dicho nada que no sepa.

Guido: No, para nada tienen la misma personalidad, Beida era decidida y aguerrida, pero al final aceptaba las decisiones, en cambio Elena, es fuerte, convincente, tierna y servicial, no le importa si lo que tú o los demás piensan sea lo correcto, ella ve mucho más allá de la posibilidad de poder limitarse, lo hace, esquiva, no recibe ordenes y la hace certera. Eso es lo que la hace mucho más especial. Entre todas es la que de verdad vino a mover mi mundo. ¿Tan difícil es entender eso? Elena es… es… (sonriendo con los ojos cambiando de color) Despertar con el cuerpo lleno de pasión, me hace mirarla con emoción en el amanecer y tomarla una y otra vez hasta que el despertador nos diga que es hora.  Quisiera negar lo que siento, ero mi cuerpo esta sediento de sus caricias, cada momento del día trasmite deseos con solo pasearla por mi mente. Mi virilidad la despierta al solo imaginar su sendero, ese donde sus caderas me invita a pasearme y deleitarme al atardecer… Cada tela que porta siempre será admirada así como su sonrisa, la suavidad de su piel, cada amanecer saboreo sus labios al conocer su dulce miel… sus piernas son las murallas de mis pensamientos, donde derribarlas con suaves caricias, besos, me emociona al tener todo su cuerpo, juntar el sendero en el atardecer me hace imaginarla con tanto placer para quitar la sed… Combinar las letras con su cuerpo, genera un fuego ardiente que me invita a cobijarla con besis en su espalda, al tenerla tan candente me alegra el alma. Mi pasión es tan grande como su ternura en tan sensible, al besar su dulce cuerpo hace que su humedad dedicado a mi sea sublime.

Tragué saliva rompiendo mis pensamientos en cada palabra de Guido.

Guido: Si, supe al mes de casarme que Dina estaba viva, no lo podía creer, pero era cierto, hablé con Daemon y Dimitri haciéndome saber que lo mejor era ocultarlo, no por mi, no por mis hijos por que veía el dolor y tristeza de no tener a su madre, pero al darme cuenta de como Elena los iba ganando sin tapujos, me sorprendió la respuesta de ellos, Dina los ama, es cierto, son sus hijos, pero ella estaba más preocupada por mantenerme a su lado que ver por ellos, se daban cuenta que la atención y el cariño de ambas era muy diferente. Cuando la enfrenté, me hizo saber que me quería a su lado, en vez de preguntar como estaban nuestros hijos, solo le importaba tenerme a su lado y seguir la vida de la pareja feliz, le hice saber que no había cabida en mi vida, que ella decidió marcharse, no pensó en el dolor de mis hijos, no pensó más en querer venir a buscarme, no sé si soy su obsesión o no, pero ella eso demostró, le hice saber que seguí con mi vida, preguntó varias veces quien era la mujer, le dije Elena Blondon, la maldijo una y otra vez, pero dije que ella no se tenía la culpa de mis decisiones, Elena no había hecho nada malo para retenerme, por el contrario, las llamadas se volvieron constantes, las ofensas para Elena eran peores. Dime Bastian… ¿con que cara le pudiera decir a Elena que Dina estaba con vida? Dina prometió irse lejos, le di una suma muy fuerte de dinero.

Bastian: Ese fue desfalco que ustedes tuvieron en la bolsa de valores de Weston.

Asintió con la cabeza, entonces puedo pensar que Weston tuvo que saber igual la salida de tanto dinero, por eso ellos nunca quisieron presentar una querella para ver donde había terminado ese dinero.

Guido: Le di lo que pidió, pero es cierto, la subestimé, buscó a los aliados perfectos para ir en contra de nosotros, sabía de nuestros enemigos y conocía lo que ellos pudieran hacernos. Ella tiene mucha información sobre nosotros y sabe con que darnos para caer, ha empezado, pero la decisión de no decirle a Elena sobre Dina fue mía, de nadie más.

Exhalé un buen de aire, asintiendo con la cabeza.

Bastian: Si decidí tomar el caso de Dina, hablando de tu matrimonio, no fue para llevarte la contra o que pienses que no quiero ceder ante ti y Elena, pero mis motivos son claros, sino lo tomaba, Dina acudiría a otros abogados que pueden llevarte a prisión. No hablamos de simple mortales, hablamos de que perteneces a la mafia. Es más fácil que trate de defender a Dina pero demostrando la verdad, esto como sabemos no puede llegar a tribunales, por que ambos se van a prisión, pero si dejando en claro, que hay muchas cosas en tu contra para con Dina y sobre todo para Elena, por o tanto tu matrimonio con Elena queda anulado, ante la ley no vale por estar con vida Dina. Sé que cuando menos lo espere eso cambiará. Pero en este punto te diré lo que tendremos que hacer. Ahora no es el momento para hacerlo saber a Elena por que todo lo usará legalmente. Dina por los crímenes que ha hecho en contra de Laura y de ustedes mismos contra su hija, tiene mucho que perder.

Dimitri: ¿a que te refieres?

Bastian: Procederemos de la siguiente manera…

Tuve que empezar a decir como se tiene que manejar este caso, las cosas por simple vista Dina tiene todas las de ganar, pero la felicidad de Elena era la que me importaba. Así que saber que Guido tuvo motivos reales para ocultarlo le daba puntos a favor.

Los dos estaban muy atentos a lo que les decía, puntos a favor y en contra, pero siempre buscando la mejor solución, tampoco quiero ser quien prive a cada uno de lo que ellos mismos han construido, pero si dejando en claro que por ningún motivo podían asesinar a Dina ya que eso si sería un pesar si es que Dina decide tomarme como abogado y si no lo hace, buscará quien lo haga y las cosas pudieran complicarse. 

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